Cuando cumplí los quince años, ya había conseguido mi primer trabajo, y finalmente a los dieciséis años tuve mi primer contrato de trabajo oficial como mesera en un restaurante de cuarta cercano a la casa. La pensión del abuelo a veces no era suficiente para tanto...
Pues, debo aclarar también que en casa había dos personas enfermas. Para darle un bajón desagradable a mi vida, a Mae además de adicta, también le habían diagnosticado esquizofrenia.
Quería morirme, juro que quería morirme.
Si tuviese que describir todas las situaciones difíciles que viví, pensaría en cortarme las venas mientras recuerdo cada ocasión donde Mae perdía la razón y explotaba al punto de ser agresiva, o peor aún, esas ocasiones en las que parecía desorientada, tan lejana como un horizonte inalcanzable, con la mirada perdida... la vi incontables veces tan ausente que su cuerpo parecía un recipiente vacío en el que no quedaba nada. Mientras, además, veía a veces al abuelo ser él mismo, pero, ¿cómo hablar de esos lapsos donde él perdía la memoria y no recordaba nada? ¿Cómo hablar de aquellos en lo que todo de lo que él sabía era sobre la abuela, fallecida hace tantos años?
Mae se me escapaba de las manos como agua caliente que la piel no soporta. No sé cómo le hacía... aun perdiendo los estribos, era lo suficientemente hábil para conseguir cocaína. La decisión más desesperada que tomé fue dar con quien se la proporcionaba para que de gesto amable, se detuviera y no la aceptara más. Claro que esta persona no iba a hacerme caso, así que salí con suerte solo diciendo que me fue muy mal, salí mal herida, golpeada y con la ropa rasgada. Era una pandilla y me advirtieron que tuvieron compasión porque era menor de edad, pero que no me involucrara más.
Cuando veía a Mae lucir tan mal, me preguntaba cómo algo que había sido tan hermoso pudo cambiar tanto, no luciendo como una flor marchita, sino más bien como una lechuga podrida.
Mae fue la primera persona en la vida en romperme el corazón.
Para mi desgracia, lo hizo tantas veces que me acostumbré un poco a tenerlo así.
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Sensaciones que parecen colores fluorescentes
ChickLitCon una dura condición, Maggie tiene la oportunidad de obtener una beca completa para estudiar en una universidad de élite para chicos en Manhattan. Tras la muerte de su madre, ella tiene que adentrarse a un mundo de retos y de nuevas experiencias p...