Seré La Reina De Las Bestias. (Poli 1)

Especial Navidad: Felicidad en la adversidad (Parte 2)

Estos especiales están ambientado 5 meses después del capito 10, y todos los sucesos son parte de la historia. Sucesos importantes que si sería bueno recordarán 🤭

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Era laborioso, todo aquello. Desde que salía el sol hasta el anochecer, corriendo, descansando en los lugares más recónditos, desde árboles caídos hasta alguna cueva para pasar la noche. Si Will supiera que estoy haciendo esto, estaría con el corazón en la boca.

Ya han pasado trece días de los noventa y tres, aún que fuera agotador y más de una vez tuviera que evitar situaciones peligrosas, fue una maravillosa experiencia.

Niños que viven en situaciones primitivas, sonriendo tan alegremente como una flor en primavera. Su inocencia y felicidad tan pura, fue como el más dulce regaló. Aún que claro, esta no era la única recompensa, el sistema me estaba premiando con experiencia y habilidades, algunas minúsculas como el poder sentir cuando alguien necesita ayuda.

Cómo algunas bastante importantes, como una habilidad de autoregeneracion. Habilidades que evolucionaban lentamente al ser usadas. Pero ¿Que se podía esperar?

Ya era una bendición disfrazada el tener una habilidad para curarme sola, en un mundo tan primitivo como este dónde aún se desconoce hasta el uso de plantas para un simple dolor de cabeza.

Extrañamente el oso estaba rondando por mucho rato, entre los árboles. Parecía no saber hacia donde ir, ya era bastante tarde, conociendo la rutina que habíamos mantenido todas estas noches ya deberíamos estar rumbo a algún sitio para dormir ¿Será que no hay un sitio para dormir cerca?

—¿Que sucede Baltazar? ¿No hay un sitio donde dormir cerca?— Pregunto al oso, mientras acariciaba su cabeza peluda. El rugió bajo mientras daba dos saltos a dos direcciones contrarias. Cómo si estuviera en conflictos.

Baltazar quiere darte una misión especial
¿Aceptar?

Estaba dudosa, ¿Una misión especial? ¿Había niños por aquí? Baltazar fue el nombre que me puse al oso, pero jamás pensé que tuviera la posibilidad de dar misiones. Parece ser que hay cosas que aún no se del oso.

—Esta bien, voy a aceptar solo por qué me has ayudado todo este tiempo ¡eh!— le diría mientras acariciaba su cabeza peluda y se activaba la misión.

Los hombres bestias pueden ser algo hipócritas a veces, eso es algo que sabe bien ciertas especies, que por sus capacidades y aspectos distintos sufren del aislamiento colectivo por parte de otras bestias.

Los hombres murciélago son hombres solitarios y bastante introvertidos, tienden a convivir con los hombres serpiente como fieles aliados. Ambas especies son las más odiadas después de los alacranes y tritones.

Los niños de ambas especies rara vez conocen a otra especie, debido a la frialdad de sus crianzas carecen de la inocencia que un niño debería tener.

Lleva amor y alegría a estas desamparadas almas.

Vuélvete la luz en una cueva oscura y fría.

—¿Serpiente?— gime bajo, les tenía pavor, como a los gusanos, ugh... —Vale vamos a pasar la noche allí.— comenté al hacerlo, el oso comenzó a correr hacia la izquierda, su velocidad tal que los árboles parecían borrones. Tenía frío y las botas de piel estaban heladas, necesito una fogata y una cobija cálida. Ahora que lo pienso, debería de buscar criar ovejas y crear una esquiladora primitiva. Necesito lana.