Heechul sintió que sus orejas se ponían calientes parado como una columna frente al bar. Tuvo ganas de vociferar lo mejor de su repertorio de groserías a ese tipo insufrible. ¿Cómo se atrevía a hacer esto con él? ¡Qué coraje!
Ese hombre estaba pidiendo a gritos una muerte lenta y dolorosa. Heechul tenía ganas de jalonearlo por el cabello pero se llamó al orden en un segundo: una chica fina como él no podía perder el glamour jamás. Respiró y dejó que el enojo pasara, dominó su rostro contraído y lo relajó así como sus puños apretados y le ordenó a sus pies continuar su camino.
Bajo ningún concepto iba a ser víctima. No iba a permitir que el resto pensara que lo habían hecho a un lado como algo sin importancia... aunque al parecer fuera verdad. Heechul mordió el interior de sus labios hasta el dolor. En el bar pidió una copa de agua helada con gas al barman que disimuló su incomodidad con todo lo que estaba pasando y que había visto en primera fila al estar de frente. El agua ni siquiera fue movida de la barra.
Cinco minutos después, Heechul se dirigió al baño de hombres, su mirada asesina iba abriendo el camino para él.
Una docena de cabezas se giraron al escuchar pasos finos y entaconados en el estrecho pasillito del baño de hombres: completamente fuera de lugar pero cierto. Desaprobación e incomodidad flotó en el aire en los primeros segundos al ver, en la semi penumbra rojiza del cartel "EXIT" y única luz en el área, la presencia de la chica descarriada y provocadora que se aventuraba sola entre tanto hombre.
¿Qué carajos hace una chica de este lado? Pues pedir a gritos que la follen a un milímetro de su vida... entre varios. Entonces, llegó el cachondeo y las propuestas subidas de tono: había más de uno dispuesto a darle la experiencia más heavy de su vida.
Todo se detuvo en seco cuando, ya más cerca, fue reconocible el rostro de la chica.
Heechul chequeó a cada hombre en la fila con una máscara de hielo colgando en su rostro. Ni una pizca de preocupación, nada de temor, sería divertido apostar quién se tiraría al ruedo como primer depredador... pero eso no iba a pasar y él lo sabía. Solo quería encontrar a Siwon que al parecer ya estaba dentro. Cuando su mano sostuvo la manija de la puerta, se volteó a los primeros en turno y una mirada bastó para hacerles saber que no tenían permitido entrar. Nadie protestó.
El baño de hombres había sido remodelado unos meses atrás, se quitó la mitad de los cubículos individuales para hacer urinarios y que más personas tuvieran acceso. Un revoltijo de exclamaciones y traqueteo de pantalones cerrándose rápidamente fue la respuesta al llamado de atención de Heechul cuando carraspeó su garganta. Con la cabeza les hizo señas de que salieran y dejó ir la puerta a sus espadas que se cerró con un pesado "click".
Caminando en la puntita de los pies para no hacer ruido ni delatar su presencia, Heechul revisó los cubículos inclinándose ligeramente para ver debajo de las puertas. Se sintió frustrado cuando llegó al último y no halló a nadie.
-¿Me estás buscando, preciosa?-
Heechul dio un brinco para nada glamoroso que lo dejó tambaleándose en sus altos zapatos de tacón. Todo se le erizó al escuchar esa voz. Su corazón se enloqueció al saberse descubierto. Experimentó una mezcla rara de adrenalina y vergüenza que lo embriagó. Lentamente se volteó para ver a Siwon, brazos cruzados y sonrisa triunfadora, apoyado contra la pared justo detrás de la puerta de entrada. El hombre echó el cerrojo y colgó su camisa en la manija.
HeeChul ya no pudo despegar los ojos de aquel cuerpo duro y sexy.
Él, que afuera hubiera sido capaz de pisotear a los hombres que lo miraron lujuriosos y pervertidos, ahora se sintió en peligro, un peligro mortal. Heechul se vio a sí mismo cual ratón en la ratonera. Heechul se sintió terriblemente nervioso, ansioso, confundido y caliente en presencia de Siwon... el hombre al que supuestamente buscaba para echar a patadas de su club.
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Mi pareja, mi destino.
FanfictionSiwon persiguió el rastro, efímero, escurridizo, que hacía correr su sangre y latir su corazón con más fuerza. Eso era lo único que tenía y se aferraría. Siwon lo encontró, sus esfuerzos tuvieron recompensa al final... pero se llevó una sorpresa. "E...