XV

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Cusack avanza dentro de la mente de Merlín, una vieja casa aparece frente a él, estaba llena de libros que reconoce de inmediato.

-Ya veo, así que el niño es descendiente de Belialium igual que nosotros, es una lástima, sin duda tenía mucho potencial- el hombre comienza a buscar dentro de las habitaciones, mientras escucha el llanto de un pequeño, hacer eco en las paredes- No podrás ocultarte de mi, tu propia mente se siente aterrada en este momento, igual que la de tu querido rey- se ríe y entonces una puerta se abre de golpe a su costado.

Él se acerca y ve en su interior, la habitación tenía varias runas y símbolos escritos en sus paredes, al centro una figura está tirada de costado en el piso, se trata de una chica, parece desmayada y está desnuda.

-Así que tu consciencia finalmente colapsó y mira lo que tenemos aquí- dice acercando su mano hasta la espalda de Merlin y acariciándola- Eres una hermosura, quizás no tenga que matarte, seguramente podría usarse para tener un hijo- agrega lascivo, entonces ella se levanta y sujeta su brazo- ¿Pero cómo? ¡No es posible!

-Pensabas que podrías ganarme dentro de mi mente- dice ella con sus ojos dorados viéndolo fijamente con una expresión que hace que al otro se le hele la sangre.

Trata de soltarse y de huir, pero la puerta se cierra tras él, serpientes comienzan a brotar del suelo y a enredarse en sus pies, él las patea mientras Merlín comienza a reír, su mano duele, no solo por la presión sino que ahora hay una sensación de calor alrededor de su piel, gira su vista hasta el brazo de Merlín y sus ojos se abren de sorpresa.

-Veo que tú sabes lo que significan- le dice ella dando un vistazo a las runas que brillaban en su piel- Cusack… eres un Paladín, un mago guerrero, también dominas la Invasión mental, pero nisiquiera tú podrías vencerme.

***

-¡Hey, hey! ¡Segador que te pasa!- dice Chandler mientras sacude a su compañero una y otra vez, este se ha quedado estático por varios minutos, no reacciona a sus llamados, su cuerpo está sudando y su respiración se agita unos segundos para luego detenerse por completo y finalmente su cuerpo sin vida cae al piso, con un hilo de sangre saliendo de su boca- ¡¿Qué fue lo que hiciste, maldito?!

Merlin también sale de su trance, su nariz comienza a sangrar mientras sus ideas tratan de aclararse, apenas logra mantener la concentración cuando Zeldris está de nuevo a unos pasos de Arthur, pero está vez él logra defenderse, libre del control de Cusack puede volver a pelear aunque sabía que aún estaba en desventaja.

-Resiste…- le dice la pelinegra sintiéndose débil, los hechizos en el lugar también pierden fuerza y cuando se da cuenta, Chandler está apuntando directamente hacia ella.

-Quizás tuviste suerte, pero este es tu fin ¡Rayo exterminador!- conjura golpeando de lleno a Merlin, Arthur trata de ir en su ayuda, pero Zeldris le cierra el paso y hace un corte en su brazo, mientras la tierra bajo de ellos comienza a vibrar debido a la pelea.

-¡Cómo te atreves a matar a mi amigo!- gritaba a Chandler mientras apunta está vez hacia el rey quien apenas se defendía de los ataques de pelinegro. Carga su magia pero antes de poder dispararla una onda lo impacta dejándolo herido- Imposible eso fue… mi propio rayo… exterminador… ¿Cómo es qué…?

Todos giran en esa dirección, dónde Merlín está dentro de lo que parece un cubo hecho de magia color rojizo, su capa ha desaparecido y su ropa está bastante quemada por el ataque de Chandler, lo cual revela sus brazos y el inicio de sus pechos.

-¿Es una bruja?- dice Zeldris.

-Oye, tenle un poco más de respeto- le dice Arthur ahora con una sonrisa de confianza.

-Ya veo, así que ella y tú…

-¡Maldita!- interrumpe Chandler- ¿Aprendiste mi ataque solo con verlo? Es imposible, eso no tiene lógica, tú eres…

-Mi nombre es Merlín- dice con la voz agitada- Y soy la hechicera del rey de Camelot- Chandler ve su brazo expuesto y pone la misma cara que su compañero al leer lo que está escrito en él.

-Ese maldito lo logró, ¡El muy hijo de perra lo logró!- comienza a reír a carcajadas, mientras el cielo comienza a oscurecerse como si de la noche se tratase- Veamos si las leyendas sobre ti eran ciertas, hija de Belialium- dice aquel hombre en el lenguaje natal de Merlin, mientras se eleva por el cielo y varios trozos de piedras incandescentes comienzan a llover sobre el terreno, Merlín enfoca su vista en cada una de ellas desintegrándolas en el aire con su magia antes de que toquen el suelo y causando una tormenta de polvo.

-¡Vas a agotar tu vida!- le grita Zeldris.

-No me importa si logro ganarle y llevarla al infierno conmigo, mientras ella siga con vida, ninguno de nosotros está a salvó- ríe el viejo con los ojos inyectados en sangre y su expresión enloquecida, la lluvia de rocas va mermando poco a poco, hasta que su cuerpo cae al suelo, luciendo más decrépito de lo que era hasta unos instantes y la oscuridad va desapareciendo.

-¡Merlín!- grita Arthur yendo hasta donde estaba la maga, su cubo ha desaparecido y no logra ver más que una nube de polvo y humo.

-¡Tu oponente soy yo!- dice Zeldris tras él y está punto de atacarlo por la espalda pero una flecha se clava en su brazo.

-Vaya alboroto que has causado- dice Lancelot mientras sostiene su arco apuntando a Zeldris- Si yo fuera tú, no intentaría nada raro y me quedaría quieto.

-¡Así que te has aliado con el amante de tu prometida!- se burla Zeldris viendo a Arthur quien continúa buscando a Merlin, y luego aún con su brazo herido clava su espada en el piso con todas fuerzas mientras una fecha de Lancelot lo atraviesa, pero es demasiado tarde por qué el suelo ha comenzado a ceder.

Los restos del castillo comienzan a deslizarse por el desfiladero, las rocas chocan una contra otra y se hunden en el mar, los soldados retroceden de la orilla, Lancelot apenas logra escapar del derrumbe y es ayudado por Percival quien ha llegado junto con otros caballeros.

Nanashi se coloca tras el rubio apuntando su espada contra su cuello y Lancelot levanta las manos soltando su arco.

***

-¡Majestad! ¡Majestad!- gritan todos una vez que pueden acercarse al sitio.

Los pocos soldados enemigos que quedaban se habían retirado a las montañas y estaban seguros de que no querrían una revancha, el poder militar combinado los había aplastado y apenas sufriendo bajas.

-Ya les dije lo que pasó- dice Lancelot escupiendo un chorro de sangre mientras Ironside y Pellgarde lo golpean- Zeldris provocó el derrumbe al verse acorralado, sabía que el lugar estaba a punto de colapsar y ya no tenía nada que perder, trate de ir hasta el rey, pero estaba buscando a la mag… a Merlin- les explica.

-Está vivo, lo sé- interviene Nanashi- Vamos a encontrarlo.

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