Carlos bajó a Charles del auto con cuidado y entró a la casa, decidió llevarlo al cuarto de invitados y ahí lo acomodó en la cama cubriéndolo con las cobijas. Le habían dicho que seguramente tardaría varias horas e incluso días en despertar de nuevo mientras sanaba y que estuviera preparado pues, seguramente el omega estaría igual o más alterado que la última vez que despertó.
En el hospital se habían encargado de cambiarle los vendajes y limpiar sus heridas así que ya no tendría que hacerlo hasta mañana, le dieron una lista de los medicamentos que debía comprarle para el dolor y para limpiar y ayudar a cicatrizar sus heridas una vez estuvieran cerradas.
Luego de dejar todo en orden en la habitación Carlos salió, decidió dejar la puerta abierta pues estaba seguro de que el omega seguiría dormido un rato y ni quería que se asustara por estar encerrado cuando despertara.
Bajó las escaleras y miró el reloj 4:30, debía ir por Elara si no, no les daría tiempo de entrar a la piscina como le había prometido, le envió un mensaje a Max para que se encontraran en la plaza y condujo hasta allá.
Llegando a la plaza encontró a Max y Checo en la fuente de la entrada con su pequeña como habían acordado, se acercó a ellos y saludó a los dos chicos. "Listo pequeña vamos a casa", tomó la mano de Elara y miró a Max, "De nuevo muchas gracias"
"¿Y me dirás que pasó?, ¿y por qué hueles así?"
Carlos apenas se había dado cuenta de que tenía el olor de Charles impregnado, tendría que explicar muchas cosas definitivamente, pero ahora sólo quería pasar el rato con su cachorra.
"Pasa mañana temprano a mi casa y te contaré todo, también puede ir Checo y llama a Lando igual, debo decírselo a los tres", y a muchas personas más pensó el alfa, pero todo a su tiempo, "por ahora disfruten de su cita, ya no los molesto más" cargó a su pequeña y se despidió.
Iban de vuelta a casa en el auto y Ela olía todo curiosa, él lo notó y la miró.
"¿Qué tienes El's?", Elara adoraba que su padre la llamara así.
"Huele raro de nuevo"
Claro el olor de Charles, otra vez lo había olvidado.
"Tú también hueles así"
"¿Te molesta mucho?", Carlos abrió las ventanas para que el olor saliera, aunque no funcionaría mucho si el olor del omega estaba impregnado en él.
"No, no me molesta, de hecho, me gusta mucho pero no es tu olor normal, ni el de nadie que conozca"
Asintió y miro a la niña por el retrovisor, sintió un gran alivio al saber que a la niña le agradaba el olor. "No, no lo es, después te explicaré todo mi pequeña cachorra..."
"Está bien", la niña no le dio mucha importancia, ahora lo único que quería era llegar a casa y entrar en la piscina como le habían prometido.
La pequeña corrió escaleras arriba sin notar siquiera que el olor que tenía el auto y su padre también estaba en la casa.
Se quitó la ropa cambiándola por un bañador, escuchó unos golpecitos en su puerta y al abrir encontró a su cachorra dando saltitos de emoción con su bañador de sirena puesto. Sonrió nuevamente y tomó el bloqueador solar antes de salir con ella al jardín donde se encontraba la piscina, antes de entras puso bloqueador en ambos para no quemarse con el sol.
Finalmente entró a la piscina saltando y ya dentro cargó a Ela poniéndola en su flotador de patito. Estuvieron un buen rato en la piscina, la pequeña niña amaba el agua y Carlos verla feliz, jugaron, nadaron y salpicaron agua por todos lados, luego de varias horas en la piscina comenzaba a oscurecer y la cachorra parecía haber agotado sus energías, la cargó recostándola en su pecho y salió de la piscina, la tapó con una toalla y se secó un poco para no chorrear agua por toda la casa llevó a la pequeña a su cuarto y la dejó bañarse mientras el preparaba la cena aún sin quitarse el bañador.
ESTÁS LEYENDO
Cuídame
FanfictionDonde Carlos debe tomar una desicion respecto al omega moribundo que encontro cerca de su casa Es una adaptación de una historia anónima AO3. Pero autor permite cualquier tipo de adaptación.