Capitulo 11

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Me mandaron a hablar y me dijeron que en unos minutos iban a hacerle una entrevista a Alan y prácticamente yo iba a estar con él cuidando que no hicieran preguntas fuera de lugar y también iba a ayudar a acomodar todo lo necesario para la entrevista. Yo junto a otras dos personas acomodamos las sillas, rebotadores de luz y cuando llegaron las personas que iban a hacer entrevista también acomodamos cámaras y micrófonos. Después de unos minutos llegó Alan y a mí ya me dejaron sola con ellos, fui la encargada también de acomodarle el micrófono. Era solo un poco más alto que yo, mido 1.60 así que quedaba a la altura perfecta para acomodarle el micrófono sin problema. Empezó la entrevista y yo solo tenía que estar detrás de cámaras revisando que todo estuviera bien. Fue una entrevista corta no más 20 minutos. Se terminó y Alan se despidió yo me quedé ahí mientras recogía todo. Cómo ya estaba yo sola tenía que guardar todo así que no podía llevar todas las cosas yo sola primero lleve los rebotadores de luz y luego regrese por las sillas, pero cuando regrese Alan ya venía con ellas.

- Ese es mi trabajo - dije

- Son dos sillas, no es problema

- Sigue siendo mi trabajo

- ¿Ya saliste? - preguntó ignorando lo que decía

- Al parecer ya - saqué mi celular y ví la hora - faltan 10 minutos para mi hora de salida, no creo que tenga nada que hacer en 10 minutos.

- ¿No te gustaría ir a cenar?

- Muchas gracias pero tengo tarea que hacer

- Entonces déjame llevarte

- ¿No crees que sería sospechoso que el mismo auto me lleve a mi casa por varios días? Y no solo que me lleve si no que me recoja

- La gente ni se ha de dar cuenta y tú imaginandote tantas cosas. Anda deja que te lleve

- ¿No hay nadie esperándote en casa?

- Mi perro, pero estoy seguro que me esperara un poco más

- ¿Tienes perro?

- Coco, mira es él - sacó su celular y me mostró una foto de él - él es mi hijo

- Ay que lindo - Tomé el celular para verlo mejor

- ¿Tú no tienes?

- Sí, tengo un Golden Retriver, se llama Xolo - le entregué su celular y saqué el mío para mostrárselo - Es él

- Oh está muy lindo - tomó el celular y agrandó la foto - ¿Qué es eso? Apuntó el celular

- Oh tengo un cuyo también - me dió el celular y le mostré la foto del cuyo - Se llama fluffy

- Que bonito - me entregó el celular - ¿Los trajiste contigo?

- No - bajé mi mirada al celular - Se quedaron en Zacatecas. No sabía si iba a poder con los dos entre las clases y pues no sabía si iba a hacer las prácticas así que no me arriesgue y se los dejé a mi mamá

- Sí, a mi también a mí no me gusta dejar a Coco solo en casa los días de partido, son dos días dejarlo solo

- Ya ves por eso aprovecha y ve a verlo temprano hoy

- Ay, son solo unos minutos que voy a llegar tarde.

- Está bien - fue Alan por sus cosas y yo fui con mi jefe a decirle que ya me iba a ir y solo me dió una hojas para checar la hora de salida, cuando salí al estacionamiento ya estaba ahí Alan. Me subí a su auto y salimos. Gracias a Dios ya era tarde y no había aficionados fuera de Verde Valle que me vieran arriba de su auto.

Dos Corazones En Juego - Alan Mozo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora