Historias de Terror contadas a Medianoche - [FluffyNight]

9. Revuelo

Desde su infancia había tenido que aprender a sanar algunas heridas, pequeñas, agua oxigenada y con algo de algodón curaba las heridas de su hermano, todo por andar corriendo de un lado a otro sin cuidado alguno.

—Deberías de tener más cuidado Dream— termino por colocar una vendita en la rodilla de su hermano.

—¡Lo siento! Pero es que debía de ayudarle...— se hizo a un lado mostrandole a Nightmare un pequeño conejo que tenía una patita lastimada.

—Corriste sin cuidado, ¿Por un conejo?

—¡Esta herido Night!

—Así es la naturaleza Dream, acéptalo tarde o temprano todos vamos a morir.

—Pero que dices...— El de cabello rubio, casi cenizo le miro anonadado, agacho la mirada y siguió hablando —Tienes razón todos vamos a morir, pero aquí y ahora, todavía podemos hacer algo por él Night, y mientras todavía respiré tiene otra oportunidad— tomo al pequeño animal entre sus brazos —Lo voy a ayudar Nightmare, y si no quieres ayudarme esta bien.

Nightmare se contrajo un poco y suspiró —No dije que no iba a ayudarte... Ven vamos.

Su infancia fue así, la recordaba con molestia a decir verdad no podía borrar sus recuerdos, más no los recordaba con cariño, todavía le tenía rencor a Dream por todo lo que había pasado.

Pero en esta situación no podía evitar pensar en ese día, era lógico que todos murieran en un momento, pero sentir como el cuerpo de Ccino caía al suelo de manera tan abrupta y sentir como su respiración comenzaba a ser más lenta... Sintió temor por un momento este solo aumento cuando al moverle no respondía, no hablaba estaba casi inerte en el lugar su débil respiración era lo único que confirmaba que seguía vivo, a este punto Ccino parecía un cadáver.

—Mierda... Agh...— Nightmare no permitió que el pánico se apoderará de él, no era momento para eso, así que tomo a Ccino en brazos cargandolo ahí notó lo poco que pesaba Ccino, debía de llevar a Ccino a un lugar cómodo; se dirigió a su habitación y le recostó en su cama. Después de ello meditó la situación, Ccino no tenía fiebre pero parecía faltarle la respiración de alguna manera. No entendía nada, por que le faltaba el aliento y estaba tan pálido, ¿Debía llamar a emergencias? Vivían en medio de la nada tardarían mínimo unas dos o tres horas en llegar.

Ccino siempre llevaba ese sueter, se veía cómodo pero no tan cálido, la mayoría de veces era para tapar los golpes inflingidos por su padre, «¿Acaso ese idiota se habrá pasado esta vez?». Para él ver los golpes de Ccino era molestó, demasiado, era un recuerdo de que no podía hacer mucho por lo cerrado que era Ccino.

Nightmare le dió un vistazo a Ccino no parecía mejorar, bien, iba a revisar nada más. Tomó el dobladillo del sueter de Ccino y apenas lo elevó un poco se extrañó... ¿Una faja? Él ya era delgado, ¿Para que utilizar eso...? Nightmare pensó y luego se regaño a si mismo mentalmente mientras comenzaba a buscar una manera de quitarla lo cual no tardó mucho cuando lo logró su estupor fue inevitable, Ccino... Ah... Dirigió su mirada a otro lugar por un momento, después notó como Ccino literalmente volvía a respirar; comenzó a quitarle aquella faja que estaba enrollada en su pecho, de vez en cuando desviaba la mirada no por vergüenza más por... Respetó.

«Bien al parecer es hora de cambiar a mi... ¿Novia?» Nightmare volvió a mirar a Ccino y después tomó su propio rostro mientras soltaba un suspiro, ahora más cosas tenían sentido, sus pequeñas huidas, el porque no quería que le tocará de manera distinta... Ccino de verdad era una caja de sorpresas. Le volvió a ver, si bien antes le parecía guapo, ahora era hermosa a su mirar... Pero eso no significaba que le debía una explicación, su mirada volvió a las pequeñas cicatrices que se estaban formando en la cintura de ella «¿Desde cuando lo comenzó a hacer?» pensó mientras su dedos se posaban en las cicatrices.