Yo iba creciendo y estoy segura de que Mae era la relación más tóxica que podré tener a lo largo de mi vida. La manera en la que ella jugaba con mis emociones no era sana. Me mantenía en un vaivén de sentimientos encontrados, donde ella decaía y era un desastre, pero luego se recuperaba y volvía a ser mi mamá.
Sin embargo, tras tantas desapariciones y apariciones, una vez Mae llegó a su límite y sin dejar rastro de vida, ella desapareció por casi dos años. Después de esa ocasión, nunca volví a llamarla mamá. A partir de ese momento ella fue solo Marilee Mae para mí. Una mujer que estaba en mi vida y amaba con dolor. Una carga pesada que, con ironía, me gustaba llevar, pero cómo dolía...
Cuando finalmente regresó de aquellos casi dos años, ella intentaba recuperarme, pero le costó demasiado.
Pues, si yo era lo único que le quedaba, o al menos, si yo era un poco importante en su vida, ¿no debía cuidarme como tal? Quisiera que lo hubiese hecho.
Entendía que con sólo decir amar no era suficiente, pero, ¿cómo podía yo fingir tan fácilmente creer en las mentiras de que ella cambiaría y que intentaría ser mejor sólo por tener la oportunidad de que ella lo intentara y así, tenerla a mi lado por lo menos un corto tiempo?
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Sensaciones que parecen colores fluorescentes
ChickLitCon una dura condición, Maggie tiene la oportunidad de obtener una beca completa para estudiar en una universidad de élite para chicos en Manhattan. Tras la muerte de su madre, ella tiene que adentrarse a un mundo de retos y de nuevas experiencias p...