Parte 28

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𝓡𝓮𝓬𝓱𝓪𝔃𝓸 𝓷𝓾𝓮𝓿𝓪𝓶𝓮𝓷𝓽𝓮

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𝓡𝓮𝓬𝓱𝓪𝔃𝓸 𝓷𝓾𝓮𝓿𝓪𝓶𝓮𝓷𝓽𝓮.

La alarma de Ha-na sonó, despertando a los tres jóvenes de un susto.

Ha-na se apresuró a apagarla, Seojun soltó un quejido y Suho comenzó a abrir los ojos.

- Lo siento...- susurró en voz baja.

- Buenos días, mi amor.- saludó Suho con tranquilidad, tallándose los ojos.

- Buenos días.- saludó de vuelta, acercándose para darle un beso en la frente.

- No sean tan cursis frente a mi, es raro.- se quejó Seojun, girándose para acostarse boca abajo.

Los chicos rodaron los ojos. - ¿Cómo te sientes?- preguntó Ha-na, destapando un contenedor de pastillas.

- Mucho mejor si estás conmigo.- respondió, Seojun soltó un quejido harto, nuevamente.
Ha-na rió un poco y sacó una pastilla.
Se acercó a su novio y le colocó la pastilla y un vaso frente a él.

- Ya deberías irte.- comentó Suho, después de tragar su pastilla.

- No puedo dejarlos aquí.- dijo, dirigiéndose a la cama de Seojun.

- "¿Dejarnos?"- remarcó, enarcando una ceja.

- Vamos, toma tu pastilla.- ordenó Ha-na a Seojun, moviéndolo para que se levantara, el chico obedeció con pesar.

- No seas envidioso, Suho.- dijo, respondiendo a la pregunta que había formulado el peli negro.

Suho rodó los ojos y la chica regresó frente a Suho.

- Estaremos bien, debes ir a la escuela, pero, debes venir después de salir, no creo aguantar tanto sin ti.-
Condicionó, haciendo un puchero por lo último.

Ha-na sonrió, acercándose a él.
- Volveré más tarde, entonces.- se inclinó para darle un pequeño beso.

- Nos vemos Seojun.- se despidió, tomando sus cosas.

- Adios, "nana"- rió burlón, imitando a Suho, Ha-na rió también pero a Suho no le agradó mucho la broma.

La chica caminaba hacia la salida, mientras cruzaba la puerta, se encontró con aquel hombre que no dudó ni un instante en mirarla con desaprobación, pero la chica pasó de largo, sin tomarle importancia.

- ¿Por qué estás aquí tan temprano?- preguntó en voz alta, deteniendo a la chica. - No dormiste aquí, ¿cierto?- frunció el ceño.

Ha-na se giró para verlo y sacó las manos de los bolsillos. - Asegúrese de que Suho tome su pastilla a las doce.- se limitó a decir, para darse la vuelta y dar un paso.

- No me agrada que seas tan cercano a mi hijo.- la chica se detuvo nuevamente y no pudo evitar apretar los dientes.

- Señor Lee.- se giró, dando pequeños pasos para acercarse, el hombre levantó la cabeza para mostrarle autoridad. - Con todo respeto, solo por qué es el padre de mi novio. No me interesa agradarle a usted, ni a nadie, Suho es feliz conmigo y yo con él.- contorsiono la boca hacia abajo y levantó los hombros. - ¿Cuál es el problema?-

Style- Lee Su-hoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora