¡Devuelve a mi hija! ; appleradio

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—La próxima conduciré yo — habló Husk una vez que se bajaron todos del auto con el estómago revuelto.

—Bien compraremos lo necesario para tener a una bebé en el hotel y lo que se necesite — todos entraron al lugar y se dispersaron por grupos: Niffty se adelantó y fue en busca de productos de limpieza, no productos de los estantes sino detrás de la puerta del personal, Angel iba a la sección de cosméticos y luego a juguetes para Charlie, Husk fue por licores y Vaggie por pañales y comida para bebé y tras suyo estaban Alastor y Lucifer que tenía a Charlie de la mano.

—Papilla de manzana ella siempre la comía cuando estaba pequeña — agarró un paquete grande papilla de manzana y la colocó en el carrito que empujaba Alastor

—Hay que llevar verduras para alimentarla bien, será mejor no llevar mucha papilla

—Es una bebé apenas

—Se le puede hacer jugo de verduras para que lo tome — Lucifer hizo una mueca por lo que decía su rival, concluyó diciendo que sería mejor llevar todo lo que creían necesario, eso llevo que los dos empezaran a agarrar varias cosas de los estantes.

Al final era Lucifer el que se encargaría de pagar por todo, ya sea para Charlie o no, la gente ya había empezado a mirarlos muchos debido a que el mismo Lucifer estaba de compras con una bebé. Algunos demonios del alrededor empezaron a grabar, pero sus dispositivos quedaban completamente dañados cuando Alastor se interponía entre ellos. Lo último que quería era que los V's se enterasen de esto o alguien que pudiese ser un problema para los siguientes días.

Ya de vuelta en el hotel, era algo tarde por lo que Lucifer se encargó de que su hija tomase una ducha. Claro, había tardado más de lo normal porque la pequeña se puso a jugar con uno de los 10 patitos de goma que había puesto su padre.

El rey del infierno suspiró, había extrañado esos momentos con su hija, después creció y ya no hubo más tiempo así ... las cosas habían cambiado, aunque extrañaba a su hija adulta no podía negar que le gustaba recordar viejos tiempos y volver a pasarlos no le disgustaba.

—PAA — la pequeña lo sacó de sus pensamientos tirando agua a su padre que la miro divertida, empezó a salpicar más mientras Lucifer le quitaba el shampoo y la terminaba de bañar. Ya una vez terminado el baño, la vistió y se la dio a Vaggie para que le dé la cena mientras que él se cambiaba ya que estaba todo empapado.

La comida fue complicada, pensaron que la pequeña iba a comer todo lo que le diesen, pero al parecer no quería la sopa que se le estaba dando

—Vamos, Charlie, debes comer todo — la rubia desviaba la cara, Vaggie suspiró

—Déjame intentarlo — Husk tomó la cuchara de las manos de la chica y empezó a moverla de un lado a otro captando la atención de la princesa, puso la cucharada frente a Charlie que comió sin rechistar.

—¿Cómo?

—No se, eso hacen con los niños — se encogió de hombros, Ángel que tomaba un trago sonrió viendo a Husk. En los próximos 10 minutos se la pasaron jugando para que Charlie comiese todo, fue una batalla complicada, pero logró comer todo. —ahora un poco de leche tibia que le ayudará a dormir

Cuando se había terminado la comida ya eran las 9 de la noche, pensaron que era buen tiempo para que la pequeña fuese a la cama así que, de camino a la habitación de Lucifer, la pequeña Charlie se iba despidiendo de todos para ir a dormir. A Vaggie casi se le derrite el corazón, había pasado la tarde estresada por lo que estaba sucediendo y la preocupación por su novia pero supo que al final todo iba a estar bien, sabía que todos ayudarían con Charlie.

—Ven con papá princesa — Charlie corrió hacia su papá después de darle un abrazo fuerte a Vaggie que se retiró momentos después. Ya estando los dos, Lucifer estaba a punto de cambiarse cuando su pequeña se levantó de la cama.

—¿Qué pasó, princesa, aun no puedes dormir?

Charlie caminó hacia la puerta de la habitación, trataba de alcanzar la manija, pero no podía, su padre abrió la puerta y salió del cuarto buscando a alguien. Lucifer la seguía unos pasos atrás pensando que estaría buscando. La pequeña giro en la esquina y tropezó con Alastor.

— Oh, pero que tenemos aquí — el demonio de la radio tomó a Charlie en brazos que se acercó y le dio un beso en la mejilla

Alastor miró divertido a Lucifer que parecía que podría explotar de celos

—Bien, a dormir — trato de llevar a Charlie, pero la niña hacía fuerzas para que su padre no la llevase

—Ja parece que no quiere irse

—Ya es hora de dormir, no se puede quedar contigo

—¿Y por qué no, señor?

—Porque soy su padre y debe dormir en mi habitación

—Bien, entonces vamos todos a su habitación y la dejaré en la cama acostada

— Lucifer aceptó y los tres fueron a la habitación del rey del infierno que era una de las más grandes que tenía el hotel, junto con la que solía compartir Charlie con Vaggie. Lucifer trató por última vez que Charlie se despegara de Alastor, pero al no ver cambios, dejó que el demonio radio entrase a su habitación.

—Veo mucha producción por aquí — dijo Alastor con relación a los patos de goma que estaban esparcidos en el suelo

—No vayas a empezar

—Bien, Charlie, ya me tengo que ir ahora sí... — tratando de poner a la niña en la cama, pero no se despegaba de él — si me dejas ... debes dormir ahora

No había cambios y entonces alastor suspiró

—Cariño, déjame me pongo mi pijama y vuelvo contigo, ¿qué te parece? No tardaré —

Con eso, en agarre se volvió más ligero y dejó ir a Alastor que dijo que ya regresaba, Lucifer solo cerró la puerta, pijama o no, no tenía pensado dejarlo pasar

—Vamos a dormir manzanita — caminó hacia el baño donde cambió sus ropas por un pijama

—Papá — la niña señalaba la puerta pues alguien tocaba, pero envés de abrirla, apagó las luces

—Lo podrás ver por la mañana... — el grito que dio la niña hizo que su padre se sorprendiese, el hotel parecía retumbar ante esto así que se apresuró y fue hacia la puerta de la habitación y aún estaba Alastor con un cambio de ropa y una sonrisa en el rostro.