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Chapter Eleven

──Inupi, por favor cálmate ──Souya ya no sabía de qué forma calmar a la rubia

──Es que... Angry yo... quiero mucho a Koko y... me duele que no signifique nada para él ──las lágrimas y los hipidos que soltaba hacían sentir mal a Souya, quería ayudarla pero no sabía que decirle para reconfortarla

──Pero debes de relajarte ──Inupi estaba con la cabeza apoyada en el regazo de Souya mientras esta le acariciaba sus dorados cabellos ──, llorar no solucionará nada ──le hacía lentas caricias ──. Reconozco que la actitud de Koko no fue, ni ha sido la más apropiada pero... ¿No crees que le debes un voto de confianza?

── ¿Cuántos más Angry? ──Seishu levantó un poco la vista y la miró con una ceja alzada ──. Siempre le he perdonado cada uno de sus desplantes y ya estoy cansada ──suspiró dándose valor ──. La gota que colmó el vaso fue que haya olvidado el hecho de que esta cita era para hacerme sentir mejor, o sea, olvidó mis sentimientos ──volvió a suspirar pero esta vez puso una expresión triste ──. Si fuera Akane él...él no me...

── ¡Inupi! ──la de cabellos celestes la miró con los ojos entrecerrados, su tono de voz asustó un poco a la rubia ──. Nunca te compares ok. Eres Inui Seishu alias. Inupi, guapa, talentosa y excelente amiga ──intentó mostrarle una sonrisa ──. Eres Seishu, no Akane. Si Koko no comprende ni puede ver eso entonces que se pudra, se estará perdiendo a una chica increíble

──Gracias Angry ──Inupi sonrió mientras se limpiaba las lágrimas

──Ahora ──Angry agarró su celular y escribió algo a gran velocidad ── ¿A dónde se suponía que irían tú y Koko?

──A la exposición de motocicletas antiguas que se debe de estar celebrando en Kanagawa ──a la rubia le brillaban los ojos, pues le hacía mucha ilusión

──Pues ──Souya le sonrió ──, vete preparando que iremos justo para allá

── ¿De qué estás hablando? ──la rubia arqueo una ceja algo confundida

Antes de que respondiera se escuchó el sonido de una moto. La peliceleste se levantó y abrió la puerta de su casa para ver cómo cierto chico de cabellos azules les sonreía estando montado sobre su motocicleta

── ¿Hakkai? ──dijo Inupi

──Iremos los tres a esa exposición y disfrutaremos ──Souya comenzó a empujar a Seishu hasta que la dejó cerca de la moto del peliazul ──. Así que por hoy, olvidémoslo todo y concentrémonos en relajarnos

Terminando de subir la foto en su perfil de Facebook, Souya sonrió con complicidad. Había subido esa foto a propósito. Primeramente porque así le mostraría a su hermana que no estaba sola y que se estaba divirtiendo, cuando esta se fue a su salida no paró de preguntarle si quería ir con ella porque no le gustaba dejarla sola, pero la peliceleste insistió. En segunda porque así le mostraría a Koko a través de su conexión con el perfil de Nahoya todo lo que Seishu estaba disfrutando, porque sabía de la discusión que tuvo Ran con su hermana y figuraba que el pelinegro andaba con el Haitani

¿Qué haces Angry?

Souya se asustó por la repentina cercanía de Hakkai. Se volteó y guardó su celular con discreción

──Que susto me diste Hakkai

──Es que te apartaste de momento ──Hakkai le extiende su bolsa de palomitas para que agarrara algunas ──. Agarra algunas cuantas, Inupi debe estar ahora mismo haciendo la fila para las bebidas

──Si ──agarró unas cuantas palomitas ──, ya empieza hacer calor con tanta gente junta ──hace el gesto de abanicarse con la mano que le sobraba

¡Chicos!

Ambos voltearon y vieron como Inupi llegaba con tres bebidas y par de confituras, no podía ni caminar con tanta cosa

──Al final va a ser verdad eso que dice Draken de que no puedes ni con tu alma

──Muy gracioso tu comentario Hakkai ──Seishu hace un puchero ──. Dame palomitas, cuando fui a comprar solo habían con sabor a queso y a mí me gustan con sabor a mantequilla, te llevaste las últimas de mi sabor favorito, así que dame un poco ──abrió ligeramente la boca, Hakkai agarró un puñado de palomitas y se las puso de apoco a Inupi en la boca debido a que esta por tener tantas cosas no las podía agarrar por sí misma

En algún momento Inupi, en un gesto bastante sexy, se colocó un mechón de cabello detrás de la oreja para poder comer mejor, acción que alteró a cierto pelinegro que se encontraba escondido detrás de unos arbustos

── ¿En serio no te creí capaz de esto? ──Rindou, el cual lo había acompañado supuestamente por aburrimiento, le dijo en tono burlón y con una ceja alzada

──Cállate ──un poco más y se come las uñas ── ¿Cómo es posible que ella se deje alimentar así? Solo yo puedo hacer eso ──su voz solo detonaba celos, puros celos ── ¿Y por qué hace esos gestos tan...sensuales? ──rechinó los dientes ──, joder que no se le acerque tanto

──Esos celos Kokonoi ──Rindou tuvo que contener soltar una carcajada y echar a perder el plan ──. Deberías pensar primero en atender la situación de allá abajo ──le señaló su entrepierna

── ¡Mierda!

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