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Chapter Thirty seven

──De todas las personas con las cuales pensé encontrarme aquí, tú no eras una de ellas ──el pelinegro le enseñó la lengua en un gesto burlesco en lo que Ran se terminaba de colocar la camisa que segundos atrás Nahoya tenía puesta

──Muy gracioso Koko ──Ran resopló entre molesto y fastidiado ── ¿Qué hacen tan temprano aquí sí se puede saber?

── ¡Temprano! Pero si son las 12:00 pm ──Koko lo miró con una ceja alzada para luego sonreír de medio lado ── ¡Oooh! ¿Acaso Smiley te mantuvo activo toda la noche?

──Koko deja el chisme ──Inupi lo regaña dándole un codazo en la barriga

──Solo por satisfacer tu curiosidad, si ──sonrío con suficiencia ──, y no solo eso. Aunque de todas formas me las debes porque llegaste justo cuando estaba a punto de...

Cállate la boca Anabelle

Tanto Ran, como Hajime, como Seishu, se rieron por el grito qué soltó la pelinaranja. En el caso de la rubia estaba riéndose de manera avergonzada, se sentía identificada con la situación

──Y bien ¿Nos dejaras aquí afuera o...?

El de ojos amatistas les apuntó hacía dentro de la casa con la cabeza dejándoles el paso para que entraran. Les indicó que se sentaran en la sala común y fue hasta la cocina regresando con la bandeja de empanadas para brindarles

──Volveré a preguntar ──se sentó en uno de los butacones como si de su casa se tratara, en el caso de los otros dos estaban sentados en el sofá ── ¿A qué vinieron?

──Que grosero eres Haitani ──le dijo Koko revirando los ojos con una sonrisa

──Me jodiste el palo Kokonoi ──chasqueó la lengua ──, así que me estaré quejando hasta el cansancio

──Vulgar, típico de ti ──negó con una sonrisa

──Bueno, ya está bien ──Seishu intervino viendo que si no los detenían seguirían discutiendo ──. Vinimos porque habíamos quedado en que hoy ayudaríamos a Draken en su sorpresa para declararse a Mitsuya

──Wow...que romántico

──Eso fue un bombazo qué no veas, nadie lo sabía ──dice el pelinegro

── ¿Y cuál es tu vela en este entierro? Porque qué yo sepa no tienes nada que ver con el subcomandante de la Toman

──Yo estuve virtualmente presente cuando se dio a conocer la noticia ──dijo inflando el pecho ──. Tengo el deber de ayudar

Lo único que quieres es estar en el chisme

Nahoya había salido de la habitación con un conjunto qué consistía en un vestido strap de color negro doce dedos por encima de la rodilla, sus botas blancas de suela gruesa qué usaba con el uniforme de Toman, una chaqueta de cuero negra y una gorra negra por la cual se veían sus mechones característicos sobresalir y caer a cada lado de su cara

──Que gracia ──Ran estiró la mano y le apretó su moño el cual salía por la abertura de la gorra ──, parece el rabo de un conejo ──se lo volvió apretar ──, qué adorable. Cada día eres más una Pelusita ──la jaló del brazo para que acercaran sus rostros ──, mi... Pelusita

──No fastidies Anabelle ──agarró su cara y la alejó de forma brusca arrancando una carcajada al de ojos amatistas ── ¿Por fin dónde será? ──se acomodaba el moño qué Ran le había semidespeinado

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