Genshin Impac Alther World

"Midori"

El lamentable grito de Ruan Mei se escuchó por todo Liyue.

La niña con su cuerpo gastado trataba con todas sus fuerzas, ir donde los escombros ardientes.

Su único motivo era recuperar a su amiga, incluso si eso la lastimará no le importaba, Emil quien sostenía con fuerza a Ruan Mei.

Tenía un sentimiento de tristeza ciertamente la joven no era cercana a él, pero siempre lo trató de manera cercana.

Tal vez lo más cercano era como una hermana, es un hecho conocido que en los burdeles hay algo de compañerismo.

Después de todo la chicas que trabajan, hay saben que lo mejor es tratar de llevarse bien.

Este era lo mismo para Emil, un eunuco al principio la niña no era más que otra chica a la cual debería tratar.

Pero día a día la niña obligada a trabajar en ese lugar, trató de mantener su actitud alegre y algo descarada.

Con el tiempo no solo su señora, si no el también la vieron como alguien cercano.

Poco a poco Emil, se preocupo por ella llevando algún bocadillo, u observando a los clientes que trataban de sobrepasarse de sus límites.

En su corazón lentamente tuvo un ligero sentimiento, uno que le hacía ver a la niña como una hermana.

Aunque el lugar de trabajo era cuestionable, tenerla cerca animándose era realmente agradable.

Con el tiempo Flauros mostró sus colmillos y buscaba a la joven, aún que Emil era fuerte.

Flauros era un poco más fuerte eso le molestaba, pero gracias a Yumi las cosas se mantenían.

Al margen hasta que cierto día un hombre apareció y llevando a Midori con el dijo.

La quiero como mi guia turística.

Esas palabras irrazonables le eran algo ridículas, pero también le dieron el interés de ver cómo protegería a Midori.

Al final se batió en duelo, no solo ganando sin una visión, si no que también creo un contrato para ayudar a la hermanita.

Sin embargo la situación ahora era diferente, todo fue causado por los tipos a los que solia atender.

Si el burdel era un lugar donde varios Fatui se divertían y Emil lo sabía.

Sin embargo ahora esas mismas personas le quitaron a esa persona.

Sus ojos rojos, exudaban una sed de sangre, su intención apenas se contenía.

Lo único que evito que Emil se desatará, era la niña a su lado.

Su determinación de incluso con su débil cuerpo quería buscar a Midori, esto era suficiente para que el se mantuviese al margen.

Recordando las palabras de su señora, sentía que realmente había fallado.

Si el confiable eunuco que jamás había fallado en un pedido, no importa cuan peligroso o difícil fuese.

Ahora se contenía para no volverse loco.

Mientras la situación pasaba.

En un lugar diferente.

Un espacio oscuro donde la conciencia se desvanecía.

- ¿Donde estoy?

- No veo nada...

- ....Mi cuerpo...no me duele

- Pero tampoco puedo sentirlo....

- ..........