Capítulo 33: Ever fallen in love.

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Ben y Bella habían logrado llegar al puerto de Theed, en donde dejaron escondida la góndola y ambos se dirigieron hacia la plaza frente al palacio.
Ambos iban sostenidos de sus manos, la paz reinaba la noche por aquí, aunque claro, debían tener mucho cuidado con los Mandalorianos y militantes que protegían y vigilaban todo:

Bella: (Serena) ¿A dónde quieres ir? Si quieres puedo llevarte con tu familia.

Ben: (Sereno) Me encantaría, pero creo que no es el mejor momento para hacerlo.

Bella: (Serena) Entonando... ¿Quieres ir a visitar a tu abuela?

El joven al escuchar eso, asintió con entusiasmo y la invitó a acompañarlo, algo que no negó la mandaloriana, quien gustosa lo acompaño.
Ambos se mantenían callados pero sabían que no estaban incómodos, incluso Bella lo miraba de vez en cuando. Pero cuando Ben la llegaba a ver, él le regalaba una calida sonrisa:

Ben: (Sereno) Sabes algo Bella, tenías razón, estar en el lado oscuro no iba a beneficiarme. ¿Eso significa que ya puedo estar contigo?

Bella: (Divertida) ¡Ja! Lo tendré en mente... (Serena) Aún debes demostrarme que todo lo que me estás diciendo y haces, realmente demuestren lo sincero que eres conmigo.

Comentó ella, para sonreirle una vez más y soltara la mano de Ben para comenzar a caminar hacia el frente. El joven la observo atentamente y suspiro, él estaba dispuesto a hacer lo que sea con tal de estar a su lado.

Después de haber caminado durante algunos minutos, ellos llegaron al mausoleo de Padme, pues frente a ellos se encontraba una estatua de Padme cuando fue reina y detrás suyo la entrada a su tumba. La puerta era de piedra caliza, tenía grabados de rosales y criaturas de Naboo, algo que impresionó a la mandaloriana:

Ben: (Solemne y Sereno) Es hermosa, algo digno para ella.

Bella: (Tranquila) Espero y no se vaya ofender tu abuela por...

Ben: (Respetuoso) Tranquila, ella no lo estará.

Bella no se confiaba mucho, así que avanzó hacia las gigantescas puertas y se arrodilló frente a estás, para empezar a hablar mando'a:

Bella: (Serena) Gedet'ye forgive cuun boldness at enter gar darasuum resting taap, Ni vercopa gar runi finds naak forever.

[Por favor perdona nuestra osadía de entrar en tu lugar de descanso eterno, espero que tu alma encuentre la paz para siempre].

La mujer se levantó e hizo una reverencia, para acto seguido, fuera por Ben y ambos quedarán frente a las enormes puertas:

Bella: (Sonriendo serena) Entonces... ¿Quieres hacer los honores?

El joven sonrió y asintió, sin titubeo alguno, utilizó la fuerza para abrir aquellas pesadas puertas de piedra, dejando un pequeño espacio por donde ambos entrarían. La pareja respiró hondo y suspiro, se tomaron de las manos para caminar hacia el interior; al entrar, fueron recibidos por el ataúd de piedra de su abuela.

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𝚃𝙷𝙸𝚂 𝙸𝚂 𝚃𝙷𝙴 𝚆𝙰𝚈  ᴬ ⁿᵉʷ ᴳᵉⁿᵉʳᵃᵗⁱᵒⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora