𝗣𝗥𝗢𝗠𝗜𝗦𝗘𝗦 𝗔𝗡𝗗 𝗗𝗘𝗕𝗧𝗦 - 𝗘𝗪𝗙𝗦𝗢𝗢

16. Más parecidos de lo que creen.

SOO-HO'S POV.

Odiaba el hecho de no poder controlarme con Min-hae.

Al principio creí que era por sentirme identificado con ella o algo así, pero últimamente se sentía diferente a eso.

Cuando dijo que le importaba, algo se movió dentro de mí. Esa conformidad, ese deseo de volver a escucharlo pero el miedo a volver perder a alguien que te hace sentir de esa manera; eso era aún más angustiante.

Las sonrisas con ella salían automáticamente, así como pasaba con Seo-jun y Se-yeon cuando éramos inseparables. Era imposible no reírme con sus nuevos talentos que iba descubriendo, notando que cada vez era una persona más increíble.

Fue inevitable querer estar con ella en ese momento en el que sintió que realmente merecía pasar por todo aquello.

Pero no podía hacer nada al respecto. Arriesgarme a un nuevo vínculo social era lo peor que podía hacer, Seo-jun me lo dejó en claro, aunque también me dejó en claro que ella me gusta, Min-hae no era alguien con quien solo me identificaba, era alguien con quien quería seguir compartiendo buenas y malas.

Era extrovertida, me sacaba de mis pensamientos y cuestionaba mis opiniones egoístas sin huir y darse por vencida.

Me empujaba a tirarme al vacío con comentarios que le llevaban la contra a mi personalidad calculadora, reservada y astuta.

Cuando estaba con ella realmente no tenía idea de qué vendría después. No podía leerla, como un libro al que no logras entender al principio pero te cautiva con su trama, así que quieres seguir leyendo para descubrir el final.

Min-hae me atrapaba, y ya ni siquiera me ocupaba en ocultármelo a mí mismo.

Una pequeña sonrisa se formó en mis labios cerrados mientras subía la rampa hacia mi casa, pero la luz de un coche hizo que esta se desvaneciera de inmediato.

De allí salió mi padre, el cual se suponía que volvería a Estados Unidos luego de la cena.

—¿Recién llegas?— preguntó con una sonrisa.

Mis pasos se detuvieron en seco, sin siquiera mirarlo.

—¿Aún sigues aquí?— cuestioné volteando hacia él.

—Tu profesor me llamó por la reunión de padres y maestros, aproveché que ya estaba aquí para ir, pero quería avisártelo antes.

Una pareja bajó del edificio y la mujer, sin siquiera preguntar o pedir disculpas, comenzó a fotografiarlos. Corrí mi cara de inmediato.

No había cosa que detestara más que el sonido de una cámara o un flash.

—No te preocupes por la reunión. Diré que estás ocupado.— contrarresté a su comentario.

El simple pensamiento de la escuela idolatrándome aún más por ser el hijo del super actor y director Lee Joo-heon, me daba asco.

—Ya me organicé, estoy aquí y tengo la oportunidad de hacerlo.

—Te lo dije. No quiero que lo sepan.— respondí.

—Los maestros ya saben que eres mi hijo. ¿Qué pensarán si no voy ni una vez?

Simplemente seguirán con sus vidas como hicieron los últimos años.

—Solo haz lo que hiciste siempre.— acoté.— Necesito descansar. Por favor, vete por hoy.— finalicé la situación y comencé a caminar hacia adentro, dejándolo con sus palabras en el aire.

Realmente solo necesitaba descansar. Comenzaban a pasar demasiadas cosas que amenazaban con la tranquilidad remota en la que me estaba manejando.

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