¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Viste caer a tu hijo al suelo y no podías creer lo que esa loca había hecho.
- No, no, Simon, no.
Corriste hacia donde estaba tu hijo tirado. Ghost sacó su arma y la vació por completo en Reachel, ella cayó al lado de Valeria sin vida.
Ghost: ¡No! ¡No! ¡Ojalá te pudras en el infierno, Reachel!
Ghost se acercó a donde estabas con tu hijo. Lo tenías en tus brazos. Le revisaste el pulso, era débil pero aún estaba con vida.
- ¡Mi vida, vas a estar bien! Te vamos a sacar de aquí.
Estabas descontrolada, llorando. Todo tu mundo se estaba viniendo abajo. Tu hijo estaba pagando por cosas que no debería. Esa maldita loca le había hecho daño.
Ghost: Hay que sacarlo de aquí.
Ghost cargó al pequeño en sus brazos y lo subió a la parte trasera de la camioneta. Tú te subiste ahí con él. De inmediato se fueron camino al hospital. El pequeño iba con su cabeza recostada en tus piernas.
- Vas a estar bien, mi amor. Vas a estar bien.
Ghost salió a toda velocidad del lugar.
Valeria intentó escapar del lugar, pero Alejandro la detuvo.
Alejandro: ¿A dónde vas, mi Chula?
Valeria: ¿Tú otra vez?
Alejandro: Esta vez ya te agarré, porque de aquí vas directo a la cárcel.
Valeria: Debería haber sido más cautelosa.
El resto del equipo llegó al lugar; todos habían presenciado lo que pasó.
Price: Bien hecho, Alejandro, pero es hora de irnos.
Konig: Tenemos que irnos rápido. Tal vez T.N. nos necesite.
Soap: ¿Qué hacemos con el cuerpo de Rachel?
Keegan: Déjarlo donde está, ¿no?
Soap: Pero ella era parte del equipo.
Keegan: Ella le disparó a un niño, traicionó al equipo. Deberíamos cortarla en pedazos y dársela a los perros.
Soap: Pero...
Rodolfo: Keegan tiene razón, Soap. Mejor cierra la boca y vámonos.
Price: Primero entregaremos a Valeria y después llamaremos a Ghost para ver en qué hospital están.
Konig: ¡¿Qué esperan?! ¡Vámonos!
Esposaron a Valeria y todo el equipo salió de aquel lugar. Encerraron a Valeria en unas celdas que estaban dentro de la base.
Ya que lo único que importaba en ese momento era el pequeño Simón, Ghost y tú llegaron al hospital rápidamente. Los doctores y enfermeros se llevaron al pequeño al quirófano, ya que estaba perdiendo mucha sangre. Una enfermera se acercó para pedir los datos del niño. Tú estabas en shock y ni siquiera pudiste responderle a la enfermera. Ghost se encargó de dar los datos del niño y toda la papelería. Solo esperaban a que les dieran algún informe sobre el pequeño.
