CAPITULO 4 - SOMEWHERE ONLY WE KNOW

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ALEXANDER

Probablemente este sea el inicio de algo nuevo, empezar el año con las manos atadas no es un buen comienzo, pero quiero ser libre y determinar mis deseos con mi propia voluntad y no la que el espera que yo sea. En algún momento de la vida hemos estado jodidamente rotos esperando que alguien nos salve como si su propósito de existir fuera ser nuestro salvavidas, estamos completamente equivocados.

El teléfono suena en mi bolsillo, una, dos, tres, se corta la llamada y suena una cuarta y debe ser última vez, contesto y al fondo entre gritos y regaños escucho la voz de mi padre.

— Ciao Alexis — Vaya, definitivamente esta será una conversación un poco larga — Me han enviado la notificación de que has rechazado hacer las practicas acá

— Hola padre, el placer es mío al escucharte — una mentira — He averiguado un Buffet por acá cerca, lo he pillado caminando hacia la sucursal del banco cuando pediste que pagara las cosas de la casa — otra mentira — además, me sirve más que todo para aprovechar que la universidad puede asesorarme en cualquier inconveniente que presente.

— ¡¿Mi pensi stupido Alexis?! — grita al otro lado del teléfono

— Per niente padre — Definitivamente es una conversación que durara más de media hora, por lo que desisto de querer escucharlo, pongo el teléfono en altavoz, silencio mi micrófono y subo el volumen del radio.

Escuchar música en medio del caos se convierte de alguna forma en algo sanador, recurro a ella de la forma más inesperada y cuando menos pienso ya estoy dejándome llevar por la melodía y el trasfondo de sus letras. He encendido la radio que encontré hace más de 4 años entre las cosas de mi padre, y junto a los más de 20 canales que se encuentran en ella, logro encontrar el refugio en esa canción que está sonando justo en este momento porque no solo me trasporta del incomodo momento que estoy pasando, si no que me lleva hacia ella, me hace recordarla con su cabello largo y lacio, sus pecas tan claras que pasan desapercibido a lo lejos, recuerdo su sonrisa y la forma en la que se reía al disfrutar de cada cosa que podía enviarle la vida o lo era hace tiempo atrás, ahora solo queda la sombra de esos recuerdos brillantes.

Mi padre ha desistido de la discusión así que bajo el volumen a la radio

— Voglio il meglio per te, Alexis — Dice por fin, siempre hace ese tipo de escenas, se enoja, grita, insulta y cuando ya acaba su enojo dice las mismas palabras "quiero lo mejor para ti Alexis" es algo que se, algo que día a día camina conmigo, pero de pronto lo que él cree mejor para mí no es lo que necesito así que termino la conversación de la misma forma que las otras 30 veces

— Lo so padre— le digo en un tono de voz bajo que entienda que no quiero seguir discutiendo — debo colgar — Le comunico — Ti amo, prenditi cura di te

— Ti amo anche — y finalizando la frase se arropa el silencio en el celular y supe que había colgado. Era mi señal para volver a mis pensamientos, subirle a la canción y volverla a recordar, a lo que era, lo que fue y lo que eso significaba para mí.

Había silencio en la radio y luego de un rato comenzó a hablar el locutor

— Bienvenidos a radioestel 18.7 f.m, tu radio favorita acompañando su vida llena de estrellas, soy El navegante y estaré acompañándolos el resto de la noche, recuerden que pueden recomendar sus canciones favoritas y sus mensajes a través de nuestro Twitter Radioestel18.7, sin más los dejamos con nuestro hit más pedido por nuestros oyentes, con ustedes somewhere only we know de Keane.

Subiendo la canción nuevamente, me tumbo en la cama y dejo que mis pensamientos terminen acogiendo los sueños de esa noche, después de tanto insomnio al fin podría dormir tranquilo, por fin. 

Constelación de mariposas - TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora