Should we fall in love?

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Louis acababa de despertar de una pequeña siesta que no fue consciente de haber tomado.
Harry parece dormido al lado suyo todavía, así que se levanta despacio alejándose de su toque con gentileza.

Louis camina hacia la sala y puede escuchar murmuros de la pequeña Isa.

Se acerca hasta ella y puede observarla sentada en la alfombra con dos ecografías sobre la mesita de centro y ella moviendo su cabecita despacio de una foto a otra.

- ¿Qué haces, Isa?

Isa levanta la vista con prisa y sus ojos parpadean al ver a su papá.

- Estaba siendo cuidadosa. No las estoy tocando.

Louis sonríe con cariño y se sienta al lado de Isa.

- Está bien, querubín. ¿Qué haces aquí?

Isa encoge sus hombros, siente las manos de su padre sobre sus hombros.

- Estaba viendo estas. Esta es mía y esta del otro bebé. Quería ver si podía saber si iba ser hermanito o hermanita.

Louis no puede evitar su pulso acelerarse por la emoción de su hija, no puede evitar su felicidad al saber que Isa está tan emocionada como ellos por la llegada de esta nueva vida.

- ¿Y encontraste algo?

Isa niega.

- No, pa. Solo... no entiendo mucho.

Louis ríe un poco. Acerca el cuerpo de Isa y la abraza unos segundos.

- Tampoco yo, si te soy sincero. Pero, sé que está sano, y que nos escucha. Todo va en orden y tal vez la próxima ecografía finalmente nos deje saber si es niño o niña.

- Papá.

- ¿Sí, mi amor?

- ¿Puedo contarte un secreto?

Louis se levanta para sentarse sobre el sofá, sienta a Isa en sus piernas y asiente.

- Claro, mi querubín, lo que sea.

Isa asiente sus pequeñas manos juegan con los cordones de la sudadera de su padre.

- Bueno... el otro día alguien me dijo que... cuando sus papás tuvieron otro bebé, ya no lo querían más.

- ¿Qué? -el ceño de Louis se frunció un poco. Isa finalmente lo miro directamente a los ojos y asintió- no entiendo, amor. ¿Ya no lo querían más, al bebé?

Isa niega.

- Cuando tuvieron otro bebé, entonces a ella, ya no la querían. Hasta que su mamá se fue a otra casa y el bebé se fue con ella. Entonces su papá la quería otra vez.

Louis parpadea sorprendido, pero niega rápidamente para no dejar que las dudas llenen la cabeza de Isa.

- No mi amor. Eso no va pasar, ¿tienes miedo de que eso pase? Eso no va pasar, princesa. Tu mamá y yo te amamos y te vamos a amar siempre, nada puede cambiar eso.

- ¿Y mamá no se va cambiar de casa?

Louis niega, limpia las pequeñas lágrimas en los ojitos cristalinos de la pequeña.

- No, mi amor. Nada de eso va pasar. Tranquila. Nosotros nos amamos, los tres nos amamos, ¿verdad? -Isa asiente- y vamos a amar a ese bebé, y nos va amar también. Eso no cambia nada en cómo te amamos a ti. Nuestros corazones son muy grandes, mi amor, y el amor es infinito.

- ¿No me van a dejar de querer? ¿O a mi hermanito?

Louis niega y abraza más fuerte a su hija.

- No, mi amor. ¿Quien te dijo todas esas cosas?