CAPITULO 22 - UNTIL I FOUND YOU

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ALEXANDER

   La noche fue exorbitantemente agotadora tanto era que no lograba despertar incluso cuando la alarma había sonado 10 veces seguidas, en momentos donde sentía que la cama se quedaba pegado a mi es cuando mas extrañaba a mamá, extrañaba que me pidiera levantarme y que cuando viera que no había resultado de ningún tipo me comenzara a picotear las piernas con los dedos. Recordar ese tipo de momentos en espacios tan extremadamente solos y grandes solo me hacían pensar en el vacío que tenía en mi vida, uno que aun no llenaba y que probablemente no llenaría nunca porque al final de todo hay heridas que demoran mucho más en cicatrizar y aunque lo logran no dejan de doler, si no duele la cicatriz, duele el recuerdo.

La mañana paso tranquila, Sali a trotar, fui al gimnasio, de camino pase por el programa, revise documentos de la universidad y llame a mi padre que al parecer las horas extras de trabajo acumulado le estaban pasando factura

— Ciao padre ¿come hai seguito? (Hola, padre ¿Cómo has estado?)

— Ciao Alessandro, sono molto, tranquillo (hola alexander, estoy bien, tranquilo)

— Devi riposare ¿perche non torni al gin? (Debes reposar, ¿Por qué no regresas a ginebra?)

— Ho questioni da risolvere (Tengo asuntos que resolver)

— Hai sempre questioni da risolvere (Siempre tienes asuntos que resolver) — Dije en un tono serio — comunque, hai una casa qui, torna se necessario (como sea, tienes una casa aquí, regresa si es necesario)

— Sarebbe piú facile se tu venissi ad aiutarmi con lo studio (sería más fácil si tu vinieras y me ayudaras con el buffete)

— Non inizieró la stessa discussione di sempre (no comenzare la misma discusión de siempre) devo andaré, mettiti (debo irme, mejorate)

Había colgado 2 segundos después de haber dicho lo último, seguir en la llamada era una perdida tiempo, el no regresaría sin terminar lo que le hacia falta y yo no iría a Italia y menos después de haber logrado convencer a ginebra de salir conmigo.

El día transcurrió mucho más rápido de lo que pensaba, ya eran las 7 de la noche y las estrellas titilaban fuertemente en el cielo, la brisa brusca y fresca hacia revolver mi cabello y frente a la puerta de su casa listo para tocar el timbre a las 7:30 p.m. y rememorar este día mil veces en el futuro

Luego de un timbre y dos golpes en la puerta esta se abrió dejándome asombrado con la mujer que me recibía de tez blanca, cabello rojizo que relucía sus 1,53 cm dentro de un vestido amarillo pastel con estampado de flores que llevaba muchísimo tiempo sin ver, se veía tierna y dulce, no podía no pensar en cuanto quería que ella me viera con los mismos ojos que yo la miraba a ella

— Te vez...

— Olvídalo, no digas algo básico, todos dicen lo mismo "te vez linda"

— Claro, todos han estado equivocados, realmente te vez maravillosa

— A punta de engaños ¿así comenzamos?

— No tengo que engañar a nadie para que se den cuenta lo maravillosa que estas

— ya basta — dijo con una sonrisa y unos cachetes ruborizados que no pudo evitar enseñar

— eres maravillosa mariposa

— no digas idioteces

— ⁠no me culpes por decir la verdad

— Bien — dijo intentando cortar la conversación — ¿entras? Aun me falta retocarme el maquillaje

Constelación de mariposas - TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora