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Chapter Twenty two

──Seishu, pásame la llave trinquete para poder terminar ya con el caballete central ──dijo Shinichiro, pero como la rubia no respondió ── ¿Seishu? ──dejó de prestarle atención a la moto que estaba terminando de reparar y se dedicó a buscarla con la mirada ──. Ken, ¿Dónde está Seishu?

El rubio de la trenza había ido a buscar la llave que había pedido el pelinegro, se la entregó y se sentó a su lado para seguir ayudándolo con aquella moto. Draken estaba emocionado de cierta manera, pues esa moto sería un regalo para alguien especial por lo que le hacía tener más entusiasmo al repararla

── ¿Me llamaste Shinichiro? ──apareció la rubia de cabellos dorados por la puerta

Muchos se preguntarán ¿Es normal que una chica trabaje a medio tiempo en un taller de reparación de motos?  Para muchos sería no, pero eso a Inui Seishu no le importaba. A ella desde pequeña le ha gustado ese mundo, y era bastante buena es eso. Se podría decir que a pesar de lo femenina que era, estar vestida con un overall azul dejando a la vista todo su torso descubierto, un sostén deportivo que siempre usaba y su cabello recogido en una coleta alta, se seguía viendo guapa

── ¿Dónde te habías metido? ──preguntó más por preocupación que por regaño

── ¿Qué acaso se te olvidó? ──caminaba adentrándose a la tienda con unas bolsas de plástico ──. Me mandaste a comprar pintura para decorarla ──señaló a la protagonista ──, eres muy despistado

Tanto Draken como ella comenzaron a reír a lo que el mayor los miró entre indignado y avergonzado, pero comenzó a reír después. Pues Inupi tenía razón, Sano Shinichiro era muy despistado

¿De qué se ríen?

Por la puerta de S.S Motors apareció Mikey en compañía de Izana, Baji y Haruchiyo

──Manjiro, Izana, Keisuke ──levantó la vista para saludarlos ──, Haruchiyo ¿Qué hacen por aquí?

──Me debes cinco mil yenes ──Baji le extendió la mano a Sanzu mientras en su rostro habitaba una mirada burlona dedicada al de cabellos rosas

──Eres un grano en el culo ──el pelirrosado sacó su cartera y le dio el dinero a la vez que ponía los ojos en blanco

── ¿Y estos porque apostaron ahora? ──Draken se estaba acercando a sus amigos limpiándose las manos con un trapo

──Nada nuevo ──Mikey se encoge de hombros ──, solo a ver qué nombre decía Shinichiro primero

──De seguro habías llamado antes y le dijiste ──cogió a Baji por la camisa

──Esa trampa es más propia de ti ──su sonrisa burlona no abandonó su rostro

──Bueno ──lo soltó ──, en eso tienes razón

──Ves

Los otros presentes solamente negaban viendo la escena de esos dos con cara de ‘‘No tienen remedio’’

──Nunca cambiarán ──dijo Shinichiro limpiándose ──, pero en fin ¿A que vinieron?

──Yo porque quería ver cómo iba todo ──dijo mirando a la moto que yacía en medio del taller ──, ellos porque simplemente fueron a buscarme al no tener otra cosa mejor que hacer ──dijo refiriéndose a Keisuke y a Haruchiyo ──, y este porque se nos pegó ──dijo refiriéndose a Izana

──Acabo de terminar ──se las enseña ──, solo falta decorarla

──Ese es mi trabajo ──la rubia sacó una de las pinturas de la bolsa, una color lila

Todos se pusieron detrás de Inupi la cual se había colocado bien su overall para no mancharse y se puso un cubrebocas para no intoxicarse con el olor, incluso y de forma disimulada, pintó en el lado derecho del depósito de gasolina el tatuaje de Draken

──Terminada ──dijo quitándose el cubrebocas y la parte superior de su overall para volver a quedarse en su sostén deportivo

──Wow ──dijeron todos los hombres a la vez

──Verdaderamente que las mujeres son mejores para estas cosas ──Shinichiro la abraza por los hombros sonriendo

──Me gusta que me alaben ──cruzó sus brazos debajo de sus pechos y aparte de eso lo infló haciendo que se notaran más de lo que ya lo hacían de forma natural

A ella no le importaba hacer esas cosas que aparentemente parecían trucos de seducción con ellos delante. Sabía que con ellos no había problemas y les tenía confianza, los conocía, y sabía que no intentarían nada. Puede que soltaran uno que otro coqueteo, pero serían inocentes

¡Wow!

Todos giraron la cabeza hacia la puerta. Un chico con el cabello largo con mechas tanto en moradas como en amarillas, mirada de flojera total y un chupachupa en la boca hizo acto de presencia

──Waka-san ──le saludó la rubia moviendo su mano

──Hola a todos ──se acercó poniéndose al lado de su novio ──, hola Shin-chan ──besó de forma sutil al pelinegro haciéndolo sonrojar

Ese pequeño acto hizo suspirar a Inupi. Desde que tenía memoria había visto a esos dos ser la pareja más dispareja y a la vez más tierna del mundo. Añoraba tener una relación así, y deseaba de todo corazón que esa relación fuera con Koko

...pues fue obra de Seishu...

Salió de sus pensamientos al escuchar su nombre

── ¿Qué? Perdón, no estaba escuchando

──De seguro estaba pensando en ese inútil de Koko ──dijo Mikey con tono burlón, Inupi se sonrojó ──,... di en el clavo

── ¿En serio Inupi? ──se burló Baji ──. Pensé que tenías mejores gustos

──Basta ──dice avergonzada

──Al menos tiene dinero ──dijo el pelirrosa ──, a falta de cara atractiva tiene jugosas cuentas en el banco

── ¡Sanzu-kun! ──si, estaba más que avergonzada

──Chicos ya no la molesten ──dijo con una sonrisa mientras era sostenido de la cintura por Wakasa

──A ti también te causa gracia Shinichiro ──le dijo indignada ──, no disimules

──Como sea ──suspiró ──, y como iba diciendo, que la decoración fue todo obra tuya ──la señaló

──Deberías dedicarte a personalizar motocicletas ──comentó Wakasa

──Ahora que me fijo bien ──Draken miraba la parte derecha con la ceja alzada ── ¿Por qué le pintaste mi tatuaje?

──Ya verás ──saca su móvil de uno de sus bolsillos traseros ──, la llamaré para que venga

── ¿Pero porque le pintaste mi...?

──No molestes Draken... y cállense que está a punto de contestar

Inicio de llamada

── ¿Qué pasa Inupi?

──Ven a S.S Motors ──miró a todos los demás con una sonrisa ──, te tengo una sorpresa

──Bien, iré para allá, solo dame unos minutos

──Te espero

Fin de llamada

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Chat privado: Seishu – Hakkai

Cuando traigas a Takashi véndale los ojos, todo tiene que ser una sorpresa hasta el final

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──Todo está listo, solo falta que llegue

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