Cap. 31

1.1K 42 14
                                    

.

Un amor no correspondido siempre será una espina anclada difícil de retirar, aquel dolor insoportable que te hace pensar "¿por qué no soy yo? "

En si, el amor es algo complejo, y más cuando confiesas todos esos sentimiento que has guardado, pero que, lamentablemente, la otra persona no corresponde.

Quizá son enseñanzas de la vida, quizá solo la vida es cruel contigo, ¿cuál es la verdad de todo?

La única verdad es que el dolor del desamor te mata, te quema, te hierve. Es un dolor que pocos quisieran experimentar.

Lee Minho era alguien apuesto y serio, pero muy amable. En su época de bachiller, el más popular de la generación y de la escuela en realidad, tenía buenas notas, era el capitán del equipo de basquetbol. Entonces, ¿por qué no pudo ser él?

El día que confesó sus sentimientos hacia Jungkook, una fuerte punzada en su pecho lo hizo alejarse, aquel dolor describido se hizo presente.

Minho pudo haber entendido, pero, cuando supo que Kim Taehyung, "el nuevo" ahora era pareja de Jungkook, este dolor aumentó aún mucho más.

¿Y todo lo que había hecho? ¿Dónde quedó el esfuerzo que él hizo? ¿Por qué simplemente no podía ser él quien tomara la mano de Jungkook? Pero sobre todo, aquella frase que mata "¿por qué él sí y yo no?"

Entonces es ahí cuando entras en razón y te das cuenta que no puedes hacer nada, más que aceptar la realidad.

Ahora el pelinegro se encontraba sentado en su sofá, leyendo la invitación de boda de su amigo.

Un nudo en su garganta le impidió hablar, así como pronto una pequeña lágrima salió de su claro ojo.
Entonces, en verdad no tenía oportunidad.

Con un suspiro se levantó de su asiento, y caminando tranquilamente tomó un pequeño vaso y sirvió vodka en él, haciendo que, al ingerirlo con fuerza, el alcohol quemara su garganta poco a poco con ese sabor amargo.
¿Qué importaba si lo quemaba el alcohol? De cualquier modo lo que más ardía no era su garganta, si no su corazón.

- Así que te perdí... - pronunció casi en un susurro, para después servir más bebida en su vaso y caer en el piso aún sentado.

Y es que, en todo este tiempo, Lee Minho seguía enamorado de Jeon Jungkook; pero sabía que era algo imposible ahora con su boda.

.

- Entonces, así quedaría el camino hacia el altar, chicos - habló la castaña con una sonrisa.

- ¡Wow! Me parece hermoso, Nay.

- Realmente hermoso, pero no tanto como tú - besó los labios contrarios.

- con una leve molestia, Nayeon aclaró la garganta haciendo que los prometidos se separaran - Así que, mañana será la prueba de trajes.

- ¿Qué? ¡Tan rápido! - comentó sorprendido el pequeño castaño.

- Lo sé, lo sé. Así de rápido.

- Cada vez falta menos, amor - el mayor lo abrazó por la cintura.

- ¡Sí! - con emoción, Jungkook lo abrazó y miró sus ojos con el singular brillo que siempre tenía - En solo días seré el señor de Kim.

- besó sus labios con una ligera sonrisa - Claro que sí futuro esposo.

Nayeon con notorio enojo abandonó la escena, caminando lejos de la pareja para simplemente patear un pequeño banco que había dentro de un salón.

Ella se había obsesionado con Taehyung, con sus brazos, con sus besos, con sus caricias y su manera de tratarla al tener sexo. Todos sabemos que cualquier adicción te puede llevar a la perdición, y eso, fue lo que ocurrió con ella cuando comenzó a involucrarse con Taehyung.

Adicto a la Tentación - [ Vkook ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora