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El padre de Elysia, llego junto a Thor y Heimdall, preguntando por su hija.

El padre de Elysia: ¿Dónde está mi hija? ¿A dónde se fue?

Thor: Se fue con... Hela.

El padre de Elysia, incrédulo, miró a Thor y Heimdall con sorpresa y preocupación.

Padre de Elysia: ¿Hela está viva? ¿Y mi hija se fue con ella?

Thor: Sí, así es. Parece que Hela ha regresado, y Elysia ha decidido acompañarla.

Padre de Elysia: (Preocupado) Pero... ¿por qué irse con Hela? Pensaba que ella había muerto.

Heimdall: Las cosas han cambiado. Parece que Hela y Elysia comparten un nuevo destino.

Thor: (Reflexivo) No sabemos exactamente a dónde van, pero algo me dice que esta historia aún no ha llegado a su fin.

Mientras tanto, en algún rincón del cosmos, Hela y Elysia continuaban su viaje hacia lo desconocido, dejando atrás el pasado y abrazando un futuro incierto.

Elysia, asombrada por el bullicio y la arquitectura de New York, miraba a su alrededor con ojos llenos de curiosidad y emoción.

Elysia: (Maravillada) ¡Esto es increíble! Nunca imaginé que hubiera un lugar así.

Hela: (Sonríe) Es un rincón peculiar de tu nuevo hogar. Hay mucho por descubrir.

Elysia: (Curiosa) ¿Qué vamos a hacer aquí?

Hela: (Misteriosa) Hay un mundo entero esperándonos. Vamos a explorarlo juntas.

Ambas caminaron por las concurridas calles de la ciudad, sumergiéndose en la vibrante energía de New York. Un nuevo capítulo comenzaba para ellas en este desconocido rincón de la Tierra.

Hela, con su característico toque de humor oscuro, hizo un comentario sobre la vestimenta de Elysia.

Hela: (Con una sonrisa) Creo que sería prudente que cambies esa indumentaria. Aquí en la Tierra, podrían pensar que acabas de llegar de Asgard, y ya sabes cómo son, se burlarían de ti. No quiero tener que asesinar a nadie por eso hoy.

Elysia, sorprendida por el inusual sentido del humor de Hela, soltó una risa genuina. Hacía mucho tiempo que no disfrutaba de un momento así, y la presencia de Hela le devolvía algo de la ligereza que había perdido.

Elysia: (Riéndose) Supongo que tienes razón. No quiero que despliegues tus habilidades mortales por mi atuendo.

Hela: (Bromeando) Eso suena como una buena elección. Además, siempre puedes desatar mi furia otro día si te apetece.

Elysia: (Riendo) Gracias por la oferta, pero creo que lo dejaré para más adelante.

Continuaron su camino hacia una nueva experiencia en la ciudad, dejando atrás las sombras del pasado y abrazando la luz de un presente lleno de posibilidades.

Mientras caminaban por las animadas calles de Nueva York, Elysia no pudo evitar sentir curiosidad acerca de la experiencia de Hela en la Tierra.

Elysia: (Curiosa) Hela, cuéntame, ¿qué hiciste mientras estuviste sola aquí?

Hela, con su mirada perdida en los recuerdos, comenzó a relatar parte de su experiencia.

Hela: (Reflexiva) Bueno, paseé por estas calles, probé la comida de los mortales, y sí, incluso me aventuré a visitar algunos lugares de entretenimiento. No estuve tan sola como podrías pensar.

Elysia, intrigada por ese comentario, miró a Hela con curiosidad.

Elysia: (Sonriendo) ¿No estuviste tan sola? ¿Acaso hiciste amigos aquí?

HelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora