Capítulo 24

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El tiempo pasaba tan lentamente que Coriolanus se sentía cada vez más moribundo.
Iba a la casa de la bandada de vez en cuando a recordar los dulces momentos con Lucy gray.
Su recuerdo favorito, naturalmente, habia sido la noche antes de que Lucy Gray se fuera.

Recordaba la delicadeza de los murmullos de placer de Lucy gray cada vez que Coriolanus la tocaba.
Pero al quedarse dormido lo atormentaba el recuerdo de Lucy gray llorando afuera de la academia después de enterarse de su infidelidad.

Se despertaba a media noche bañado de sudor, y mejor iba y se dormía con Tigris, como cuando tenía pesadillas de pequeño y ella lo calmaba.
O simplemente se quedaba dormido cuando se cansaba de llorar.

Ya toda la escuela sabía lo que había pasado entre ellos, y su mayor verdugo era el decano Highbottom, que se regodeaba al recordarle a Coriolanus lo patán qué había sido al engañar a la "niña"

Después de diez meses, y que lo de Lucy gray se le olvidó a la gente, Coriolanus comenzó a salir con Livia oficialmente por conveniencia. Cosa que solamente Coriolanus Tigris y Sejanus sabían.
La abuelatriz estaba más que encantada, mientras que Tigris y Sejanus no decían nada.

Era simple estar con ella, tan solo la tenía que escuchar hablar sobre maquillaje, sus amigas y su madre.
Le gustaba mucho cuando no hablaba.

Después de llevar seis meses con Livia, Coriolanus decidió tratar de buscar a Lucy gray secretamente, pero el decano Highbottom se dio cuenta y cerró cada indicio qué Lucy gray hubiera dejado, ya que él si se comunicaba con Lucy gray y la bandada, con el fin de que los ayudara a esconderse.

Mientras Coriolanus trataba de construirse una vida, Lucy gray trataba de sanar su corazón roto, escondiéndose en el distrito 12.
Se obligaba a tratar de olvidar todo lo que le recordaba a él.
Quemó la ropa que él le había visto, se planchaba el cabello y comenzó a maquillarse mucho, tratando de borrar lo que alguna vez le dejó ver, hasta que se cansó de eso.

Se sentía muy dolida, aunque eso no quitaba el hecho de que a veces sí lo extrañaba.

Un día, Lucy gray se fue a su pradera a tratar de terminar de componer precisamente una balada sobre su trágico romance, "no tan correspondido" creia ella.
Estaba acomodandose su guitarra en las piernas, cuando escuchó una rama quebrarse.

-Lo siento, no quería interrumpir! - dijo Barb Azure acercándose a Lucy gray..
-No te preocupes, aun no he comenzado, ¿pasa algo? - pregunto Lucy gray.
-No, no pasa nada... Tan solo quiero hablar contigo. - dijo Barb.
-Te escucho. - dijo Lucy gray haciéndole un espacio junto a ella en su roca.
-Nunca supe totalmente bien que pasó en el capitolio... ¿Quieres contarme? - pregunto Barb azure nerviosa.

Ese era un tema tacitamente prohibido para Lucy gray.

-Tuve sexo con él, y no sabes cuanto me arrepiento...le dejé verme totalmente. - dijo Lucy gray reprimiendo su enorme nudo en la garganta con coraje.
-Lo siento mucho Lucy gray. - dijo Barb azure abrazandola por los hombros.
-No lo sientas, fue mi culpa, y hasta eso él no me presionó...yo empecé. - dijo Lucy gray bajando su guitarra.
-Tu lo amabas, y confiaste en él! No te arrepientas de haber amado y dado lo mejor de ti.
Cada quien da lo que es. - dijo Barb azure.

-Pero le di mi primicia! - grito Lucy gray.
-No se que decirte. - dijo Barb azure.
-El hecho de haber abandonado el lugar donde más éxito tuvimos, ya es una enorme muestra de amor. - dijo Lucy gray abrazando a su prima.
-Ya veras que saldrás de esta Lucy gray, siempre lo haces. - dijo Barb azure dejando un beso en su cabeza.
-Te amo mucho!! - dijo Lucy gray sonriéndole con ternura.

Era la primera vez que volvía a sonreír sin fingir, sin dolor.

Después de un tiempo, Lucy Gray le escribio al decano Highbottom, quien extrañamente la ayudó mucho, y también la ayudó a esconderse de Coriolanus.
Él no decía nada de eso, cosa que Lucy Gray atesoraba mucho.
Maude Ivory logró graduarse con honores, al igual que Lucy Gray.
Y a pesar de todas las cosas buenas que le estaban sucediendo a Lucy gray y a la bandada... Siempre tenemos nostalgia al recordar cuando fuimos felices con esas personas, ¿verdad? Duele.

A Lucy gray a veces le dolia más que lo normal, pero usaba ese dolor de inspiración para su música, que si antes era buena... La perfeccionó como nadie en el mundo.
Escribió tres baladas, y cuando las pudo cantar sin llorar, supo que había cerrado esa herida.

Mientras que Coriolanus prefirió guardarse ese dolor y enterrarlo en lo más profundo de su corazón, en lugar de afrontarlo.
Jamás se perdonó por haber sido tan idiota... Pero lo hecho, hecho esta, y no vale la pena lamentarse y compadecerse de si mismo.
Y comenzó a salír con Livia Cardew.
Si se iba a masacrar estando con alguien... Mejor lo haría por dinero.

Y como era prácticamente un muerto en vida, cerró su corazón, y logró engañar a Livia.
El tiempo pasaba volando, y Coriolanus se rompia lentamente.
Tigris, quien había sido su confidente desde que Lucy Gray se había ido hace dos años, ya no sabía ni que decirle.
Había sido un tonto, y toda la culpa era suya.
Un día que fue a visitar la antigua casa de la bandada, pasó al jardín, en donde había vivido momentos tan hermosos junto a Lucy gray.
Y le costaba pensar que ya habían pasado seis meses, luego un año, luego dos años... Y el tiempo seguía corriendo.

Ese día, fue a sentarse bajo el árbol donde solía tener días de campo junto a Lucy gray, y de vez en cuando con Maude Ivory.

~Flashback~


-Vamos! Atrapame! - gritaba Lucy gray entre carcajadas, mientras Coriolanus corría hacia ella.
Ese día estaba lloviendo a cántaros, pero Lucy gray se negaba a que eso arruinara su cita.
-Rindete mejor, amor. - dijo Coriolanus limpiandose los chorros de agua qué le escurrian por el rostro.
-Jamás! - grito Lucy gray riendo, hasta que se resbaló y se cayó de senton.

Coriolanus estalló en carcajadas al igual que ella, la levantó en sus brazos y se fueron debajo de un árbol.
-Creo que este ha sido de los mejores cumpleaños que he tenido. - dijo Lucy gray.
-ALTO, ¿ES TU CUMPLEAÑOS?! - pregunto Coriolanus poniéndose frente a ella.
Lucy Gray le restó importancia, haciendo como si nada.
-Si, hoy cumplo 17.- dijo Lucy gray acariciando el rostro de Coriolanus.
-Debiste decirme!! NO TENGO REGALO PARA TI!! - dijo Coriolanus apartando la mano de Lucy gray de su rostro.
- Mejor prometeme que estarás por el resto de mis días.- dijo Lucy gray acercándose a besarlo.
-Sigo molesto, pero aprovechare cada segundo que tengo contigo. - dijo Coriolanus haciéndola reír.

Fin




Holass, les dejo un capitulo de esta triste historia, no se olviden de votar y comentar ✨💗 espero que les guste, los quiero mis pastelitos de nata!! 💗🥮

balada de los trágicos amantes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora