Eran siete y media de la mañana, y los chicos seguían acostados charlando y riendo desde la noche anterior.
De sexo salvaje a hablar de la vida, que loco.
Estaban acostado, haciendo la famosa "cucharita". Ivan rodeaba la cintura de Rodrigo con sus grandes manos, acariciándola.
— ¿qué hora es? — preguntó el castaño dándose la vuelta para mirar a su novio.
— no lo sé, tal vez las siete — le dejó un beso en la frente.
— no me quiero levantar — hundió la cara en el pecho descubierto del otro.
— tampoco podrías — le dijo sarcástico.
— pendejo de mierda — lo miró enojado.
— pindiji di mirdi — le hizo la burla.
Rodrigo estalló en carcajadas, viendo somo el alto lo miraba enojado.
El petiso le dio un par de besos tiernos para que lo perdonara, siendo abrazado dulcemente por el otro.
— sos re lindo cuando te pones así de cariñoso — envolvió sus manos en el cabello del otro, uniendo más sus cuerpos.
— callate, haceme mimitos — eso despertó una tierna risa de rodrigo.
— te amo — dijo el ojiverde
— te amo más, pochi.
Desde el último suceso pasaron dos días, dos días en los cuales habían reído y pasándola como nunca antes.
Rodrigo e Ivan, buenoo.. ¡digamos que también la pasaron bien! Rodeados dee... ¿placer?
Bueno, lo importante es que no pasó nada malo y ya estaban de regreso para Buenos Aires.
Nuestros protagonistas estaban sentados en el último asiento del ómnibus, agarrados de las manos y escuchando música. El bajito reposaba su cabeza en el hombro del ajeno.
Uni y Tomás habían estado más distantes que nunca, rodrigo planeaba preguntarle a ger que había pasado. Se notaba triste, decaído y con los ojos cristalinos por las lágrimas que nacían y crecían en sus ojos.
Se sentía mal de verlo así, uni se merecía todo lo bueno del mundo. Era el ser más servicial, amable, leal y cariñoso del mundo. El ojiverde lo amaba con todo lo que tenía, eran almas gemelas en amistad.
Sacó su celular para textearle a su amigo.
Rodrigo no podía evitar sentirse mal por su amigo. Lo miró de reojo y vio como se ponía los auriculares y miraba a la ventana.
Sabía que sus palabras no lo habían ayudado en nada y eso le dolía más que cualquier cosa.
— ¿todo bien, amor? — ivan llamó su atención.
— ¿Ah? Sí, todo bien — le dio una media sonrisa.
— ¿seguro?
— sip — asintió sonriente.
— no te creo, te ves como si hubiera muerto tu mamá — le acarició la mejilla.
— buena forma de descripción, pero no le pasó nada a mi mamá. Uni la está pasando mal, por eso estoy así — posó su mano sobre la del ajeno.
— ¿qué le pasó?, ¿queres contarme?
— Cuando lleguemos te cuento, acá lo escucharía todo el mundo. ¿Vamos a tomar un helado y te lo cuento? — le dejó un beso en la comisura de los labios.
— Dale — le sonrió y le devolvió el beso.
Que hacen pebetes, todo bien?
Bueno, este cap es cortito porque tenía que cerrar el tema de la playa y todo eso. Para el próximo capítulo váyanse sentando porque se van a caer de ogt
Al final si le hablé a la chica, ahora somos amigos. También siéntense cuando ella actualice porque se viene FUERTEEE.
Ella es re piola, ya le tomé cariño
si termina mal "te amo bonito" no es culpa mía, yo le dije
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𝐌𝐄𝐃𝐈𝐀 𝐋𝐔𝐍𝐀
Fanfiction❝ 𝖫𝖺 𝖼𝖺𝗇𝖼𝗂𝗈́𝗇 "𝐦𝐞𝐝𝐢𝐚 𝐥𝐮𝐧𝐚" 𝖽𝖾𝗅 𝖺𝗋𝗍𝗂𝗌𝗍𝖺 𝖬𝗈𝗋𝖺, 𝖾𝗌 𝗎𝗇𝖺 𝖾𝗑𝗉𝗋𝖾𝗌𝗂𝗈́𝗇 𝗅𝗂́𝗍𝗂𝖼𝖺 𝖽𝖾𝗅 𝖺𝗆𝗈𝗋 𝗒 𝗅𝖺 𝖼𝗈𝗇𝖾𝗑𝗂𝗈́𝗇 𝗉𝗋𝗈𝖿𝗎𝗇𝖽𝖺 𝖾𝗇𝗍𝗋𝖾 𝖽𝗈𝗌 𝗉𝖾𝗋𝗌𝗈𝗇𝖺𝗌. 𝖫𝖺 𝗆𝖾𝗍𝖺́𝖿𝗈𝗋𝖺 𝖽𝖾 𝗅...