El espadachín ciego

Captura, planificación y seguimiento

_________ Narración POV _________

"Hah... HAh... ¿Qué diablos...?"

Black Zetsu sintió que el cuerpo del White Zetsu que poseía se cansaba, algo que era completamente alucinante.

En ese momento, había estado torturando al Monstruo Ciego durante aproximadamente 2 horas. Y, durante ese tiempo Ken no había emitido ningún sonido de dolor, ni siquiera el más mínimo silbido.

Ken realmente sólo hacía algún sonido cuando comentaba sobre las habilidades del torturador y, a veces, incluso le daba consejos al azar.

Fue realmente exasperante para Black Zetsu tener que escuchar todo eso. Era cierto que no era un torturador de profesión, claro. Estaba demasiado ocupado siendo la conciencia tramadora de un fantasma del pasado...

Pero el Torturador todavía sabía que se suponía que lo que estaba haciendo era infligir dolor al Monstruo Ciego. Demonios, el objetivo era matarlo en primer lugar, pero nada funcionaba.

¿Apuñalado en el corazón? Se volvería a cerrar tan pronto como retirara la varilla.

Y tampoco era que apuñalar a Ken en el corazón fuera un asunto fácil, ya que requirió un esfuerzo genuino para que el cuerpo del Zetsu Blanco perforara las escamas del monstruo.

La única tranquilidad real de Black Zetsu era el hecho de que no muchos de los sellos se habían roto desde el principio, algunos parecían funcionar mal, pero los principales que mantenían al Monstruo Ciego en su lugar estaban activos y funcionando según lo previsto.

'En serio, ese hombre, ¿era Saburo? Ser capaz de crear algo para retener a alguien de la fuerza de Ken en tan poco tiempo... Vale la pena vigilarlo en el futuro.'

Black Zetsu continuó apuñalando el cuerpo de Ken, perforándolo cada vez más.

Había intentado atacar la cabeza y perforar el cerebro también, pero parecía ser mucho más difícil de hacer.

Después de destruir la máscara, Black Zetsu descubrió por las malas que Ken no tenía agujeros en el cráneo que condujeran directamente al cerebro. Sus fosas nasales eran demasiado delgadas para que él también pudiera perforarlas.

También estaba el hecho de que el cerebro no parecía ser diferente del corazón y sanaba con la misma rapidez cuando se lesionaba.

Eso, junto con el hecho de que el cráneo de Ken parecía ser mucho más grueso que el de un humano normal, llevó a Black Zetsu a simplemente renunciar a perforar el cerebro del Monstruo Ciego después de un tiempo y concentrarse en otros signos vitales.

"Pareces estar bastante frustrado... ¿Quizás te estás quedando sin ideas?" La voz de Ken resonó en esa gran cámara.

Su tono inquietantemente tranquilo era preocupante, pero, de nuevo, no había cambiado mucho durante toda la terrible experiencia, por lo que Black Zetsu ya se había acostumbrado.

"Tsk, no actúes como si hubieras logrado romper algún sello en el tiempo que he estado desperdiciando...

El Plan B pronto estará en camino, y si eso también falla, entonces ese tonto, Onoki, debería ser capaz de hacer el trabajo mientras estés incapacitado..."

Black Zetsu negó con la cabeza antes de darse la vuelta lentamente y mirar su mesa de herramientas. Ken tenía razón: de hecho, poco a poco se estaban quedando sin ideas.

Claro, apuñalarlo en el corazón hasta que muriera era una idea, pero ¿cuánto tiempo iba a tomar? ¿Black Zetsu tuvo tiempo para eso?

No, no, no lo hizo.