' 019 ¡!

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Hola mis queridos lectores! cómo están?

Voy a poner un pequeño warning aquí por escenas sexuales. Si no te gustan este tipo de cosas, por favor no dejar comentarios negativos porque me los voy a pasar por el culo igual ¡!

besos, continúen 💗

— vos me debes algo

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— vos me debes algo.

— pensé que te habías olvidado — se sentó, manteniendo al castaño en sus piernas.

— no me olvidaría de eso — se bajó de las piernas de ivan y se sacó el buso, quedando con su fina camisa rosa.

— sos tan jodidamente hermoso — se acercó a él, acorralandolo contra la pared. Puso las manos en la cintura del otro, aplicándole un poco de presión.

Rodrigo puso sus manos en las mejillas de ivan, atrayendolo para besarlo.

Unieron sus labios en un beso desesperado, ambos sintiendo una oleada de placer al estar en esa situación.

El alto alzó al petiso, agarrandolo de los muslos y envolviendo las piernas en su cintura.

Sus lenguas jugaban la una con la otra, explorando la cavidad bucal de cada uno. Rodrigo daba uno que otro gemido y jadeo ahogado.

En medio del beso sintió como ivan traba desesperado de sacarse la camisa. El otro le desprendió cada uno de los botones sin soltar sus labios.

Se separaron del beso por falta de aire. Iván regó besos por todo el cuello del castaño, dando algún que otro chupon.

— Dios, Iván — dijo rodrigo, gimiendo el nombre de su novio.

El azabache tiró al otro a las cama, no sin antes apagar la luz.

Rodrigo podía ver la cadena de Iván brillar en la oscuridad, sintiendo el ruido de como terminaba de sacarse la camisa.

No tardó no cinco segundos es sacarsela también a él.

Se puso de rodillas en la cama, teniendo un primer plano del ojiverde totalmente exitado, con el pecho al descubierto y jadeante.

— ¿Estás listo? — preguntó con una voz ronca y seductora.

— como nunca antes.

Sintió como el azabache se abalanzaba sobre él y empezaba a lamerle y chuparle los pezones.

Puso sus manos en la cabeza del otro, envolviendo sus piernas en su abdomen.

ivan le sacaba poco a poco el pantalón hasta quedar en bóxer, haciendolo con él mismo.

Pasó las manos por abajo de su ropa interior, apretandole su trasero como si exprimiera una naranja.

Rodrigo buscó hacer fricción entre los dos miembros, gimiendo como una perra en celo.

𝐌𝐄𝐃𝐈𝐀 𝐋𝐔𝐍𝐀 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora