Tulips

05

Chapter Five

La puerta de la enfermería se abrió de forma abrupta sobresaltando a las tres que se encontraban dentro. Se trataban de la enfermera que se encontraba sentada en su escritorio cerca de la entrada, de Chifuyu y de Takemichi que permanecían acostadas en una camilla cada una. De Mikey no había ni rastro, pero Baji no le prestó atención a ese detalle en ese momento

── ¡Baji-san! ──la rubia ojiverde lo saludó con una sonrisa que le pareció encantadora a Keisuke ── ¿Qué haces aquí?

Baji la miró algo indignado. Se había pasado toda la mañana preocupado, casi no prestó atención a clases y va ella a decirle ‘‘¿Qué haces aquí?’’

── ¿Cómo que qué hago aquí? ──entró cerrando la puerta tras sí ──. Estoy preocupado por ti, Gatita ──se acercó a su camilla que quedaba junto a la de la otra rubia ──. Cuando te vi toda manchada de sangre yo... ──se rascó la nuca algo nervioso para luego suspirar y acercarla, ahora la frente de la rubia chocaba contra la del pelinegro mientras este sostenía su cabeza colocando su mano en su nuca para que la chica no se escapara ──, joder... solo tengo ganas de partirle su madre a ese hijo de pu...

── ¡Joven! ──dijo alarmada la enfermera ──. Modere su lenguaje

Keisuke se disculpó torpemente. Normalmente no respondería así ni en sueños, pero estaba delante de su Chifuyu, y aunque la chica lo aceptaba tal y como era, se decía que ser cortés y educado de vez en cuando en su presencia haría que la chica siguiera teniendo interés en él, después de todo a las chicas les gustaban ese tipo de chicos y más a una chica como Chifuyu

──Te agradezco la preocupación Baji-san ──Chifuyu se mordió un poco el labio inferior, lo que menos quería era que su chico se metiera en problemas por su culpa ──, pero lo hice para defender a Mitchy de ese abusón de Kiyomasa y sus perritos falderos ──arqueó una ceja

Cuando la rubia de ojos verdes mencionó a la otra chica Baji se acordó de su existencia. Volteó a ver a la rubia de ojos azules que parecía muy concentrada en su teléfono

──Takemichi ──la rubia se sobresaltó por escuchar su nombre de repente, estaba tan concentrada ──, disculpa por no preguntarlo antes ¿Estás bien?

──Claro Baji-kun ──la ojiazul le mostró una radiante sonrisa ──. Realmente lo mío no fue tan importante, solo me había desmayado pero a la media hora desperté. Chifuyu fue la que peor la pasó, estaba toda golpeada y tenía una venda en la cabeza. Hiciste bien en preocuparte más por ella ──le dedicó otra sonrisa, pero esta era una pícara, sonrisa que hizo sonrojar a la pobre Chifuyu porque entendió a la perfección porque su amiga lo había hecho

Justo cuando mencionó lo de que había despertado primero Baji recordó a Mikey, conociéndolo, sabía que aunque Chifuyu no hubiera despertado al menos había avisado de que Takemichi si lo había hecho

──Takemichi ──dudó un momento, pero estaba decidido a preguntar ── ¿Has visto a Mikey?

── ¡Eh! ¿Mikey-kun aquí? ──la de ojos azules lo miró extrañada ──. Lo único que sé es que las chicas pasaron por aquí a dejarnos par de bocadillos

──Espera, espera... ¿Mikey no estuvo aquí?

Reconocía que se había demorado un poquito. Ciertamente había salido minutos antes de que la campana anunciando el descanso sonara, pero en el camino se había topado con unas chicas y su lado coqueto había salido de forma inconsciente haciéndole incapaz de rechazar el que hayan querido hablar con él

¡Oh! ¿Hablas del chico rubio de la semicoleta que la trajo en su espalda?

Baji se volteó a ver a la enfermera la cual había estado escuchando toda la conversación manteniéndose callada hasta que vio oportuno intervenir

──Si ──dijo Keisuke con una ceja alzada y con unas mil y una posibilidades rondando en su cabeza sobre la teoría del paradero del enano, aunque ya sospechaba cual era la más aceptada

──Pues llegó junto a la joven Hanagaki y a los cortos minutos, si mal no recuerdo, llegó ¿usted?... ──Baji asintió haciéndole entender de que su comentario era correcto ──..., bueno, llegó usted cargando a la joven Matsuno. El chico rubio esperó hasta que usted se fuera y luego se marchó él. Antes de irse me dejó su número de teléfono y me dio la orden de que le avisara única y exclusivamente cuando ambas jóvenes despertaran

──Maldita pulga ──rechistó por lo bajo mientras se pasaba una mano por sus cabellos negros, acción que no pasó desapercibida por la rubia de ojos verdes que hizo que se sonrojara por lo sexy que le había quedado a Baji ese gesto de frustración

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Chat privado: Keisuke – Ken

Sbs dond hestá el enhano??

Draken
Primeramente activa el autocorrector

Hesperah...

Ya lo puse

Draken
Bien, y en segunda,
¿No se supone que está contigo en la enfermería?

Pues no, Mikey se fue a buscar a los tipos causantes de todo, él solo