25. El pedido

68 4 0
                                    

16 de noviembre.

Ayer, luego de irme de la habitación de Harry, me puse más hielo en mis heridas, se habían desinflamado, pero seguían estando.

Todavía tenía que denunciar lo que había hecho Pansy, pensaba hacerlo más tarde, pero primero quería hacer una carta a la Narcisa, pidiéndole que me dejara hacer mi fiesta de cumpleaños en su casa. Mejor dicho, mansión.

------------------------------------------------------------------

Narcisa,

Hola, ¿cómo está todo por allí? Ha pasado tiempo de que no he hablado con mi madre sobre ya sabes que, pero no me dan ganas de sacar una sola conversación con ella, ni mi padre.

Te quería pedir un favor muy importante para mi, es todo parte del plan. Quiero hacer una fiesta por mi cumpleaños, el 16 de enero. Y me preguntaba, si podía ser en tu casa.

Por favor, no le digas nada de esto a mis padres, no los quiero ver allí, aparte arruinarían mi plan.

Diles a mis padres que te escribí a vos, diciendo que el plan marcha mejor de lo que pensaba. Harry, ya es mi amigo.

Pd: Draco se encuentra bien, no te preocupes por el.

Tn Malfoy.

------------------------------------------------------------------

Todo el favor es una verdad, el resto una mentira.

El plan no iba nada bien, Harry es algo más que un amigo, y Draco, últimamente no se nada sobre el. Está demasiado ocupado.

Sentía que Narcisa era como una madre para mi, cuando era chica, Draco y yo, jugábamos en la casa de los Malfoy.

Aunque a mi madre, no le gustaba que pasara tiempo allí. Nunca quiso que aprendiera magia, hasta que mi padre vino.

Unos minutos más tarde, decidí que tenía que ir a decirle a Dumbledore lo sucedido.

Baje las escaleras y me dirigí hacia su oficina, era la primera vez que iba para allí, pero por suerte, fue muy fácil encontrarla.

Una vez, había escuchado que a Dumbledore, le encantaban los fénix, y su entrada a la oficina....bueno, la escalera estaba así por decirlo "decorada" con un fénix dorado.

Cuando ingrese allí, Dumbledore, me vió sorprendido.

- ¡Tn! ¿Pero qué te ha sucedido?- Me dijo mientras se acercaba, su tono no era preocupado, pero por alguna razón, era como Luna, hablaban de una manera muy especial. Imposible de describir.

- Pansy estaba molestando a un niño de primer año, y le pego. Me enoje tanto que le dije que no lo haga y ella me pegó.

- ¿Ella atacó primero?

- Sí, y al niño también.- O eso creía, parecía que el pequeño no le había hecho nada.

- ¿Y tú no te defendiste?- Me preguntó Dumbledore mientras miraba el escudo de mi casa.

- Sí, perdona, pero solo me defendí.- Le respondí a Dumbledore, presentía que a él no había que mentirle, cualquier cosa falsa que diga, se daría cuenta que es una mentira.

- Cuídate Tn. Puedes retirarte.

Pero cuando escuché eso, por alguna razón, me sentí estafada, quería que retaran a Pansy, ¿eso solo me pensaba decir? ¿No le parecía una falta de respeto lo que había hecho Pansy? Era muy injusto, no estaba bien lo que ella hizo, y no le van a decir nada.

Me retiré de la oficina algo molesta, sinceramente esperaba más de Dumbledore.

Cuando salía de la oficina, camine hacia el patio, allí pude ver a Hermione.

- ¡Tn! ¡Aquí estás!- Me dijo Hermione mientras me llevaba a un banco aparte y me sentaba allí.- Harry me contó lo que te paso ayer.- ¿Qué cosa exactamente le había dicho Harry? Por un momento me asusté, pero luego ella dijo- ¿Cómo te sientes?

- Mejor, ya me apliqué hielo y una venda.- Contesté esperando a que no se refiriera a otra cosa.

Cuándo dije eso, pude ver que Hermione ya no me prestaba atención, estaba mirando a una esquina en el otro lado del patio.

En esa esquina, estaban Ron y una chica sumamente cursi, esas que ven todo el mundo de rosa, bueno, pero se estaba besando con Ron. No imaginaba su vestido de princesa o su gran castillo. Estaba con un príncipe azul. Cual, para mí, es el príncipe de Hermione, no de esa chica.

- Así que Ron tiene novia..- Le dije a Hermione, haber si se daba cuenta de que ya la había visto mirando a Ron.

- Ni lo digas. Solo con pensar en Ron y Lavander juntos me dan ganas de vomitar.

- ¿Qué te molesta, qué Ron salga con ella o qué esa chica no seas tu?- Le pregunté a Hermione, se notaba a distancia que ella estaba enamorada de Ron.

- No se a que te refieres Tn. Imaginas cosas.- Me contestó Hermione mientras me miraba seria.

- Ron está con ella Her, mira, seguro hay otros chicos queriendo salir contigo. Por ejemplo...- Dije mientras miraba alrededor.- El.-

- ¿Quién? ¿Cormac? Ni en tus sueños Tn, no lo conoces. Es muy desubicado.

- Sí tu lo dices...

Cuando dije eso, vi a lo lejos acercarce a mi una pequeña silueta. Cada vez veía mejor quien era...

- Tn, soy Thiago. Gracias por defenderme ayer, eres muy valiente.- Era aquel chico de Ravenclaw, esta vez, sujetaba una flor amarilla en su mano.- Toma.- Me dijo mientras me entregaba la flor. Cuando la agarre, se fue corriendo.

- ¿Qué fue eso?- Dijo Hermione.- Creo que no soy la única que tiene chicos atrás, y de todas las edades...

- Por favor Hermione, no digas tonterías.- Hermione ya empezaba a insinuar cualquier cosa, ella no lo sabía, pero yo estaba de novia. Y aquel Thiago solo era amable.

- Sí tu lo dices...- Me dijo mientras me copiaba la frase que anteriormente había mencionado.

- ¡Hey! No me copies.- Me dije mientras me reía y ella hacía lo mismo.

En mi mano, sostenía la flor amarilla que me había dado aquel chico. Era un gesto muy tierno de su parte. De grande, ese chico será un galán.

A lo lejos, podía ver como Theodore me observaba, creo que algún día tendría que aclarar mejor las cosas con el.

- Y tu Tn...¿cuándo vuelves a jugar un partido?- Me preguntó Hermione, mientras abría un libro que tenía en la mano.

- No me acuerdo exactamente, pero sé que tengo más adelante tengo un partido contra Gryffindor ¿No estabas enterada?

- No, lo siento. Es que, no me gusta mucho el Quidditch.

Ese dato sobre Hermione, me había sorprendido bastante. El Quidditch, para mí, era una parte de mi vida.

Cambié el sentido de mi cabeza, y lo ví a Draco, mirándome de una manera seria, y podía ver decepción en la mínima mueca de su cara.

Draco se acercó a mi.

- Tn, tenemos que hablar, es muy importante.

- ¿Qué ocurre?- Le pregunté a Draco.

- Sin la sangre sucia.- Me dijo Draco.

Las palabras de Draco fueron tan hirientes que Hermione se levantó de su asiento y se fue corriendo con todos sus libros. No sabía donde había ido, pero cuando llevaba la mitad de su camino recorrido, pude escuchar un sonido de los que haces cuando tragas tu tristeza y las lágrimas.

Un amor imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora