Capítulo 16

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—Paremos para descansar. —propuso Jeremy. Se detuvo y yo también. Me quité la mochila y busqué agua. Tomé poco, para que me dure toda la mañana.— Ahora vamos a hacer el mismo proceso de las lianas, solo que tú las vas a cortar.

—De acuerdo. —me senté y tomé una manzana, le di un mordisco y tragué. Miré a Jeremy, que estaba anotando algo en una libreta. Luego miré el muro que tenía en frente mío. Vi un destello detrás de una de las lianas, me paré y caminé hasta el muro. Corrí las lianas y pude ver una placa de metal que tenía la siguiente inscripción:

"Catástrofe y Ruina Universal: Experimento Letal"

—¿Qué es esto? —pregunté. Miré a Jeremy y él me miró a mi, dejando lo que estaba haciendo en la libreta.

—Oh. Eso. Está por todas partes. En todo el Laberinto. —miré otra vez la placa de metal y luego me senté otra vez en el piso. Suspiré y me tapé la cara con las dos manos. Me empezó a doler la cabeza y veía todo borroso.— ¿_____? ¿Te pasa algo? 

—Me duele la cabeza y veo todo borroso. —me quejé con el ceño fruncido.

—¿Quieres volver?

—Ya se me va a pasar. Mejor si me quedo sentada un rato. —recosté mi espalda en el muro de piedra y respiré profundo. El dolor no cesaba.

—_____, en serio. Vamos. Si no puedes caminar te llevo en mis brazos.

—De acuerdo, vamos. Puedo caminar. —me levanté y una voz resonó fuertemente en mi mente. "CRUEL es bueno". "Todos ustedes nos van a salvar". "Solo recuerda _____. CRUEL es bueno". Caí de rodillas.

¡_____! —gritó Jeremy. Me tomó de los hombros y me miraba preocupado. Las voces seguían hablando en mi cabeza. Cada vez más fuerte. Tapé mis oídos y comencé a gritar.

—¡Basta! ¡Basta! —lágrimas comenzaron a caer por mis ojos. Cerré los ojos e intenté que las voces se fueran, pero cada vez que lo intentaba se volvía peor, se escuchaba más fuerte. Sentí que Jeremy se levantaba y salía corriendo. Luego de unos diez minutos, las voces fueron bajando de tono, susurrando. Estaba hecha un ovillo en el piso, con los ojos mojados de tanto llorar, no pestañeaba y miraba un punto fijo del suelo.

—¡_____! —Newt se acercó corriendo a mi y me abrazó.— ¿Qué te pasó? ¿Estás bien? ¡_____! —salí de mi shock y lo miré.

—Newt. —susurré. Lo abracé y comencé a llorar en su hombro.

—Ya está. No pasa nada. —Newt me acariciaba el pelo y me daba besos en la frente.— Vamos. —me levantó lentamente y me alzó en sus brazos.— Jeremy, lleva las mochilas. —recosté mi cabeza en el pecho de Newt y él comenzó a caminar.— Eres más liviana de lo que pensé.

—¿No me vas a preguntar qué me pasó? —cuestioné y él suspiró.

—Cuando lleguemos al Área. Me asustaste, creí que te habías muerto cuando te vi tirada en el suelo. Jeremy te tendría que haber traído, no debería haberte dejado sola en ese pasillo.

—Pero no me pasó nada, estoy bien. —intenté tranquilizarlo.

—Por suerte. Si no, me habría suicidado.

—Nunca hagas eso, Newt.

—Solo si mueres. —afirmó él seriamente.

—No lo harás de ninguna manera, ¿okey? —asintió.— Newt, puedo caminar, no estoy paralítica.

—Lo sé. Solo te quiero cargar. —rodé los ojos y él rió.

Cuando llegamos, me soltó lentamente hasta que mis pies tocaron el suelo.

—¿Puedes caminar? —intenté caminar y lo logré.

—Solo me dolía la cabeza, no pasa nada.

—Me vas a contar todo, con todos los detalles. —ordenó.— Jeremy ya me contó un poco. Y no era sólo un dolor de cabeza.

—Está bien. ¿Podemos ir al bosque? —pregunté y señalé dicho lugar.

—¡No! N-no. —tartamudeó y lo miré confundida.— Es que... T-tengo hambre. —Newt parecía nervioso.— Vamos al comedor, así tomas agua y comes algo. —asentí.

Fuimos al comedor y Sartén nos dio comida y agua.

—Bueno... cuéntame. —dejé la comida a un lado y jugué con mis manos. Si le digo va a pensar que estoy loca.— _____. No pasa nada. Si no me quieres contar, no importa.

—Estábamos tomando un descanso con Jeremy y vi un destello en un muro, así que me levanté a investigar. Me acerqué a la pared y corrí las lianas, vi una placa que tenía una inscripción que no recuerdo.

—Oh, sí. Las placas de metal. Están por todo el Laberinto. —dijo comiendo su sándwich.

—Sí, eso. Bueno, la miré y le pregunté a Jeremy qué era. Me dijo lo que acabas de decir y me empezó a doler la cabeza y veía todo borroso. —Newt asentía, analizando todas mis palabras.— Entonces comencé a escuchar voces dentro de mi cabeza. Me decían... —fruncí el ceño y tomé mi cabeza con las manos.— Shuck... No lo puedo recordar. No recuerdo lo que me decían. —finalicé mirándolo a los ojos.

(...)

Hola chicas!

Tenía ganas de publicar, son cortos pero bueno.

Gracias por los votos!

—Lahey.

«The Beginning» Newt y tú (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora