Cap 09

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Nuevamente en la noche, la mayoría dormía a excepción de la ninfa, la cual se levantó de su lecho y de puntitas se acercó al cuarto del mapache, no abrió la puerta, pero lo escuchó roncar, se oía cansado, quería salir a recorrer el bosque otra vez con él, pero sería egoísta de su parte hacer que la acompañe solo para defenderla de los peligros de la noche. Decidió quedarse, dormir no era una opción ya que no tenía sueño y estaba aburrida, subió a la parte de la cabina, ya que ahí los ventanales eran enormes y podía ver el cielo, hizo crecer unas setas esponjosas y se recostó en ellas, para así mirar mejor las estrellas, en su cabeza daba vueltas esa incógnita de cómo podía encontrar su planeta natal, si nadie en toda la galaxia lo había visto antes, y quien lo logró, acabó muerto por tráfico de especies.

Trató de relajarse, y para eso se comió un hongo alucinógeno, a los pocos minutos este hizo efecto, veía luces de colores moverse tanto en el cielo como en la nave, su cuerpo se sentía muy ligero, como si pudiera flotar, vio una luz muy brillante, sentía que iba hacia ella, cuando estuvo lo suficientemente cerca quiso tocarla, y ahí su mano empezó a consumirse por la luz, como si entrara a una especie de portal y....

Un estruendoso relámpago la sacó de su trance, no sabe cuánto tiempo habrá estado viajando su mente, pero recordaba que el cielo estaba despejado y ahora había nubes de tormenta, observando la lluvia se puso a pensar en lo que vio en su alucinación, que la razón por la que nadie pudo encontrar nunca las coordenadas de su planeta, era porque quizás dicho planeta no estaba en esa galaxia, sino más bien, en otra dimensión, y que para acceder a él es a través de un portal.

Con esta deducción, se levantó para ir a su cama y dormir más tranquila, ya creyendo que tenía una posible pista de cómo llegar a Portland.
En el camino, se topó con el mapache quien acababa de salir de su cuarto sosteniendo una almohada, su cuerpo temblaba mientras resonaban algunos truenos allá afuera.

-Oh.... No te esperaba despierta... - mencionó al verla mientras apretaba un poco la almohada con su mano.

-Es que no podía dormir por tantos pensamientos en mi cabeza... Pero creo que ya lo resolví.... ¿Y tu? Creí que dormías...

-Tsk.... Lo hacía pero.... - trato de disimular pero su nerviosismo no ayudaba. - tenía frío... Así que iba a buscar otra manta....

-¿Y para que la almohada?

-Es que.... - un relámpago resonó fuertemente afuera, esto lo hizo saltar del susto y por inercia se abrazó a una de las piernas de la ninfa, la cual lo vio con incredulidad. - ok ok..... Detesto las tormentas eléctricas, los truenos, relámpago, centellas, Etc. Todo lo escucho demasiado fuerte y eso me... me....

-¿Perturba? - lo miró comprensivamente.

-Ugh... Si... Es tan estúpido... Pero es por mis sentidos agudizados.... - se sentía avergonzado, otro trueno resonó, se oía como si hubiera caído al lado de la nave, se aferró más. - mierda.... En fin, ¿Puedo dormir contigo al menos por esta noche?

-Claro, aunque en mi "cuarto" no hay mucha privacidad.... - no quería que a la mañana siguiente sus compañeros lo encuentren ahí y se burlen de él como en otras ocasiones. - Mejor vamos al tuyo.

-Okey.... - se dispusieron a ir al cuarto, cayó otro relámpago, nuevamente se pegó a ella por el susto. - ugh, ¿Enserio es necesaria la lluvia en este planeta?

-¿Y cómo le haces cuando hay tormentas en una misión? . - puso una mano en su cabeza para acariciarle.

-Es diferente, para casos así siempre estoy preparado, pero ahora solo quiero dormir y el ruido es tan molesto...

Llegaron al cuarto y se acomodaron para dormir, ella rodeaba con sus brazos al mapache para que se sintiera protegido, la tormenta eléctrica seguía y a Rocket le estaba costando conciliar el sueño por más que se aferrara a la ninfa, esta última optó por usar otro método, sigilosamente soltó unas esporas para sedarlo cuando las inhale, no le gustaba la idea de drogarlo, pero fue un método bastante efectivo, el mapache ahora dormía plácidamente.
La ninfa de vez en cuando le acariciaba el rostro, no podía evitar sonreír al verlo tan apacible, le depositó un beso en la frente y se dispuso a tratar de dormir mientras aún lo abrazaba.

𝑪𝒂𝒍𝒍 𝒎𝒆 𝒚𝒐𝒖𝒓 𝑵𝒚𝒎𝒑𝒉  - Rocket Raccoon fanfiction Donde viven las historias. Descúbrelo ahora