all for us ★ katniss everdeen

xvii. somebody that i used to know

Peter observó con tristeza el hecho de que Katniss mirara el ventanal de forma fija y sin decir una sola palabra. El también se sentía sumamente destruido por el hecho de que no había podido despedirse de su familia.

A pesar del trato que su madre le dió, el no quería irse sin despedirse de ella y, tal vez, que ella por fin le concediera un abrazo.

─Les escribiremos cartas, Katniss ─reconforta Peter colocándose de rodillas frente a ella─. Así será mejor, les dará algo nuestro a lo que aferrarse. Haymitch se las hará llegar si... si hace falta ─la voz ahogada de Peter lo delata, Peter no sabe si Katniss no lo nota o lo ignora.

Katniss asiente y se va a su habitación. Peter se deja caer en un sillón y suspira frustrado mientras se jalonea el cabello hacia atrás.

No sabe cómo reconfortar a Katniss si ni siquiera sabe cómo calmarse a él mismo. Es una mierda. Peter maldecía mil veces al Capitolio por mandarlos nuevamente a esa arena. Las pesadillas se veían multiplicadas en solo cuesta de segundos y ni siquiera había tocado la cama. Repentinamente siente como alguien toca su hombro, levantó la vista y vislumbró a Effie dandole una media sonrisa.

─Está algo cansada. Dale tiempo Peter. No siempre puedes quitar su dolor, preocúpate de tu dolor también ─habla la extravagante mujer─. Ve a descansar, anda.

Effie deja un beso en su sien y el labial fucsia se marca en la tersa piel del adolescente rubio, Peter le sonríe a la mujer y a Haymitch y se marcha a su habitación. Toma una ducha y se viste con su pijama.

No durmió esa noche, solamente trató de mil y una formas escribir cartas para Delly, Peeta y su padre. No es como sí deseara enviarle una carta a su madre y otros hermanos, pero en todo caso, puede que su padre mostrara la carta a su madre.

Peter esperaba que no lo hiciera.

Cuando Effie tocó la puerta y avisó la hora del desayuno, Peter se quejó porque esperaba poder dormir algo. Se metió en la ducha y se lavó el cabello.

Al salir de la ducha se dirigió al comedor en dónde todos tuvieron un desayuno algo incómodo. Y silenciosamente repugnante.

─Me gusta mucho tu nuevo cabello, Effie. Se te ve hermoso ─Peter sonríe a pesar del cansancio que siente, Effie le agradece.

─Lo pedí expresamente para que fuese a juego con el broche de Katniss. Pensaba conseguirte una pulsera dorada para el tobillo y quizá un brazalete de oro para Haymitch, o algo así, para que parezcamos todos un equipo ─Peter abre los ojos enormemente pero sonríe, está claro que Effie no tiene idea de lo que simboliza el broche de Katniss ahora.

─Eso es una gran idea, Effie ─luego, Peter mira a Katniss y a Haymitch, que inmediatamente se dan cuenta de las ojeras gigantescas que tiene─.¿Qué les parece?

─Hagan lo que se les de la gana ─les dice Haymitch a ambos. Peter toma una taza de café y la bebé de golpe, esperando a que el sueño se le pasara.

─Eso no es muy icono de la moda de tu parte, Haymitch ─intenta bromear Peter, sorprendentemente Katniss le sigue el juego.

─Si Mitch, quizá podríamos buscarte una peluca ─Haymitch observa brevemente a Katniss. Sin embargo, Peter parece encantado por el hecho de ver a Katniss bromear.

Un silencio incómodo vuelve a formarse.

─¿Quieren ver las repeticiones de las cosechas? ─Peter, sin esperar respuesta, va por su cuaderno de notas un lápiz, después vuelve y comienza a escribir todo lo relevante.

Sesenta de setenta y cinco tributos ganadores en toda la historia siguen vivos. Las cosechas pasaban de forma normal hasta que ocurre la del distrito 4.