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Hobie Brown acompaño al adolescente hasta su casa, eran las nueve con cincuenta y cuatro minutos, así que no era tan tarde. Al menos para Hobart no. Para Rio si. Extrañaba a su muchachito quien le había dicho que no tardaría tanto y probablemente llegaría en una hora a casa, cosa que no era cierta. Tan pronto como escucho pasos fuera de la puerta de su hogar se apresuro y abrió, apenas la mano de su pequeño sol iba a tocar la puerta, porque no traía llaves.
- Mami. -Habló inocentemente, sonriendo y logrando captar como su mamá miraba atentamente a su compañía. Hobart alzo la mano en señal de saludo.
- Buenas noches, señora. -Saludo cortésmente, cosa inesperada de alguien con aquella apariencia tan rebelde. Rio esperaba que le hablara de "tú", como aquella chiquilla con la que salía a veces su hijo, y con quién había roto.
- Ay, mi niño, me tenías con el Jesús en la boca, Miles. -Agarro las mejillas del pequeño quien apenado por la situación que le estaba demostrando a su crush, curveo las cejas por la vergüenza.- Buenas noches, muchacho, ya es tarde para que niños como ustedes estén a estas horas en las calles, ¿Vienen tus papás por ti? -Habló apresurada, observando al otro adolescente.
- No, mi papá trabaja todo el día, puedo irme solo. -Habló sin necesidad de aclarar su edad, sonriendo socarronamente y obteniendo un asentimiento de cabeza por parte de la Morales no tan convencida.- Adiós chaparro. -Se despidió de Miles chocando las cinco y dándole una palmada en la cabeza de forma suave, pronto, se despidió de la Morales para marcharse tranquilamente.
- Y tú, mijo, me vas a decir porque llegas después de la hora que acordamos, muchachito. -Regaño a su hijo, pellizcando su mejilla y causando un pequeño quejido y una risita al chico.
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Después de haberle explicado a su querida mamá quien era el chico y cuantos años tenia, por más que Rio se asusto al saber que su chiquillo conocía gente mayor que él, se lo tomo con calma y lo había mandado a dormir con un beso de buenas noches. Miles Morales despertó tan feliz que le dolía la cara de tanto sonreír, habían quedado Hobie y Gwen que tanto Miles como Pavitr irían a ver el casi último ensayo, ya que aquella banda se presentaba en cierta zona entre esta semana, Gwen había mencionado que seria el martes o miércoles, no estaba del todo seguro pero sabía que todo iría bien. Morales había mencionado a Stacy que le parecía muy rápida la fecha de presentación, pero esta le aclaro que habían estado holgazaneando durante un mes y apenas se habían puesto las pilas estos últimos días.
