Genshin Impac Alther World

" Compromiso"

El viento en la cima de la cordillera era suave, las coletas de la joven eran mecidas con suavidad.

El silencio se prolongo durante un tiempo cuando finalmente fue roto.

- Deberías seguir siendo una estrella, esta ciudad te necesita.

Aún que era un argumento sencillo era realista, la ciudad necesitaba una guía lejos de los Arcontes o Adeptus.

- "…………."

Ella no hablo solo miro hacia abajo, no era como si no quisiera hablar y el lo sabía.
Por eso pacientemente la espero.

Y justo antes de que el dijera algo.

- yo lo ví

Un débil susurro salió de sus labios.

- yo lo ví, todo lo que sufriste toda tu vida!!!! Lo bueno, lo malo, todo!!!!!

- ví, ví , ví (sollozos) ví todo lo que paso en ese lugar.

Al no poder aguantar sus piernas perdieron sus fuerzas.

Callendo en pasto, una tez blanca diferente de su tono, y un temblor inigualable la tenían en un estado imposible de creer.

Nube quien vio esto comprendió, lentamente la levanto en un acarreo de princesa, y buscando un lugar donde sentarse.

La terminaron ambos sentados, ella apoyada en su pecho, encogida como una niña.

Si la gente que la conocía y sabia lo directa que era, o que lo único que pensaba era en la eficacia la viera.

Muy probablemente se desmayarían o se negarian a ver la verdad. Pero al final de todo era un humana.

Una persona, con sus sentimientos y su propio sentido de si misma.

Mirando al cielo, nube se quería golpear a sí mismo, ¿dónde fue que ella lo descubrió? o ¿por qué olvidó que este mundo era real?.

Todo eso ya no importa la mujer en su regaso mostró su yo débil, y también sus miedos.

En verdad el mismo sabía que dejarla Haci era algo que jamás podría hacer.

Preguntandole lo que más quería saber decidió ir ala raíz de su miedo.

- viste mi juicio?

Un débil asentimiento y un fuerte temblor era lo único, que recibió a su respuesta.

Suspirando nube le fue honesto.

- Entiendo tu sentir en este momento, creo que nadie en su sano juicio soportaría eso.

- después de todo no debió ser agradable verme ser empalado, cortado y bueno no tengo por qué decirlo.

La temblorosa keqing se sostenía con fuerza como si no quisiera dejarlo ir.

Sonriendo un poco en su corazón, nube solo pudo acariciar su espalda, el agradable aroma llegaba a su nariz.

Pero aún que esto fuera algo que le gustaría disfrutar. Su prioridad es estabilizarla.

- La verdad creo que todo ese sufrimiento valió la pena. Después de todo te conocí.

- ya sabes cómo era mi mundo y mi patética vida.

- No soy el héroe que salvará al mundo, y no soy el protagonista que tiene todo el poder desde el inicio.

Mirandolo por primera vez en muchos tiempo, keqing quien tenía los ojos nublados por las lágrimas.

Pudo ver en sus ojos carmesí que no había mentira en ellos, limpiándose los ojos.

Le dijo con una voz algo dolida pero fuerte.

- No pienso eso y no eres patético, sufriste más que nadie y pediste cosas sencillas por alguien que ni siquiera existía en tu mundo.

- lograste llegar aquí y aún Haci yo…….

Nube no la dejo terminar pronto con calma uso su brazo derecho y le quitó su guante,  usando su habilidad consiguió un anillo plateado y con calma se lo coloco en su dedo anular.

- Creo que no puedo dejarte preocupar de más, por eso creo que es mejor darte esto.

Los ojos de keqing se abrieron de par en par ella sabía muy bien que era y en verdad ella nunca espero nada de esto.

Ella sabía lo que le pidió ala diosa y estaba dispuesta a seguirlo como un pago por su determinación, pero entonces ¿como se llegó a esto?

Su corazón se aceleró, su mente era un caos, sus ojos miraban incrédulos su mano.

Pronto miro el anillo que brillaba cuál más hermosa joya y miro la cara de este persona.

Tu… tu…

No podía terminar ninguna frase.

Pronto un beso le fue robado, era uno simple dónde sus labios se tocaban pero fue suficiente para hacerla estremecer y más que nada para aclarar su mente.

- Es probable que no seas la única

Esto la enojo y le dió un ligero golpe en el pecho.

Sonriendo nube sabía que era un cabron, que aún que se comprometió con esta chica aún le dijo en su cara que tendría a otras.

Si esto realmente sería imperdonable, pero keqing no era una chica que se amedrentara por las demás mujeres.

Su ese fuera el caso jamás estaría dónde está.

- Es por eso que no quiero que renuncies, no estoy en contra de que me sigas pero no renuncies.

Sus palabras eran verdad el no la rechazo y jamás, le dijo que no lo siguiera.

Fue ella quien tomo la decisión, pensando en pagarle por todo ese sufrimiento en ese lugar, en parte por todo lo que hizo por ella y en otra por culpa de que el sufriera todo ese daño inhumano.

Más sin embargo el……
No solo le pidió seguir, también la alentó a continuar, no solo eso ahora este hombre se comprometió con ella.

Cuánto más aria esta persona, si solo quiere alguna otra mujer? A qué le tendría miedo
Ella lo seguiría y lo cuidaría, no dejaría que cualquier mujer estuviera con el.

Pero si era alguien que lo pudiera proteger
¿Entonces?

Con una firme resolución, decidió que incluso si otras mujeres llegarán ella lo protegería.

Recordando en el fondo de su memoria la declaración del ser que más odiaba en toda la existencia.

En sus pensamientos más profundos.

Incluso si me lleva más que mi alma, no te lo daré. Esas palabras iban dirigidas a esa diosa.

Si la diosa que le dijo que el le pertenecía.

Finalmente dejando eso en su interior.

Lo abrazo diciéndole estás simplementes pero firmes palabras.

- Apartir de ahora no te dejaré.

Regalando le una hermosa sonrisa, una que enamora a cual quier hombre.

Se paro de puntillas y ella también le robó un beso.

Está chica ya ha cambiado su destino y lo entre tejió pero para esta chica, no era lo único que cambio.

Su fanatismo que originalmente tendría la kechin original, desapareció.

Su deseo de mirar al futuro y cuidar la ciudad no desapareció.

Pero ahora su corazón corría Haci un objetivo más grande y su ser también correspondida a ese hecho.

Cuidar de la alma que tenía frente a ella, no solo eso la aria feliz y al mismo tiempo se convertirá en su compañera.

Aquella que alejaría a esos seres que le querían robar a su nube.