Llamas de devoción la historia de amor de dos Dragones

22

EL DESVANECIMIENTO DE LA DEVOCION

(LYSANDER)

Había concluido otra reunión con el consejo, me sentía aliviado por volver a casa y pasar tiempo con mi Elowen. Al llegar al castillo, mi corazón se aceleraba con la anticipación de ver a Elowen. A pesar de las tensiones y responsabilidades como rey, ella era mi refugio, mi luz en medio de la oscuridad política y los desafíos que enfrentaba nuestro reino.

Al entrar a la habitación no la encontré ahí, así que fui a buscarla a la biblioteca, pero tampoco estaba, me dirigí al jardín y tampoco estaba era raro ella siempre estaba en el castillo. La preocupación comenzó a apoderarse de mí mientras recorría el castillo buscándola. ¿Dónde podría estar? ¿Se habría sentido mal? Mi mente empezaba a imaginar escenarios oscuros mientras continuaba mi búsqueda, sin encontrar rastro de ella en ninguna parte del castillo.

-Abuelo ¿has visto a Elowen? - le pregunté a mi abuelo el pareció extrañado, pero negó

No la encontrábamos y ya me estaba desesperando

- Marcus- llame a mi amigo que venía corriendo en mi dirección- ordena una búsqueda nadie duerme hasta que Elowen aparezca- dije desesperado. Marcus asintió con seriedad ante mi orden y rápidamente comenzó a coordinar a los guardias y sirvientes para iniciar la búsqueda. Mientras tanto, mi corazón latía con fuerza, lleno de temor por lo que pudiera haberle pasado a Elowen.

- Vamos a encontrarla, Lysander -me aseguró Marcus, colocando una mano reconfortante en mi hombro-. No te preocupes.

A pesar de sus palabras, la angustia seguía creciendo en mí mientras esperaba ansiosamente cualquier noticia sobre Elowen.
Me fui a nuestra habitación a ver si encontraba algo una pista o su paradero. Al entrar a mi habitación se sentía fría Elowen siempre la mantuvo cálida ahora mi habitación estaba sin vida. Me aferré a la almohada, respirando profundamente su fragancia, tratando de encontrar consuelo en su presencia, aunque ella no estuviera físicamente allí. Cerré los ojos y recordé los momentos felices que compartimos juntos, deseando que este terrible sueño terminara y pudiera despertar junto a ella.

Después de unos momentos, me levanté decidido a buscar cualquier pista que pudiera indicar dónde había ido Elowen. Revisé cada rincón de la habitación, buscando cualquier indicio que pudiera ayudarme a encontrarla.

Encontré una nota debajo de la mesita de noche la tomé y vi lo que había escrito

Necesito estar sola un tiempo Lysander no me siento segura con mi decisión

La confusión y el dolor se apoderaron de mí al leer esas palabras. ¿Por qué de repente necesitaba estar sola? ¿Qué había sucedido para que se sintiera insegura con su decisión de quedarse en Mythrandia? Miles de preguntas inundaron mi mente, pero ninguna respuesta se presentaba de inmediato.

Me senté en la cama, sintiendo un vacío en el pecho que me impedía respirar con normalidad. ¿Qué había pasado mientras yo estaba ocupado con mis deberes reales? ¿Había algo que pudiera haber hecho para evitar que se sintiera así? Un torbellino de pensamientos y emociones me envolvió mientras intentaba comprender la situación.

La noche transcurrió sin que pudiera conciliar el sueño. Cada momento que pasaba sin noticias de Elowen aumentaba mi angustia y desesperación. La búsqueda continuaba, pero los resultados eran escasos y mi paciencia se estaba agotando rápidamente.

Arcanum seguía siendo una posibilidad inquietante. Aunque sabía lo peligroso que sería para ella regresar allí, no podía evitar preocuparme por su seguridad. ¿Qué había motivado su repentina necesidad de alejarse? ¿Había algo relacionado con Arcanum que la estaba perturbando?

Mi mente se llenaba de preguntas sin respuesta mientras me sumía en un estado de ansiedad y temor por el paradero de Elowen. Sin saber qué más hacer, me sentía impotente y desesperado por encontrarla.

Solo anhelaba encontrarla, abrazarla con fuerza y preguntarle por qué sentía la necesidad de alejarse de mí. Mi corazón latía con fuerza ante la incertidumbre de su paradero.

Continuaba buscando en cada rincón del castillo y del reino, sin descanso ni tregua, con la esperanza de encontrar alguna pista que me llevara a ella. Mis pensamientos estaban llenos de preocupación y angustia, y solo quería tenerla a salvo a mi lado nuevamente. Tenía el corazón lleno de ansiedad, me adentré en la búsqueda de Elowen, decidido a encontrarla sin importar los obstáculos que se interpusieran en mi camino. Cada paso que daba resonaba con la urgencia de reunirme con ella, y mi mente se llenaba de imágenes de su rostro, su risa y su presencia reconfortante.

Recorrí cada rincón del castillo y luego me aventuré más allá de sus muros, explorando los senderos que llevaban a los lugares más remotos del reino. Mis sentidos estaban alertas, buscando cualquier indicio que pudiera llevarme hasta ella, mientras mi corazón latía con la esperanza de encontrarla sana y salva.

El tiempo parecía detenerse mientras seguía mi búsqueda incansable, aferrándome a la esperanza de que pronto volvería a estar junto a Elowen, y prometiéndome a mí mismo no descansar hasta encontrarla.