Acompañemos a Natsuki Takami en toda la aventura que implica estar en la Academia U.A, un lugar donde va a experimentar tristezas, alegrías, diversión, dolor, y muchas otras cosas. Pero, sin duda alguna una de las experiencias más significativas ser...
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"HAY QUE INTENTARLO"
MIENTRAS BEBÍA DE SU TÉ, no pudo evitar pensar en Shōto. ¿Qué estaría haciendo en esos momentos?
Deseaba ir a la habitación de este, tocar la puerta y pasar la tarde con él, charlar con él y conocerlo más. Sin embargo, cuando recordaba la conversación que llevaba semanas postergando, se acobardaba y terminaba quedándose en su habitación.
Terminó su té y se dispuso a practicar gimnasia, no sabe cuánto tiempo estuvo, sin embargo, estaba más relajada que cuando inició, por eso mismo luego de haberse duchado y cambiado tomó una decisión de la cual no sabía si iba a arrepentirse o no.
Tocó la puerta y esperó pacientemente a que está fuera abierta.
—Hola —saludó ella con una leve sonrisa, el bicolor solo la observaba con sorpresa—. ¿Eh... puedo pasar?
Eso lo hizo reaccionar, Shōto asintió y se hizo a un lado dejando que la chica pasara.
Natsuki jugó con su cabello, visiblemente nerviosa por lo que diría a continuación.
—¿Estás ocupado? Entiendo si lo estás, pero yo-
—No estoy ocupado —le interrumpió él mientras cerraba la puerta—. ¿Qué necesitas?
—Hablar contigo —respondió directamente.
—Pensé que me ibas a evadir por siempre —murmuró él mientras que se acercaba a la chica.
—Lamento mucho eso —se disculpó—. No debí haberte evitado de esa manera, no lo merecías.
—Natsuki-san, espero que esta vez podamos aclarar todo.
—Me gustas —confesó mientras miraba sus pies—. Y mucho, pero yo no-
—Antes de que expreses que no eres suficiente —le cortó él—. Me gustaría poder hablar.
Ella levantó la vista y lo miró, expectante por lo que él diría. Ciertamente se colocó muy nerviosa al ver el rostro del bicolor, estaba más serio que de costumbre, y al no saber lo que diría, le provocó aún más nervios.
—Mi vida no ha sido fácil, eso lo sabes —empezó a decir—. Pero estos últimos meses ha sido más llevadera, gracias a eso he descubierto sentimientos que no sabía que podía sentir.
El corazón de Natsuki empezó a salir con fuerza ante eso último ¿Acaso él tenía sentimientos por ella?
—Entre estos, el amor romántico —continuó el bicolor—. No lo notas, pero eres una increíble persona, tan amable, tan tierna, tan servicial, todo eso hizo que me empezaras a gustar.
Su corazón empezó a latir con mayor fuerza, no esperaba esas palabras del bicolor.
—No me preguntes donde o cuando me enteré de estos sentimientos, porque no sabría responderte con certeza, pero estoy seguro que desde el primer día me gustaste, llamaste mi atención desde el primer momento.
