《 Inmarcesible 》

Encontrando a un viejo Amigo

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-¡Directora Faragonda! -Llegan casi a su lado-. ¿Está bien?

-Chicas... y Princesa Kristal. -Devuelve su atención a la delegación-. Señores estás chicas son las Winx, de quienes les estaba comentando. -Se muestra bastante cautelosa-.

-Con qué las Winx. -Las ve detenidamente-. ¿No faltan tres de ellas? -Los demás comienzan a cuchichear con palabras desconocidas-. Señores guarden silencio, nuestra señorita podría incomodarse.

-Todo está bien caballeros. -Se asoma con Riven por detrás suya-. Pero en ves de incomodarme a mi, están incomodando a los demás. -Sonríe un poco como si se disculpara-.

-¡¡Malditos excrementos de mono!! -El viento paso con fuerza-. ¿¡Cómo se atreven a hacer que nuestra señorita se avergüence!? -Una estruendosa risa se escucha-.

-Riven. -Lo mirá un tanto fría-. Ten respeto por tus mayores.

Tks... Paro su risa con fastidio, de nuevo aquella chiquilla le había cortado la viada, pero a diferencia de hace años, ahora no le molesta tanto, se ha acostumbrado bastante bien y todo gracias a los consejos de Flora. Por la misma razón de que ella quiso ayudarlo sin juzgarle, ni nada a cambio es que ahora el quería ayudar a su amiga hada, y de paso preguntarle su opinión sobre otros temas.

-Joven Riven. -El grupo de hombres lo ven ceñudos-. ¿Qué le es tan divertido?

-Caballeros no es momento de pelear. -Se interpone entre ambos-. Estamos aquí por un asunto de gran importancia.

-La señorita Belinda tiene razón. -Se inca besando el dorso de su mano-. Somos la delegación de reconocimiento, debemos hacer honor a la Patria de Usuba.

-Madam, siento las molestias. -Se inclina un poco avergonzada por la situación reciente-. Mi gente es un poco sensible a estos asuntos, también pido disculpas a sus guerreras. -Hace una reverencia perfecta-.

-No es necesario hacer esto. -La ayuda a levantarse-.

-Pero para mi no es molestia, después de todo es como mi familia, Madame. -Le da una mirada inquisidora-.

-Directora Faragonda esto es... -Ve más de cerca a la chica-. ¿Es una estudiante nueva?

-Lamentablemente yo ya completé mis estudios hace mucho tiempo, pero por tradición de mi familia, visitó y adquiero conocimientos de otros mundos. -Abre unas cartas-. Y hoy estoy aquí para pedir una alianza temporal, ya que necesitamos un gran tramo del bosque y otros lugares desde los cuales se tenga mayor acceso. -Por el rabillo del ojo ve a su guardaespaldas shockeado-. Habrá muchos nuevos estudiantes que estarán con otro propósito por acá, pero eso no significa que no recibirán clases con varias de ustedes incluyéndome claro está. -Hace una pequeña llamita púrpura en su mano-. ¿Ahora estas más tranquila o más inquieta líder de las Winx?

-Belinda. -Agarra la mano de la chica-. Deja de hacer eso.

-Ouh, Riven. -Se cruza de brazos-. No seas tan amargado y ve donde tu amiga que yo puedo arreglarmelas acá. -Le da una especie de localizador-. Ambos asuntos son importantes, pero si te encargo esto es porque confío en ti.

-No hagas travesuras. -Le da un golpecito en la frente, burlándose por su queja silenciosa-. Regresaré en la tarde. -Se sube a su moto yéndose a gran velocidad-. Debí suponer que al menos uno intentaría seguirme. -Toma un atajó atravesando una casi imperceptible barrera-. Esto servirá.

Luego que le pareciera conveniente regreso al caminó siguiendo el localizador, encontrándose en el camino con tres grandes Endts caminando por la zona que al verlo solo lo dejan pasar después de algunos minutos, sintieron la magia de la marca por lo que no lo vieron como amenaza y llegando cerca de un gran árbol ve al hada que buscaba, recogiendo frutos del árbol con ayuda de su animal hada. Al percatarse de su presencia se incómoda en principio, pero cuando lo reconoce no puede evitar acercarse un poco efusiva, pero se detiene a unos 20 cm del chico. No estaba segura si estaría bien lo que estuviera por hacer, por el contrario Riven solo abrió los brazos como instandola a que lo abrazara lo más, y después de unos minutos Flora soltó algunas lágrimas mientras se dejaba consolar por el chico. Flora no dijo nada sólo dejó caer las lágrimas que había contenido desde hace rato y una ves calmada le sonrió como es habitual, pero para Riven sus ojos habían perdido algo de brilló.