୨👑୧ Des-Aventuras con la Realeza ❀ ;

─ Capítulo 10; Familia.

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─ Capítulo X;

Juraba que hoy no podía ser un día más raro, el hecho de enterarse que tenía más familia aparte de su padre, hermana y la familia de su tío era impactante, principalmente porque la familia real no era exactamente muy extensa.

Pero después de todo el cañonero no era mala persona, soltaba chistes algo cuestionables pero quitando su extraño humor hacia las cosas, era un buen tipo.

Siempre quiso conocer más a su familia y profundizarla, no sabía exactamente porque se quejaba.

Igualmente apreciaba el hecho que el cañonero era un buen... ¿Tio? Bueno, realmente el hecho que él sea el primo de su padre no lo hace familia suya, solo alguien "cercano"... Es difícil de explicar.

Hoy era un día algo cansado para los guardias, ya que todo el equipaje del Cañonero había llegado al Castillo, y claro, había que meterlo ahora en la habitación de este, y no eran solo 3 maletas...

Los guardias, que ya estaban cansados, subieron todo su equipaje a su habitación, cosa que fue vista por el principito y su guardiana, y el principito pensó que sería buena idea ir a visitar a Cathán.

Tocó su puerta dos veces.

— ¡Adelante! —

Se oyó en su interior y el principito entró solo, ya que la guardiana decidió quedarse afuera, ya que esta pensaba que entrar en la habitación de un miembro realeza era algo descortés de su parte como parte de la Guardia Real.

El cañonero sacaba un par de papeles y pergaminos que tenía guardado en una de sus miles de maletas.

El principito empezó a observar el cuarto, era muy grande y sobrecargado, había tratados de batalla, decoración hippie, figuritas de madera de varios animales, una exposición de medallas, varios cuadros de guerra, cuerdas colgando de estantería a estantería, sábanas y alfombras de pieles, armas de oro y en muy buen estado, etc.

— ¿Te gusta lo que ves? —

Escucho la voz grave del cañonero, no era tan grave como la de su padre, pero se le notaba los años.

— Si... Es muy... —

Cuál sería la palabra ideal para toda esta habitación, no era fea, pero tampoco era muy su estilo.

— ¿Fea? —

— ¡No! Digo, solo la veo muy... Sobre cargado, no es muy estilo, pero es muy bonita a su estilo. —

El cañonero miró con algo de duda a su "sobrino", pero no le dio importancia, colocó su mano en el hombro del pequeño y le dio unos golpecitos.

— Nah, no te preocupes, tu padre dijo que era horrible, pero lo admito, si está algo sobrecargada. —

En eso entraron unos guardias que llevaban un gran cuadro tapado por una sábana roja hacia la pared de la habitación, pero al estar tan llenas de cosas empezaron a golpearse entre ellas, haciendo caer algunas, cosa que el cañonero no le agrado.

— Vale, vale, dejarlo en el suelo, ya me encargó yo. —

Dijo algo enfurecido, los guardias solo se fueron con la cola entre las piernas y el más pequeño empezó a sentir curiosidad por el cuadro.