Médico Cirujano [Hyunlix]

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La bonita relación estaba yendo más que bien, ambos se llevaban increíblemente, se respetaban y amaban con todo su ser.

Después de lo que pasó esa tarde tuvieron que dar muchas explicaciones a los amigos de Félix, quienes poco curiosos habían estado casualmente en el cuarto de al lado donde escucharon absolutamente de todo.

Fue algo difícil que entendieran las circunstancias de la relación, pero terminaron aceptándola, igualmente si no le gustaba a Jisung y Jeongin no habría cambiado ni afectado un poco su relación, pero le gustaba mantener la marea baja y tener las mínimas peleas posibles. La relación de odio que se tenían Hyunjin y Minho mejoro mucho, no se podía decir que son amigos, para nada, pero cuando les tocaba convivir lo hacían sin problemas y talvez compartían uno que otro chiste tonto.

Cómo los adultos jóvenes que eran sin muchas cosas en las que gastar y con un buen sueldo no se preocupaban mucho en el dinero gastado en ellos mismos, en salidas, citas, restaurantes caros, y alguno que otro detalle.

Pero aun con todos estos regalos monetarios preferían mil veces el tiempo de calidad entre ellos, muchas noches después de trabajar se iban en el mismo auto a la casa de uno y se quedaban viendo películas hasta la madrugada dónde caían dormidos compartiendo cama y espacio personal, había veces que incluso no llegaban a su casa en más de 24 horas, ya que se quedaban a dormir, iban al trabajo y volvían a la misma casa donde durmieron, hasta el día siguiente.

Y como cada vez Hyunjin pasaba menos tiempo en casa decidió dejar a su perrito con su hermana, ella tenía una pequeña hija con su esposa, Yeji le aseguro que no iba a poder recibir más cariño en esa casa. Le dolía mucho tener que hacerlo, amaba a kkami, pero en ese momento tenía otras prioridades y un perro necesita tanta atención como un humano y no sería justo dejarlo todas las tardes, solo con unas personas llegando de vez en cuando a cumplir con sus necesidades básicas.

Hyunjin tenía una relación típica con los amigos de Félix, se veían casi todos los días cuando iban a la casa del rubio, no era que se llevarán mal, ni de cerca, pero siempre tenían esas tontas discusiones donde peleaban por el amor y atención de Félix dónde nunca ganaba ninguno porque Félix se aburría y se iba.

De ahí podrían decir que se llevaban como amigos no tan cercanos, aunque la mitad de la semana Jeongin tuviera que preparar un plato más para ese castaño, que además no comía nada que sea considerado comida fina, parecía que su alimentación se basaba en fideos picantes y más comida de las tiendas de conveniencia que están abiertas las 24 horas.

Iban todos los fines de semana, específicamente los sábados en la tarde, a la casa de Yeji dónde además de visitar a su perrito y a su sobrina, aprovechaban para invitarlos a comer o ir en un paseo familiar.

Félix en un punto tuvo la oportunidad de conocer a los padres de Hyunjin, más bien reencontrarse con ellos por qué ya los había conocido antes. Los señores Hwang eran personas muy dulces, pero muy serias y educadas, al principio se negaron completamente a la relación por lo que pasó hace años, no querían que su hijo volviera a revivir lo que pasó cuando terminaron aquella vez.

El rubio se sentía muy mal por eso, pero el día que fue a la cena que habían planeado fue completamente diferente a lo que esperó, al principio fueron muy fríos con él y apenas le dirigían la palabra, pero después de que el ambiente se ablandará empezaron a conversar anímicamente de como era su vida en ese momento. Lee Félix era una persona completamente diferente a la que habían conocido, tanto físicamente como emocionalmente y eso no les podría poner más felices, era un chico guapo, carismático y con buen trabajo, no podían pedirle más.

Los días juntos eran todo lo que más amaban en este mundo y por esa misma razón pasaban a una velocidad inimaginable, estaban a nada de navidad, a tan solo unos días de esta celebración, por eso pidieron sus días de vacaciones, Hyunjin tenía aproximadamente un mes acumulado de las veces dónde había decidido trabajar en vacaciones, pero Félix al ser apenas ingresado en ese año solo tenía una semana para no asistir.