Parte 1

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En serio vas a seguir en esa actitud Rebecca-Exclamó freen cansada de la actitud de su esposa-Puedes mirarme por lo menos y no sentir que hablo con pared ...

No tengo nada que hablar contigo Sarocha, baja la voz de que Sam está dormida y me acostó mucho para lograrlo - Dijo una malhumorada Becky al ver la actitud de la mujer que había amado por tanto tiempo y ahora estaba a punto de marcharse de la casa que por muchos años fue su hogar.

Sinceramente que contigo no se puede Beck, aún hasta el último momento pones las cosas demasiado difíciles y ya yo no sé que hago aquí  los ojos de freen se ponían llorosos al darse cuenta de cómo todo había acabo por un tonto error suyo, estaba perdiendo todo lo que con mucho años le había costado tener. Estaba perdiendo a las dos mujeres que más amaba en la vida.

Por favor Sarocha, cierra al salir, dijo becky dirigiéndose a la cocina, tratando de disimular las lágrimas que brotaban por su rostro al ver que la madre de su hija, el amor de su vida y su compañera de aventura, se marchaba de aquel lugar que llamaban hogar.

Freen se dirigía a la puerta dispuesta a renunciar a lo más preciado en su vida cuando dió la última mirada hacia atrás vio como Rebecca caía derrumbada en la cocina.

-Beccaaaaaaa

Fueron los gritos que dió al ver a su mujer en el piso inconsciente. Cómo pudo la llevo al hospital y ahí recibió la noticia que cambiaría todo su mundo, cambiaría el sentido de toda la relación.

-Familiares de la señora Rebecca Amstrong, llamo el doctor en la sala de espera.

-Yo, yo soy su esposa, exclamó una freen desesperada al querer saber cómo se encontraba el amor de su vida. Doctor dígame qué está bien, dígame qué se encuentra bien

- Tranquila, sonrió el doctor al ver la angustia de la mujer, está más que bien. Felicidades, señora su esposa está embarazada.

-está que, em, embarazada Becca está embarazada seré mamá de nuevo.

-Si señorita, cuando guste puede pasar a verla a su habitación. De nuevo felicidades, fue lo último que dijo el doctor antes de irse del lugar.

La noticia para la pelinegra fue como un balde de agua fría, no porque tendría un hijo más , era la mejor noticia que había tenido en mucho tiempo, pero se cuestionaba todo lo que había pasado últimamente y becky en su estado había tenido que soportar.

¿será que ella ya sabría o también se venía enterar ahora?

Era las preguntas que venían a la cabeza de freen, que cada vez que recordaba y analizaba la situación se sentía cada vez más culpable. ¿Que clase de persona he sido?  ¡¡Soy un asco de esposa!!, fueron las palabras que salieron de su boca mientras por su rostro caían lágrimas.

Sentada en las sillas del hospital, con la cabeza baja sostenida por su manos era la posición que mantuvo por más de media hora, hasta que esa voz que conocía a la perfección la hizo reaccionar y levantarse del lugar.

-Mamiiiiiiii, mamiiiii gritaba la pequeña Sam de 6 años corriendo hacia la pelinegra.

-peluchito, se sentó sobre sus rodilla para estar a la altura de su hija y poder tomarla en sus brazos, dandole vuelta y llevándole de besos, fue el recibimiento que freen le dió a su pequeña hija.

- ¿Dónde está mamá ? Pregunto la niña aún abrazada a su mami.

-Tu mamá está en la habitación, quieres ir a verla, le respondió freen a su hija, mientras le alzaba sus cejas en forma de gracia para su pequeña niña.

Y es que a pesar de que los últimos meses freen y becky estaban separando, frente a su hija nunca mostraron algún signo de disputa, se prometieron que jamás su hija las vería discutir, ni harían que las decisiones de ellas, fueran motivo de dolor para la pequeña.

Caminando hacia la habitación donde se encontraba la castaña, Richi, hermano mayor de esta, llamo a su cuñada haciéndola frenar.

-Freen, antes de entrar quisiera hablar contigo, exclamó el hombre 27 años.

- Ahora no rich, te lo pido ahora no. Exclamó siguiendo su camino con la niña en sus brazos.

Sabía que tenía que explicar muchas cosas pero ahora no. Solo quería saber cómo estaba su mujer y su nuevo bebé, no le importaba que el mundo se callera, mientras que sus personas favoritas estuvieran bien.

Freen acomodo a su hija en el sofá que estaba frente a la cama donde dormida la mujer de su vida, la persona que más había amado en la vida y salió de la habitación pasando por el lado de su cuñado el cual solo en un cruce de mirada le indico que cuidara de ellas mientras ella volvía.

Camino hacia el baño más cercano del hospital, lavo su rostro y se miró su reflejo en el espejo.

-Que has hecho, quien eres tú?, no podía reconocer a la mujer en el espejo, no podía encontrar explicación a sus acciones, no sabía que había pasado en su vida para tomar decisiones tan absurdas. Definitivamente no sabía quién era, eso pensaba, hasta que dió un suspiro y volvió su mirada al reflejo y exclamó.

-Yo soy freen Sarocha. Y está es mi historia.

¿TE PUEDES QUEDAR?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora