"𝑇𝑜𝑑𝑜 𝒆𝒔 𝒑𝒐𝒓 𝒂𝒎𝒐𝒓, 𝑛𝑜 𝑠𝑒𝑎𝑠 𝑡𝑎𝑛 𝑚𝑎𝑟𝑖𝑐𝑜́𝑛, 𝑇𝑜𝑝𝑜"
Me estaba aguantando las ganas de escribir una historia de este tipo. Y ahora la hice.
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Ni siquiera me gusta el ship, lo eligió al azar una amiga.
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Amo escribir a Robe...
Roberto y Topo habían ido a ensayar con el resto de la banda. Lo normal, lo hacían dos veces cada dos semanas, recurrentemente. A veces lo hacían más veces.
Cuando ya habían terminado el ensayo y ahora solo hablaban de cosas al azar, empezaron a hablar de sus relaciones.
— ¿Ustedes dos cómo están? Digo, son los únicos homosexuales de la banda —dijo Tavella.
—Y Marre es el único que sigue vírgen y no le decís nada... —dijo Roberto por lo bajo con un tono algo “ofendido”.
— ¡Ey! No es para que lo digas en voz alta —exclamó Marre mientras Alvin se reía de él —. ¡No se rían!
—No era para que te enojaras, Vladimir... —dijo Tavella.
—No estoy enojado.
—Parece que sí lo estás —opinó Topo por lo bajo y miró a Roberto.
— ¡Cállate! Que vos cuando te enojas parecés un recién nacido llorando.
El resto se rió, Topo también. Aunque internamente se sentía algo humillado, avergonzado.
—Con todo respeto, Topo —dijo Alvin.
— ¿Opinas lo mismo?.. —preguntó Topo.
—En realidad no, bueno. Sí... Perdón —Alvin dijo lo último algo apenado y se echó para atrás en su silla.
—Tranquilo, está bien.
Roberto le dió una palmada en la espalda a Topo.
—Si te vas a enojar solo no grites mucho, Miguel —bromeó Roberto.
—Ja... Ja, bueno. Vos también te ves mal cuando te enojas... Todos lo hacemos —dijo Topo y se rió algo incómodo.
—Siempre me hacés quedar mal —opinó Roberto con un tono exagerado.
—Mal ahí, Topito —dijo Tavella entre risas y le dió una palmada en la espalda a Topo —, aunque si somos realistas, él que haría eso sería Rober.
— ¿¡Qué!? —exclamó Roberto y miró enojado a Tavella —, ¡Ustedes dicen eso porque no conocen a Topo!
—Roberto, me estás dejando como un pelotudo...
—No, te estoy dando a conocer —dijo Roberto y volvió a rodar los ojos.
El resto se rió un poco de la pequeña discusión.
Topo se sintió algo mal por el resto de la tarde, sentía que Roberto lo había dejado como un cretino frente a los ojos; como si lo quisiera ridiculizar.
Pero, Roberto no haría eso. Obviamente sí lo haría, solo y como siempre. No quería aceptarlo, el amor lo cegaba, como a muchas personas.
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No voy a decir nada, solo que otro capítulo el mismo día (🥳).
