Sugar & Spice - Traducción

CAPÍTULO 11🔥

"Señorita Granger", saludó Narcissa. "Qué agradable sorpresa."

Sí, ciertamente parecía complacida. De hecho, casi tan complacida como cuando Hermione accidentalmente se había convertido en el gato de Millicent Bulstrode.

Dejando caer los dedos de sus labios hinchados por el beso, Hermione asintió. "Señora Malfoy."

Si la mujer buscaba un mejor saludo, ciertamente no actuó así. Estaba más concentrada en Theo, sus ojos penetrantes y sus labios fruncidos mientras lo miraba fijamente. "Theodore. No sabrás dónde está mi hijo, ¿verdad?

Ay, cabrón . Esto parecía horrible. Aquí estaba ella, besándose con Theo, el novio de Draco. El de ella también, pero Narcissa no lo sabía. Ella no lo sabía, ¿verdad? No, no había manera de que ella lo supiera, no por cómo estaba mirando a Theo como si pudiera asesinarlo con sus ojos.

Theo debió haber pensado lo mismo porque se veía un poco sombrío, con pequeñas arrugas formándose alrededor de los lados de su boca. "Narcissa..."

"¿Madre?"

Oh, gracias Merlín.

Draco se acercó a la mesa, con los brazos flácidos a los costados y su expresión mucho más relajada que cuando dejó la mesa, salvo por un ligero fruncimiento entre sus cejas mientras miraba a su madre.

"¿Qué estás haciendo aquí?" preguntó, extendiendo la mano y agarrando sus brazos ligeramente, inclinándose para darle un beso en cada una de sus mejillas.

"De compras y pensé en pasar a tomar el té". Ella miró hacia atrás a la mesa y sacudió la cabeza. "Aparentemente no fui la única con esa idea".

Draco dejó caer su mano en el respaldo de la silla de Theo. "¿Te importaría unirte a nosotros?"

Obviamente él tenía que ofrecerse, era su madre, pero eso no significaba que a ella le tuviera que gustar. Al menos todo este encuentro improvisado había apagado su excitación.

" A nosotros ?" Los ojos de la señora Malfoy se movieron entre los tres, deteniéndose en el espacio entre la silla de Theo y la de ella, y la mano que Draco tenía apoyada contra el respaldo de la silla. "No me gustaría entrometerme".

Theo pareció recomponerse y sus modales hicieron efecto. "En absoluto. Por favor sientate."

Se giró y sacó una silla de una mesa cercana. Le entregó el asiento, tal como lo había hecho con Hermione en ese fatídico primer día del semestre.

Narcissa estaba sentada remilgadamente, con el bolso sobre su regazo y sus dedos entrelazados alrededor del asa. Draco rodeó la mesa y tomó asiento, automáticamente sirviéndole a su madre una taza de té que procedió a preparar a su gusto.

"Gracias, Draco." Tomó un sorbo, asintió con satisfacción y levantó los ojos, fijando la mirada en Hermione. "Señorita Granger, no sabía que usted conociera a Theodore, y mucho menos tan... amigable".

Si hubiera podido derretirse en el suelo para escapar de su mortificación, lo habría hecho, así sin más.

"Soy-"

"Ella nos vio", espetó Theo, mirando a Draco. "Tu madre nos vio besándonos".

No sabía cómo pensaba responder, pero ciertamente no importaba ahora que Theo había decidido agarrar el toro por los cuernos.