Emma despertó aún entre los brazos de Daryl y sonrió contra su pecho, jamás se había sentido tan segura como en ese momento y cerró los ojos disfrutando de la sensación de su cuerpo junto al de ella. Se permitió unos minutos más y luego se deslizó de los brazos del cazador lo más delicadamente que pudo para no despertarlo. Era una mañana fría y se abrigo, antes de salir de la habitación volteó a verlo y sonrió. Buscó la ropa de Daryl y se aseguró de que estuviera seca para dejarla en la habitación, luego se dispuso a preparar el desayuno y con una taza de té en sus manos se sentó en la entrada de la cabaña disfrutando del amanecer, la lluvia había hecho un verdadero desastre afuera pero el olor a bosque y tierra mojada le encantaba.
Cuando Daryl despertó y no la vio a su lado frunció el ceño, se levantó y encontró su ropa doblada así que se vistió y salió en busca de la chica, la vio sentada mirando el bosque, el sol que comenzaba a brillar se reflejaba en su cabello y en sus labios habia una suave sonrisa que transmitía la paz que sentía. Caminó hasta ella y se sentó a su lado en silencio, no queriendo molestarla, pensando cuánto le hubiese gustado despertar y verla a su lado.- Hola - lo saludo ella mirándolo - ¿Dormiste bien?
- Si, pero es un poco temprano ¿no crees? - Emma simplemente se encogió de hombros
- Siempre me levanto temprano, lamento si te desperté
- No, no fuiste tú, también me gusta levantarme temprano - ella se puso de pie y le tendió una mano
- Ven, vamos a desayunar, supongo que tienes que volver ¿cierto? - él no quería dejarla pero tenía razón, debía volver. Había mucho que hacer todavía en las comunidades y lograr que todos trabajaran en conjunto después de todo lo que había pasado no iba a ser fácil para nadie.
- Si, pero podría... volver más tarde - ella le sonrió pero negó con la cabeza
- No deberías preocuparte, estaré bien por mí cuenta y no es justo que estés viajando todo el tiempo, debes descansar y pasar tiempo con tu familia... disfrutar de que la guerra terminó ¿Cierto?
- Sería más fácil si aceptaras venir conmigo Emma, nadie va a tener problemas con eso - él se había puesto de pie y la seguía hasta la cocina
- Ya hablamos de eso, necesito mí espacio y aquí puedo estar perfectamente bien - Emma le dio la espalda mientras le preparaba el desayuno.
- Puedes tener tu espacio allí ¿porque eres tan terca?
- Daryl - le advirtió la chica dándose vuelta y acercándose a dejar el desayuno frente a él
- Ya no tengo hambre, creo que será mejor que me ponga en marcha para volver - ella suspiró y asintió, no iba a pelear con él. Lo vió tomar sus cosas y caminar a la salida - volveré en unos días
- Cuídate - fue todo lo que le dijo, no quería que se fuera pero al mismo tiempo no quería que siguiera insistiendo con el tema porque ella dudaba de que alguna vez se sintiera cómoda en su comunidad, no quería ser mala pero era la verdad.
Lo vió salir por la puerta sin voltear a mirarla y aunque le dolió no dijo nada, no lo siguió, solo suspiró y se dispuso a acomodar aquel lugar, tenía mucho para hacer y con el invierno tan cerca las horas del día eran bastante pocas.✨✨✨✨✨✨✨✨✨✨✨✨
Daryl llego a Alexandria para la hora del almuerzo, aunque no tenía hambre, seguía molesto porque Emma aún se negaba a acompañarlo prefiriendo quedarse sola en aquel lugar. Todos podían notar que Daryl no estaba de buen humor, pero con Carol viviendo en el Reino, no había mucha gente con la que pudiera hablar. Tenía ganas de volver con ella, gritarle por ser tan terca y sacar todo lo que se estaba guardando, pero sabía que eso sería una estupidez porque ella no le debía nada y lo único que lograrían sería que desapareciera de su vida. Dejaría pasar un par de días y volvería a verla, con la esperanza de que hubiese cambiado de opinión. El cazador veía a los demás formar sus propias familias y se dio cuenta de que eso era lo que quería, había estado solo tanto tiempo y la única mujer que le había interesado parecía incapaz de convivir con su familia. Lo frustraba que siempre se negara pero no podía olvidar lo que Dwight le había dicho, ella no había tenido una relación jamás e intentaría alejarlo. Se maldijo por dentro pensando que quizás esa era la forma en la que ella lo mantenía lejos, haciendo que se enojara y la dejara sola, porque no podía negar que ella sentía algo por él. Quizás el cazador no tuviera experiencia en temas amorosos pero lo podía sentir, cuando la besaba o dejaba que la abrace sentía que ella también quería eso, incluso la vez que hicieron el amor, él estaba dispuesto a parar si ella no quería seguir pero al contrario de eso la rubia se había entregado a él sin dudarlo. ¿Por qué tenía que ser todo tan complicado?
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A Dónde Vayas.
FanfictionEra la hermana de su enemigo, eso era todo en lo que podía pensar. Sus caminos se cruzaron en muchas oportunidades y siempre lo había ayudado, pero si era tan buena, ¿porque estaba del lado de los malos? Cuando Alexandría se enfrentó a los Salvador...