Genshin Impac Alther World

" El Banco del Reino Norte "

Mientras nube estaba siendo molestado por mini, en su observación de la viajera.

Lynette se presentó como la persona que debería ser recibida, aprovechando eso Lynette ayudaría a nube con sus planes.

- Oh! Usted debe ser la señorita Lynette, la esperábamos desde ayer.

- Lamentamos mucho no poder recibirla como es debido, pero el señor Tartaglia no se encuentra aquí.

- Le mostraremos su habitación dónde puede hospedarse.

- despacho

Con su actitud sería y monótona Lynette sin más dijo lo necesario.

- perdone?

- Despacho......

- Lo sentimos el señor Tartaglia, es el único que tiene la llave.

- Me voy......

- A-adonde va?!!!!

- Salir..... Es aburrido aquí.

Pero señorita debe esperar al señor.......

El hombre enmascarado solo se quedó paralizado cuando Lynette le regreso una mirada fría, y se retiro.

Esos ojos morados que lo veían lo miraban con tanta frialdad que lo aterró, Lynette quien estaba hay utilizo una habilidad para ocultarse y como se esperaba de una ayudante, de un mago.

Usando sus habilidades entro por todo el banco sin ser notada.

Dentro veía a los Fatui a diferencia de los que conoció, estos parecían olgazanear y comer despreocupadamente.

Otros encargados de los papeles veía como llevaban documentos sobre dinero y algunos otros.

Evitando que la vieran, Lynette llegó al despacho principal, con una habilidad fuera de lo normal, abrió la puerta.

Entrando con el máximo cuidado.

"Hacer click"

Cerro la puerta, los Fatui cerca les parecía por una puerta cerrar, pero como la única puerta era la del despacho.

Era tonto pensar que alguien entrara, ya que su jefe encargado Tartaglia, se encontraba fuera.

Dentro libre de toda mirada, Lynette desactivo su habilidad y pronto, comenzó a buscar algún papel o alguna orden para hacer algo en Liyue.

Con calma busco y encontró algunas carpetas con información que le podría servir a nube.

Entre ellos había uno que le resultó terrible,

" PROYECTO DE MODIFICACIÓN HUMANA"

Este documento parecía secreto y aún que no podía leer mucho sabía que este era un proyecto, que llevaba a cabo en secreto.

Sintiendo una repulsión enorme por el contenido, hizo lo posible por no vomitar, poco después encontró algunos documentos con información sobre los precios de algunas piedras valiosas.

Entre otros, lamentablemente no encontro más, pero el documento que más le dió un sentimiento de que algo malo, pasaría era ese.

Pronto dejo todo en su lugar y salió de nuevo.

"Hacer click"

De nuevo los Fatui oyeron la puerta pero no había nadie, algunos se asustaron y otros bromeaban que era un fantasma.

La verdad era una gatita habilidosa que logro llevarse documentos secretos, lo peor era en sus narices.

Saliendo de hay tuvo que esperar ya que es cucho voces en la puerta de la entrada, usando sus habilidades felinas se subió a un pilar y se acomodo se manera que su espalda se pusiera sobre el pilar, usando sus pies como apoyo, se quedó hay hasta que terminarán de hablar.

Era incómodo, pero Lynette no tenía más opcion, tenía que soportar si quería llevar esos papeles.

Fuera del banco, Tartaglia estaba hablando con Lumine, quien siguió y averigüo que su nuevo conocido, era un Fatui.

Mientras ellos discutían, en un tejado cercano nube quien soporto las molestas patadas de mini.

Ya estaba bastante enojado, la razón mini paso del enojo a solo molestarlo, la razón era obvia incluso si era una familiar, aún era una dama y el pecado del hombre fue decirle pasada de peso.

Cómo nube no se disculpó, motivo de su búsqueda ella no lo perdono y siguió molestandolo.

Solo cuando noto sus ojos realmente fríos, ella se detuvo, lamentablemente el ya estaba molesto y alguien pagaría por eso.

Descuidada mente libero su poder, haciendo que no solo Tartaglia si no que también Lumine, se dieran cuenta pero como no les atacó dejaron que se fuera.

Tartaglia decidió ocuparse de sus asuntos, pero Lumine quien no dejo que esa extraña energía se le olvidará.

Poco después Tartaglia entro y Lynette que veía a ese chico hablar con sus hombres y escuchar, que ella  sería cuidada por el en ese lugar.

Sintió que no era una persona fácil, mantenimiendo su respiración al mínimo, Lynette se contuvo y desvancio su presencia.

Pero Tartaglia se dió cuenta y volteandose aún que no miro nada, no pudo evitar sentir que alguien estaba hay.

Pronto decidiendo ir a su despacho, para ocuparse de varios asuntos, ya que el rito había terminado en caos, lo mejor sería ocuparse de su plan.

No sin antes regresar una mirada cautelosa, una última vez.

Pronto desviando su atención a otra asuntos, se fue.

Poco después Lynette escapó a la cámara de jade.

Los papeles que traía eran realmente valiosos y el problema, que solo parecía simple se fue tornando aún más peligroso.