Seré La Reina De Las Bestias. (Poli 1)

Capitulo 30

Hubo una vez una flor que soñaba con amor, esa flor sonaba con un amor exótico, nuevo, afrodisíaco, lleno de pasión y deseó, esa flor tenía espinas, para poder sostener su delicado tallo tenias que tener cuidado con las espinas...

Cuando aquel amor llegó, fue tan posesivo, tan opresivo, que cuando las espinas de las rosas lo cortaban... Arrancaba los pétalos de la misma como un castigo ...

El amor debe doler ¿No?

La voz se regó, como un fuego furioso, todos deseaban que sus cachorros obtuvieran las llamadas bendiciones del Dios Bestia, mientras las peticiones llegaban Sara estaba en problemas, y no en cualquier problema, estaba estancada en una situación de incertidumbre... Con sus propios deseos y sueños.

-¿Vas a quitar la restricción?- Fue la pregunta del patriarca de los osos, el señor Mathan quien funcionaba como un lider alterno.

-Se que... No fue la mejor decisión en aquel momento, reconozco que no pensé bien... Pensé que les hacía un favor, y parece que más bien los puse en peligro.- Comentaba con suavidad la única mujer entre todos aquellos músculos hombres, tal vez fuera por la belleza de sus propios compañeros, y la costumbre adquirida de ver semejantes bellezas.

Pero todos los hombres en aquella sala, llevaban sus pectorales a la vista, cuerpos definidos y maravillosamente elaborados, algunos con cicatrices tan aterradoras que con verlas, podrías imaginar épicas batallas.

-Mi misión... Es crear un sitio próspero, lo suficientemente fuerte y avanzado como para poder vivir cómodamente... Y poder tener a mis propios hijos. - Inicio la mujer humana mientras trataba saliva, a sus lados Mijaíl y Will estaban sentados, derechos y serios con su propia belleza y letalidad, casi se podrían ver sus garras y dientes listos para atacar a todo aquel que se atreviera a ha hacer algo contra su pareja. -La misión principal, es crear un pueblo estable, inculcar y educar, para fortalecer a todos nuestros habitantes para poder avanzar... -

-¿Como planeabas hacer aquello?-

-No se si lo sepan, pero mi mundo original, se rige por la monogamia, es decir, solo elegimos una pareja para toda la vida o... Eso intentamos.- El sonido de una silla, siendo arrastrado resonó en aquella silenciosa habitación. Los pasos suaves y delicados de la mujer atrajo la atención de todos aquellos presentes, pronto la dama comenzó a trazar diversos y extraños dibujos en la pared, usando un fruto rojo para pintar una capa especial en la pared.- Existimos dos géneros, Hombres y Mujeres, divididos en varias ciudades y pueblos, la cantidad de personas... Se volvió un problema, éramos muchos, en su mayoría, había una población igualitaria, tener más de una pareja era... Un delito moral... Tal vez, por mis propias costumbres pensé... Que si restringía la cantidad de parejas que un gerd podía tener, habría más control... Pero, olvide que a diferencia de nosotros, ustedes tienen una disparidad poblacional ochenta, veinte, por cada cien cachorros, ochentaa son machos y veinte son gerds.-

-¿Como hacían en tu mundo para elegir pareja señorita Sara?- La voz tímida de un joven fue fácil de reconocer, el líder de los hombres conejo.

-Dependia de la mujer, podría ser por tu belleza, tu fuerza o la capacidad de tu familia. Si venías de una familia fuerte y estable, pero sobre todo rica, eso te hacía atractivo. Pero, no se confundan. Solo te hacía atractivo para poder vivir con esa persona y esperar vivir cómodamente sin esfuerzo alguno, no implica que amarías a esa persona.- Una explicación paciente, dónde la mujer con gentileza acariciaba las cabezas de sus dos compañeros. Su trato hacia sus compañeros era tan gentil, tan envidiable, los trataba como joyas, y eso, hacia hervir la sangre de los presentes.