Dos Corazones En Juego - Alan Mozo

Capitulo 1

- Tu cepillo, tú computadora, tus toallas, no olvides tus libros - decía mi mamá mientras daba vueltas por todo mi cuarto buscando que más podía faltarme

- No te preocupes mami, llevo todo lo necesario. No es la primera vez que voy a Guadalajara y no está tan lejos, si necesito algo que de verdad sea de importancia vendré por él - dije para tranquilizarla

- No es la primera vez que visitas Guadalajara - se acercó a mi - pero si la primera vez que te vas por tanto tiempo sola a un lugar. Por más cerca que estés te vamos a extrañar muchísimo.

- Yo también a ustedes - empezaba a sentir ganas de llorar - serán solo unos meses, mami. Después me tendrán de vuelta aquí

- Voy a estar contando los días para tenerte de vuelta

Estaba a punto de irme de intercambio. La universidad en la que estoy estudiando tiene varios convenios con universidades de otros estados y desde hace medio año estuve arreglando papales para irme de intercambio a Guadalajara.

No quería irme a algún lugar más lejano, lo único que quería probar era estar un poco lejos de mi familia y probar un poco el ser independiente.

Baje a la sala y ya estaban mis hermanos y mi papá abajo esperandome para llevarme a la central de autobuses. No vi necesario irme en avión, ya que la distancia es muy corta y disfruto más los viajes en carretera.

- ¿No olvidas nada? - preguntó mi papá

- Ya revisé 5 veces todo y creo que no

- ¿Lista?

- Sí, eso creo

- No me quiero despedir aquí, ya sube al carro para irnos

- ¿Vas a ir mamá? - pregunté mientras volteaba a verla

- Creo que nos despedimos desde aquí - se acercó y me abrazó - Cuídate mucho y disfruta el viaje

Ya era imposible guardar las lágrimas, el nudo en mi garganta se iba deshaciendo conforme salían las lágrimas de mis ojos - Gracias, te voy a extrañar tanto

- Te amo - dijo para después separarnos. Le sonreí y salí para subirme al auto, en el que estaba ya mi hermano y mi papá, abrí la ventana y me volví a despedir de mi mamá.

Llegamos a la central de autobuses y fue en ese momento en el que me despedí de mi papá y de mi hermano.

- Cuídate mucho, hija. Cualquier cosa que necesites no dudes en decirnos. Y siempre mantente en contacto.

- Claro que sí, papi. Cualquier cosa que pase yo les digo - lo abracé - te quiero tanto - Después de un momento me separé y era el turno de mi hermano.

- Ni creas que te voy a decir cosas bonitas

- No hace falta, se que me amas y que me vas a extrañar

- Nada más porque van a ser 6 meses, sino cambiaba mi cuarto al tuyo

- Lástima

Me miró por un momento y me abrazó - Cuídate, aprovecha cada momento de este viaje

- Lo haré, gracias

- Y tráeme un autógrafo de cualquier jugador

- Todos los autógrafo que consiga van a ser para mí no te emociones.

Creo que no lo había dicho, toda mi familia es Chiva, nos gusta el fútbol, es el único gusto que compartimos mis hermanos, así que esa era una de las principales razones por las que iba a Guadalajara.

Me subí al autobús, y me despedí por últimamente de mi papá y mi hermano, después de unos minutos el camión salió directo a Guadalajara, sabía que iba a ser un viaje que cambiaría mi vida académica y laboral, pero nunca me imaginé que cambiaría también mi vida social.