Cuatro meses. Cuatro meses hace que estoy en este lugar. Desde el día que escuché las voces en mi cabeza, nunca más las volví a escuchar. Todos los días salgo a buscar una salida del maldito Laberinto. Ya me sé los nombres de todos los habitantes y me han dicho que desde que llegué, este lugar es más alegre. Cuando nadie nos ve, Newt y yo nos metemos al bosque para estar a solas y que nadie vomite mientras nos besamos. Soy muy unida a Newt, pero cuando no estoy con él, estoy con Nick, Minho, Ben, Jeremy o Gally. Ahora los "Creadores" me envían ropa, incluido ropa interior. No soporto tanto tiempo la misma ropa toda sudada. Me la envían en una caja que dice mi nombre, ya amenacé a los habitantes, si alguien abre esa caja, lo castro. En estos cuatro meses, ninguna mujer llegó, todos los novatos eran varones. Suponemos que seré la única mujer en el Área por un largo tiempo.
(...)
Terminé de atar los cordones de mis zapatillas y entré al Laberinto, Jeremy ya se había adelantado, pero siempre lo alcanzo. Vi su cabeza rubia y en silencio aceleré el paso. Cuando estuve a su altura, lo asusté.
—¡Shuck, _____! Te dije que odio que hagas eso. —me retó y reí.
—Lo sé. Pero es muy divertido. Gritas como una niña. —bufó. Saqué mi cuchillo y comencé a cortar las lianas. Tomar una, cortarla, tirarla. Eran como las migajas de pan de Hansel y Gretel. Recuerdo el maldito cuento, pero no recuerdo con quien o cuando lo leí. Cuando estábamos por doblar en una esquina, Jeremy me tomó de la camisa y me pegó a la pared.
—¿Qué haces? —pregunté asustada. Tapó mi boca con una mano.
—Shh... —me calló. Señaló adelante nuestro y pude ver un penitente. Nunca había visto uno. Bueno, sí. Pero por una ventana. Teníamos un muro que nos separaba, ahora no.
—Shuck... —maldije. Lentamente retrocedimos y saqué mi machete. Por si acaso.— Cuento hasta tres y salimos corriendo. —susurré. Jeremy asintió y conté hasta tres con los dedos. Cuando levanté el tercer dedo, salimos corriendo. Seguimos el camino de las lianas y cuando estábamos por llegar al Área, me detuve. Luego me di vuelta y entré otra vez al Laberinto.
—¡_____! ¿¡Que haces!? ¡Vuelve! —gritó. Lo ignoré y seguí el camino de las lianas. Entonces vi al penitente. Venía corriendo en dirección al Área.
—¡Hey! —lo llamé. Levanté mis brazos para llamar su atención y comenzó a acercarse lentamente. Luego aceleró el paso. Me di vuelta y corrí en dirección contraria al Área. Mi plan funcionó. Me estaba siguiendo y yo lo alejaba del Área. Comencé a correr más rápido y a doblar en todas las esquinas. Cuando miré detrás mío, el penitente no estaba. Lo perdí. Apoyé mis manos en mis rodillas y recuperé el aliento.
—¿_____? ¿Que haces en mi sección? —preguntó Newt que se encontraba delante mío.
—Salvé la vida de todos, Newt. —presumí y Newt rió.
—¿De qué nos salvaste? —reí irónicamente.
—Si te lo digo me matarás.
—No. No lo hiciste. —Newt me acusó con su dedo y asentí.
—Hace diez minutos estoy corriendo de un penitente.
—¿¡Estás loca!? —gritó.
—No. Estoy viva, Newt, soy genial. —me tiré en el piso y Newt suspiró.
—¿Que se supone que haré contigo? Deja de arriesgar tu vida, _____. —oh si. Olvidé mencionar que casi me caigo de un árbol, casi me caigo del techo de la Finca y casi me caigo de una escalera. No recuerdo porqué estaba en esos lugares.
—Se supone que me besarás. —propuse levantando y bajando las cejas sucesivamente.
—No.
—¿Por qué? —hice un puchero y el rió.
—Estaba bromeando, ven aquí. —dijo. Me levanté y me tiré en sus brazos. Me encanta ilusionar a Newt. Le di un beso en la mejilla y lo solté.— ¿En serio, _____? —asentí.
—Chicos. —llamó alguien. Miré a Minho que acababa de llegar. Estaba señalando detrás de mi.
—Oh, no. —me di vuelta y vi al penitente a unos doce metros de mi. Me levanté y tomé a los dos chicos de los brazos.— ¡Corran! —los solté y miré mi reloj. Las puertas se están por cerrar. Le hice unas señas a Newt y él asintió. Nos estábamos dirigiendo al Área. El penitente nos pisaba los talones. Estábamos muy cerca de las puertas. Escuché el sonido de éstas cerrándose y aceleré el paso. Doblamos en una esquina y ya podíamos ver las aperturas, les quedaba un espacio de diez metros para cerrarse. Si lo que pienso funciona, nosotros podremos pasar y el penitente quedará dentro del Laberinto. Minho cruzó las puertas primero, yo pasé segunda y Newt estaba por pasar, pero el penitente estiró una de sus púas y lo tomó de la camisa. Reaccioné rápidamente y tomé su mano, tiré de él, las puertas se estaban por cerrar. Saqué mi machete y corté la camisa de Newt. Caímos al piso y nos levantamos rápidamente. Corrimos y tuvimos que pasar de costado. Un paso más. Newt cruzó y me tomó de la mano, tiró y me salvó de morir aplastada por las puertas. Me abrazó y me dijo que me amaba en susurros, repetidas veces.
—También te amo, Newt. Te amo. —luego de esas palabras, me desmayé y la oscuridad me atrapó.
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«The Beginning» Newt y tú (EDITANDO)
FanfictionMi nombre es _____. Llegue al área como todos los habitantes, la diferencia es que soy una chica, y mi hermano llego conmigo. [Este fanfic se ambienta antes de la llegada de Thomas.] No acepto copias ni adaptaciones. Publicado el 15 de agosto de 20...