34.Una noche juntos

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Advertencia de contenido explícito.

---MAX¹---

Dos días después.

Se sentía bien estar liberado de presiones como lo eran el tecno y el equipo de basket, por las vacaciones.

El problema con mis padres ya estaba siendo menos fuerte cada vez, eso me hacía sentir mejor, por qué el proceso de divorcio era algo complicado, pero a fin de cuentas, ya estaban de acuerdo los dos.

Mi padre ya no venía a la casa, había venido por sus cosas sin decir más y se fue, pero eso de alguna manera no me importo.

Y mi mamá ya no era tan fuerte conmigo, bueno, tampoco pasaba mucho tiempo en casa. Ella había conseguido pareja, eso me hacía feliz, que ella tuviera aquella distracción que la hiciera sentir mejor. Hoy, por ejemplo, me había dicho que llegaría hasta mañana en la tarde, dijo que por trabajo, pero no me debe explicaciones, por qué está bien.

De todos modos, aproveche eso, y llame a Checo.

Sería lindo pasar tan solo el resto de la tarde juntos, incluso dormir, me gusta estar con el, así que no descarte la opción, le dije que trajera un cambio de ropa por si se quedaba a dormir, y el acepto gustoso.

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Eran las 6:00 de la tarde, el ya había llegado. Cómo siempre, nos recibíamos con un abrazo y un beso muy tierno.

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Estuvimos un rato sentados en la sala, abrazados y viendo The Batman, era de nuestras películas favoritas

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8:40PM

-Chequito, ¿Que se te antoja?- pregunté yo.

-Pues unos besotes tuyos, eso siempre.- dijo rodando los ojos con una sonrisa de lado.

-¡De cenar, Checo!- me reí y lo abrace por la cintura, el me miró sonriente.

-Mmm, lo que quieras hacer, se que cocinas bien.- me dio un beso de piquito.

-Mmm, entonces te sorprenderé.- Le guiñe un ojo.

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Me dispuse a hacer la cena, pero sería aburrido si estuviera yo solo en la cocina, así que Chequito estaba conmigo, ayudándome en algunas cosas.

-Mmm... Pásame la harina.- dije yo.

-Okey, okey.- se dirigió a la alacena.- ¿Harina Nixtamal o harina de hot cakes?

-¡CHECO!- Estalle en risas.

-¿Queee?- preguntó extrañado.

-¿Cómo que qué?- seguía riendo.

-¡AHHH!, ¡NO MANCHES!- El soltó una carcajada y me pasó la harina de Hot Cakes.

...

-Mmm, ¿Que hace falta?- me pregunté.

-Mmm...- el me miró.

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