besos de chocolate e

Capitulo 22

el reloj marcaba las 7 de la tarde,y eme andaba buscando como loca su perfume favorito, es que sentía que sin su perfume no podrá ser una buena noche , era algo así como su amuleto de la suerte.

-evaaaaa!!!!! tu usaste mi perfume de frasco azul???- mientras seguía revisando en el sillón , entre los almohadones.
-Evaaaaaa!! Ayúdame a buscar mi perfume!
Grito casi desesperada eme.

- te fijaste en la heladera eme!? - pregunto Eva, mientras se preparaba para una noche de palomitas y películas en el sofá de su casa.
- y que esta haciendo el perfume en la heladera chaparrita? Hace cuanto esta en la heladera? Por que lo pusiste en la heladera!? Así frío no lo voy a poder usar o si?
- eme estas haciendo un lío por todo, respira mujer, te va a dar algo.
El perfume lo pusiste vos ayer, el por que ni idea. Así que termina de cambiarte qué yo me fijo si todavía sirve o no.
- gracias Eva. Estoy muy nerviosa, esto nunca me pasó. No estoy segura de nada y si mejor no voy?
- de eso nada. Vas a ir a ver a esos dos hombres. Y te vas a vestir con ese hermoso vestido que te regalaron junto con los tacones.
Vas a llegar como la diosa qué eres y los vas a intimidar.
No te olvides que ellos quieren que tu vayas no al revés.
Así vas llendo a la habitación ahora eme. No me hagas que te lleve de los pelos.
- siempre tan amable evangélina .... - y dicho esto salió corriendo para su habitación. Como ya se había duchado empezó a peinarse. Se iba a hacer un recogido bajo para un costado para que se luzca la espalda del vestido. Que era descubierta.
Y para el maquillaje quería algo tranquilo delineado de ojos máscara de pestañas y labial rojo, ese era su favorito.
Cuando terminó todo se puso aquel hermoso vestido y sus tacones.
Cuando se vio en el espejo, se dio cuenta que se veía maravillosa. Hacía rato que no se sentía así de bien con ella misma.
- fui fui - silvó Eva al ver a su tía.
-me veo bien no? Cual de los dos habrá elegido todo esto? Y con. O sabían mi talla? O mi número de calzado?
- estas empezando a ponerte paranoica, así que sal ya que hay un auto parado afuera preguntando por ti.
- como así? Estas segura que era para mi? No será para otra persona? - si eme quería esconder su nerviosismo, estaba fallando terriblemente.
- cuantas eme conoces en esta casa?
- si es verdad, pero ya voy? Ahora?
- nooooo, mejor en noviembre del año que viene. - dijo Eva a punto de perder la paciencia.
- sabes que mejor me voy, antes que sigas con tu sarcasmo, chaparrita.
Y así salió eme hasta el auto, donde estaba el mismo hombre que le fue a dejar las cajas al local.
- buenas noches eme, mi nombre es bastian. Y yo seré su chófer esta noche. - dijo serio y con una postura envidiable.
- mucho gusto bastian. Que amable eres.
Se subió a la parte trasera del auto y así se dirigía al restaurante donde ella, suponía, que estarían Caleb y Dorian.
El camino era bastante corto, unos 10 minutos en el auto, que eme intento tranquilizarse y respirar hondo para calmar el temblor de sus manos y sus piernas.
Se preguntó varias veces si estába haciendo lo correcto. Se sentía bastante aturdida de solo pensar en ellos dos, en que sentía? Era solo atracción, por ellos, por lo desconocido. Pero también sabía que si no se arriesgaba jamás saldría de esa duda y se quedaría con la intriga y ella pecaba de curiosa.
Con eso en mente llegaron al lugar. Ya no había marcha atrás, o si podría salir corriendo? , aunque con esos tacones tan altos, solo se torceria los tobillos.
- señorita eme, la ayudo a bajar? - bastian serio y amable.
- eee si si gracias bastian? Te puedo preguntar algo?
- ya lo esta haciendo señorita...
- ahh claro jaja. Estoy bien, digo me veo bien? No tengo lechuga entre los dientes? Aunque hoy no comí lechuga, pude no haberme lavado bien los dientes. Usted me entiende no? Dígame que me entendió por favor?!
- señorita eme, respire, todo esta bien, usted se ve magnífica, con elegancia y audaz al mismo tiempo.
Solo le puedo decir que ellos están más nerviosos qué usted señorita.
Vaya y disfrute de una rica cena y de la compañía que se pueden hacer mutuamente.
Disfrute la noche eme y déjelos con la boca abierta.
- gracias bastian - dijo eme un poco, solo un poco más tranquila.