A Dónde Vayas.

Liderar.

- Emma ¿segura que quieres ir? - Jesús la miraba sentado en la cama mientras ella preparaba su mochila

- No, pero tengo que hacerlo. Después de lo que le pasó a Aaron es obvio que las cosas se van a poner... difíciles, Jed es un idiota y no dejara de dar problemas. Estaré más que feliz de volver golpearlo - Emma lo miró fruncir el ceño y rió

- Eso no me deja tranquilo preciosa

- Lo se, solo era una broma - le dijo acercándose para abrazarlo - solo serán un par de días, no quiero que Maggie vaya sola y solo quiero ver qué tan jodido está todo por allá.

- Prométeme que no vas a separarte del arco y de tu arma, prométeme que no irás rompiendo narices por ahí o no voy a soltarte - ella volvió a reír y acaricio su mejilla antes de inclinarse para besarlo

- Haré lo mejor que pueda... y sabes que no voy sin mí bebé a ningún lado - no le quedaba más remedio que dejarla ir, la había visto enfurecer cuando se enteró que a Aaron tuvieron que amputarle el brazo después de que un gran tronco le cayera encima cuando Jed huyo de la horda que los acorralaba. Ella los conocía a la mayoría y creía que podían trabajar juntos pero ese hombre había sido el responsable de la gran cicatriz que tenía en el vientre producto de la quemadura que le hizo, eso no lo olvidaría nunca.

Se despidieron cuando todo estuvo cargado en la carreta, Kal las acompañaría así que los tres emprendieron la tranquila marcha, estaba ansiosa por llegar. Rezaba porque no todo fuera tan caótico como imaginaba, que todo fuera producto de su inquieta imaginación que siempre pensaba lo peor, porque su abuelo solía decirle "espera lo mejor pero prepárate para lo peor".

Después de un largo camino por fin estaban cerca, unos salvadores se cruzaron en su camino y detuvieron la marcha, Emma frunció el ceño al ver qué Jed los acompañaba al igual que Arat, pero sabía o esperaba que no dieran problemas. Pero Jed era un idiota que empezó a cuestionar si sabían algo sobre los exploradores perdidos, claro que ninguno de los tres se dejaron intimidar y no respondieron a la provocación del hombre aunque Emma estaría feliz de hacerlo se comportó porque no quería llevarles problemas a sus amigos.
Maggie le preguntó si nombre cuando tomó un tomate, diciendo que anotaría que había tomado eso.

- Mí nombre no es importante - le respondió y Emma entre cerró los ojos, sabía lo que eso significaba, el idiota todavía creía en eso de que todos eran Negan.

- Su nombre es Jed - intervino Laura - Anota eso por favor, debemos irnos, tenemos que volver antes del próximo turno - la rubia le dio un asentimiento de cabeza y los salvadores persiguieron su camino al igual que ellos.

- No puedo creer que trabajemos con esos idiotas - les dijo Kal

- Bueno, lo intentamos - respondió Maggie

- No todos son como él, puedo asegurarte que ese idiota no merece el aire que respira - les respondió bufando mientras ambos la miraban confundidos pues la chica no solía guardarle rencor a nadie, hasta que se levantó la remera y les enseñó su quemadura - El hizo esto y obligó a mí hermano a mirar

- Lo siento - le dijo Maggie

- No te preocupes, paso hace mucho tiempo solo me gustaría volver a romperle la nariz de vez en cuando - antes de que alguno pudiera decir algo se encontraron con un caminante, Justin, el salvador que estaban buscando apareció con un tiro en el medio del pecho - mierda, esto no va a ser bueno - susurró antes de ponerse de pie y dispararle con una flecha.

Llevar el cuerpo al campamento solo había provocado una revuelta, los salvadores contra el resto, Emma se mantenía al margen al lado de Alden hasta todos comenzaron a pelear y el chico se acercó a separarlos luchando para entrar a la multitud que no escuchaba razones