Amor Primitivo: Daryl Dixon y tú

Amor Primitivo #27

Tú:¿Cuál es tú nombre?
X:No importa como me llame, sólo dime Talahassee.
Tú:¿ Talahassee?.
Talahassee:Mira, no debemos encariñarnos nena, por eso sólo dime así, estoy dirigiéndome hacia Talahassee, creo que podría conseguir mis golocinas allí, o no lo se, parece un buen lugar para permanecer, ya sabes... Con toda ésta mierda, el mundo es una porquería ahora.
Tú:Mmm, lo se, oye y porque no vienes con nosotros?. Allá tendrás tú propia casa, comida... Somos una gran oportunidad para ti.
Talahassee:Yo, no lo sé.
Llegamos a las afueras del pueblo. Talahassee estacionó su vehículo y seguidamente aparecieron Aaron y Daryl.
Talahassee se bajó y seguidamente me abrió la puerta dejándome ir con ellos.
Tú:Entonces... ¿Ya decidiste?.
Talahassee:Lo siento nena, Talahassee me espera...(dijo y seguidamente se subió a su Hummer).
Talahassee se marchó dejándonos solos.
Daryl me miró acercándose a mi para plantar un beso en la comisura de mis labios y luego dijo:
Daryl:¿Estás bien?.
Tú:Sí, y tú?.
Daryl:Estoy bien.
Aaron encendió el auto y nos dirigimos a la ruta que nos llevaría de nuevo a Alexandria.
Llevábamos aproximadamente media hora de viaje cuando Aaron pudo divisar un vehículo negro en el retrovisor. Este se adelantó rápidamente.
Inmediatamente se dibujó una sonrisa en mi rostro, era Talahassee de nuevo, y esta vez vendría con nosotros.
Daryl baja la ventanilla del auto y le dice:
Daryl:Parece que alguien cambió de opinión...
Talahassee:sólo por un tiempo... Luego me iré...
Daryl:Bien, síguenos entonces...(dice y seguidamente acelera).
Nuevamente nos encontrábamos en Alexandria. Reunimos a todos y les presentamos a Talahassee.
Talahassee indicó que se quedarían por un tiempo ya que planea continuar con su viaje.
Aaron le asignó una casa no muy lejos de la nuestra (Daryl y yo).
Entonces Talahassee se instaló en su nuevo hogar. Deanna me entregó las toallas y dos mantas de repuesto para el. Me dirigí a su casa y toqué a la puerta.
Talahassee:Oh eres tú de nuevo...
Tú:pues sí, mira te traje esto que me dio Deanna... Oye que linda casa tienes!.
Talahassee:Sí, a mi Tambien me gusta... Quieres pasar?
Tú:Oh bueno, sólo un momento...
Ingresé a su living, vaya que era bonito.
Talahassee:sabes? Me gustaría colocar este cuadro por a-(de pronto veo que _t.n_ se incorpora rápidamente y se dirige al baño con una mano en su boca, al parecer, conteniendo las nauseas).
Cuando tterminó de vomitar me dirigí a verla.
Talahassee:Oye... ¿estás bien?.
Tú:Yo...sí...sí, estoy bien...
Talahassee:segura?.
Tú:sí...sólo que me iré a casa...
Talahassee:Está bien.
***
ATENCIÓN, CONTENIDO NO APTO PARA MENORES.

Eran las 3:30 de la mañana cuando oí que la puerta de la habitación del cuarto se abrió. Era Daryl que regresaba de la casa de Talahassee, anteriormente me dijo que harían una pequeña reunión de hombres para celebrar la bienvenida de Talahassee.
Daryl se acostó y luego comenzó a abrazarme y besarme el cuello. Podía sentir su aliento, al parecer había estado bebiendo. Me voltee y lo miré:
Tú:Daryl estuviste bebiendo?...
Daryl:Sólo un poco...(dijo riéndose y luego se abalanza sobre mí besandome apasionadamente).
Daryl:Hoy te vi entrando en la casa de ese tipo... Que hacías ahí?.
Tú:Sólo fui a dejar unas cosas que me dio Deanna...
Daryl:Mmmm espero no me mientas. Tú eres sólo mía!.(dijo hagarrando mis muslos).
Ademas de embriagado, Daryl también se encontraba exitado.
Comenzó a bajar mis pantaloncillos de dormir y luego me quitó la blusa quedándome así en tan sólo mis pantaletas.
El inició primero unos besos en mis senos para luego subir hasta mi cuello. Se detuvo allí, pero luego desabrocho sus pantalones arrojandolos al suelo y después siguió con su camisa.
Se acerco de nuevo a mi pero está vez me sujetó por las caderas colocandose sobre mi. Finalmente deslizo sus dedos en mis pantaletas bajándolas lentamente.
Sin previo aviso sujeto mis muslos nuevamente besándome cuando me penetró. Se me escapó un grito acompañado de gemidos mientras desesperadamente me aferraba a su espalda tratando de contenerme ante su gran erección.
Mis gemidos lo exitaban aún más, lo que hacia que el continuara. Las embestidas eran cada vez más fuertes haciéndome gritar. El trataba de callarme entre sus besos densos pero no lo consiguió.
No tenía noción del tiempo pero Daryl comenzaba a agotarse y sus caderas ya casi no tenían fuerza ni sí quiera para poder moverse de mi. Lenta pero dolorosamente Daryl fue separándose de mí. Podía sentir a mis caderas y vagina aliviarse.
Daryl:Eres mía...( me dijo suavemente al oído y me besó colocando su mano en mi cintura).
Me había quedado sin aliento, pero eso no significó que el había terminado. Bajó su mano hasta la unión de mis piernas y metió sus dedos tocandome deliciosamente haciéndome retorcer del placer.
Continuó besando mis senos nuevamente, para luego volver a penetrarme.
Ambos quedamos exaustos. En fin.

Continuará...